Un Omega Para Siete Alfas ❥ Kookmin [Corrigiendo]

Capitulo 1. [형제]

Aclaración.

Esta historia está basada enel manwa: into the rosa garden.

Si no es de tu agrado limitate a leerla. (Esta historia puede contener faltas de ortografía)

Sus ojos detallaron la decoración del lugar,los finos adornos decoraban cada una de las paredes y el sutil aroma a jazmín se colaba por sus fosas nasales. Fue recibido por un hombre de mayor edad que se inclinó ante su presencia, el cual lo guío en medio de la gran multitud.

Varios ojos se pasaron en su ser y los murmullos no tardaron en llegar a sus oídos. Aunque nadie lo notara una pequeña sonrisa se dibujo en sus labios por debajo de la bufanda roja que portaba, el hombre que lo había escoltado detuvo su caminar, haciendo una pequeña reverencia antes retirarse, frente a el su primo lo miraba de vuelta. El familiar olor a cedro mojado lo envolvío así mismo como el suave aroma a rosas, su ceño se frunció en total desaprobación.

Sus ojos bajaron lentamente asta encontrarse con unos destellos celeste, un hermoso Omega de cabellos dorados y de piel pálida se encontraba al lado de jungkook. por sus finas ropas podía jurar que era de la realeza.

-¿Que te trae por aquí, Park?-El gruñido que emitió después de repetir su apellido logró desanimarlo.

Jimin suspiro tomándose el tiempo necesario para escanear el cuerpo del Omega antes de responder, el fino traje color blanco se pegaba a su delicado cuerpo como una segunda capa la cual acentuaba sus curvas. Su aura delicada y inocente lograba irritar a su lobo, más cuando esté se pego al brazo de Jeon.

Al parecer jungkook noto su mirada puesta en su esposo porque inmediatamente se interpuso entre ellos.

-Hablemos-Comento alejando su vista de Omega para poder contemplar las cuencas oscuras que lo miraban de vuelta

Jungkook asistió susurrandole algo a su esposo para después perderse por el pasillo seguido de jimin.

La puerta fue puesta bajo llave por precaución, la pequeña luz que se filtraba por la cortina fue tan clara para visualizar cómo dos amantes se abrazaban. Jimin recargaba su barbilla encima de su hombro dejando fluir sus lágrimas. El ¿por qué? recorría su mente todas las noches antes de dormir. Muchas veces llegó a implorar que solo fuera un sueño y que al despertar el sería un bonito Omega pero cada vez que sonaba la campana de su oficina la vida le repetía que está era su realidad.

En varias ocasiones se imagino a si mismo con abdomen abultado en la espera de un cachorro y las manos del alfa envueltos en su cintura, protegiéndolos. Pero fue más su dolor al saber que su alfa cumpliría ese sueño pero no con el.

-Jimin-Le susurro.

-No por favor...

Jungkook se limito a hablar y lentamente con algo de dificultad alejo las manos de jimin. Se arrepintió al instante, los lágrimas eran la escena principal en su hermoso rostro, tomo ambas mejillas como siempre lo había hecho antes de depositar un tierno beso en sus labios.

-Me he enamorado...

-Basta-imploro.

-Jimin...

-he dicho que ¡Basta!-utilizó su voz de mando importandole muy poco que lo escucharán.

Miro una vez al hombre frente a el, negando y dejando salir una última lágrima para después salir corriendo en dirección al patio trasero, con cada paso que dio pudo sentir el frío aire de Otoño colarse entre sus ropas.

Alos pocos meses Park Jimin se entero que la Familia Jeon esperaba un nuevo integrante.

〃ﾟP&Jﾟ⁠〃

La bolsa cayó enfrente de sus pies, como si fueran animales hambrientos de carne. No les importo humillarse mucho menos ensuciarse de barró para recoger las monedas de oro.

-Lo entendieron.

El jefe de la banda levanto la cabeza asintiendo en repentinas ocasiones, mientras el reflejo de las monedas iluminaba sus ojos.

-Perfecto.

〃ﾟP&Jﾟ⁠〃

El pequeño Omega despertó con sed, a su lado jungkook se encontraba plácidamente dormido y sería muy cruel despertarlo después de estar todo el día en la oficina trabajando para el y para su futuro cachorro. Sus pies tocaron el frío suelo haciendo temblar, envolvío su cuerpo con una manta antes de bajar ala cocina donde se decidió por vaso de leche.

El silencio fue acompañante de la pequeña canción de cuna que empezaba a brotar de sus labios. Taehyung reposó su mano en su estómago y una pequeña patada fue lo que recibió por respuesta, estaba más que feliz.

Un pequeño ruido a su costado lo hizo alarmarse, pero fue demasiado tarde. El cuchillo había atravesado su estómago, una mano áspera y asquerosa envolvío sus cuerdas vocales evitando que de su boca surgiera un ruido, sus ojos de empañaron al sentir el líquido caliente deslizarse por tu pijama.

-No...

-shh no queremos que tú alfa vea el regalo antes de tiempo -Por la falta de iluminación Taehyung solo pudo diferenciar una cicatriz que adornaba el ojo derecho del hombre.

Lloro y pataleo asta que un gruñido proveniente de la puerta los alarmó, era su alfa, taehyung soltó un suspiro aliviado, pero la pareja se había precipitado antes de tiempo, desde la oscuridad del comedor un segundo expetador se entraba apuntado el estómago del Omega, el cual no dudo en jalar el gatillo.

Ambos sujetos aprovecharon la distracción del alfa para ir.

Mientras tanto jungkook observaba el cuerpo inerte de su esposo, cayo rendido a su lado. Un dolor casi insoportable se inscruto en su pecho mismo que causó la ruptura de su lazo. El grito inhumano que dejó salir mientras sostenía el cuerpo de su antigua pareja, fue una advertencia para aquel que le rebato la felicidad en una sola noche.

Así como el lo había hecho anteriormente.

Que te ha parecido la historia...