💫 La tierra está llena de muchos secretos, uno de ellos es el amor qué Roberto le tiene a su mejor amigo Diego.
「Dónde Roberto y Barca protagonizan ésta historia en tiempos de preparatoria」
📍- El modo de escritura de éste fic será en aspecto de n...
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El sonido de las teclas del computador siendo presionadas con fiereza era lo único que podría apreciarse en el comedor, Roberto no podía más con el estrés de terminar ese trabajo final que equivaldría a más de la mitad de su calificación final, sentía cómo sí estuviera a punto de colapsar.
La taza de café a su lado ya se encontraba vacía, las manchas en el fondo del sobrante del café delataban que había servido un poquito más de cafeína de lo necesario y, aún así, se sentía desfallecer. Sus párpados pesaban cómo mil demonios y estaba seguro que sus ojos se encontraban rojos.
Diego, su novio, se encontraba en el marco de la puerta de la cocina apoyando uno de sus hombros en la madera y con una taza de té en sus manos. No había pasado mucho tiempo desde que él estaba ahí, quizá sólo cinco minutos en los que sllo se había dedicado a observar a su menor con detenimiento, dedicándole completa atención a su ceño fruncido y pequeños pucheritos por la frustración.
ㅡ Tienes que ir a dormir ya, Roberto ㅡ casi le suplicó por ello el mayor de ambos reuniendo la confianza para adentrarse al lugar (improvisado) de trabajo del mencionado ㅡ Ya es muy tarde ㅡ
Tras la mención del tiempo, el de cabello negro dió un leve brinco e inmediatamente sus ojos recayeron en el reloj digital en la esquina de la pantalla que marcaba con exactitud las once con cuarenta y seis minutos.
ㅡ Tienes razón... ㅡ Derrotado, recargó su frente sobre su propia palma sintiéndose culpable por molestar a su querido novio a estas altas horas.
¿Qué tan mala suerte debía tener para que en su casa justo el día en que debía de entregar un trabajo de tal magnitud se fuera la luz?
ㅡ Dame cinco minutos y dejaré todo cómo sí nunca hubiera estado aquí ㅡ
