Amada por un vampiro +16

Orfanato (editado)

Era una chica hermosa, su pelo rubio y sus ojos color azul claros, tenia 17 años. Sus padres los habían asesinado cuando ella era una bebé de meses, era de poco hablar y sufría traumas de soledad ya que nadie la reclamaba no tenía ningún familiar.

El orfanato no era un lugar muy agradable pues habían constantes conflictos entre alumnos, muchos en depresión otros totalmente fuera de lugar, algunos insoportables.
Pero había uno en especial que llamaba su atención, él era rubio ojos marrones su cabello no muy largo, tatuajes, media 6'2 por, tenía su cuerpo totalmente marcado y tatuajes un tanto extraños.

siempre se vestía de negro, su nombre es jashlen.
Él era muy callado no hablaba con nadie más que con la profesora cuando tenía que preguntar algo, tenía una forma de mirar bastante intimidante nadie se atrevía a dirigirle la palabra.
Parecía de otro mundo, en el orfanato todas las chicas se volvían locas por él, las escuchaba decir que él era jodidamente guapo y para que decir que no si ellas tenían toda la razón aunque yo me mostraba indiferente y no lo miraba pero de vez en cuando lo observaba sin que él se de cuenta, no era porque me gustaba simplemente él no parecía alguien normal.

No se puede negar que es bastante sexy y tiene un cuerpo demasiado perfecto pero su actitud y su manera de hablar lo hacían ver totalmente distinto a los chichos del orfanato su aire de superioridad y su ego enorme eran unas de sus características principales. Al igual que él yo tampoco hablaba con nadie y me daba igual todo, no miraba a nadie y simplemente marcaba distancia.

Estábamos en el comedor en la hora del desayuno  hasta que a uno de los más problemáticos se le ocurrió una gran idea, ir a molestar a jashlen por el simple hecho de que estaba celoso de que todas lo quisieran y babearan por él
—oye tú te crees muy importante solo porque las chicas te miran?-
Hizo un intento de agarrarlo por el cuello pero jashlen fue veloz y no pudo agarrar más que un lado de su chaqueta
— tienes dos segundos para que me sueltes si no quieres perder la mano- dijo jashlen fríamente mientras sus ojos lo miraban con asco.
El chicho trago en seco jashlen le hablo de una manera tan intimidante que todos sintieron miedo pero por alguna razón yo no, el chico soltó la chaqueta de jashlen lo miro diez segundos y se fue.