4. Capítulo

33 2 0
                                    

Nos levantamos como siempre, Katri encima de mí como ya es costumbre, primera noche y parte de la mañana con ella y quiero seguir durmiendo el resto de mi vida y despertar solo con ella.

Miro hacia la pared donde está mi reloj de mi habitación para comprobar que son las 8:30 de la mañana. No quiero despertar a mi princesa por lo cual trato de no moverme tanto para no hacerla despertar.

No hice ningún movimiento, más sin embargo Katrina se levantó bruscamente para ir corriendo a el baño conmigo siguendola detras.

La veo agacharse y yo me encorvo junto a ella para luego tomarle el cabello y sostenerlo para que no se ensucie, hago masajes en su espalda hasta que pare las arcadas.

Deja de vomitar yo hago lo mismo que la otra vez , me levanto, preciono el botoncito del retrete y la ayudo a ponerse de pie mientras se va quitando la pijama de ayer justamente de seda.

Decido dejarla sola porque sino estuviera haciéndola mía y creo que no está de ánimos para hacer eso así que decido dejarla en la ducha y yo voy arreglando la cama y sacando la ropa que me voy a poner para luego ir a el primer ultrasonido de nuestro bebito.

Mientras Katri se baña yo voy llamando para apartar la cita. Tomo mi teléfono y hago la llamada, me contesta la misma recepcionista y me dice que la agenda del doctor está desde las 2:30 de la tarde a las 6:40 así que me da tiempo de llevar a comer a mi preciosa novia.

Le doy las gracias y cuelgo, en ese preciso momento sale Katri envuelta en su toalla.

-¿Con quién hablabas?. - Me pregunta.

- Te tengo una sorpresa, pero todavía no te la diré. - Le lanzo un beso y ella rueda sus hermosos ojos.

- Entonces tampoco te diré lo que tenía pensado.- Se encoje de hombros .

- Tu no tienes nada que decirme, solo me dices eso para que yo te diga lo mío, te conozco, preciosa.- Le guiño un ojo .

- Bueno... tu te lo pierdes.- Vuelve a encogerse de hombros.

Me voy acercando mientras se pone su brasier negro de encaje, la tomo de la cintura y beso sus hombros hasta bajar por su clavícula. No se resiste más y me toma del cuello y estampa nuestros labios, de inmediato le correspondo su beso mientras mis manos atrevidas viajan a su respingón y redondito trasero cubierto por su simple ropa interior de encaje color negro. Ella sabe que encantan.

La tomo en mis brazos y camino hasta dejarla en la cama ya arreglada y nos besamos como si no hubiera un mañana. Tomo su pierna izquierda y la subo a mi cadera mientras yo estoy encima de ella sin hacerle daño y apretándole parte de su trasero.

La levanto un poco solo para quitarle su brasier de un tirón y para luego empezar a besar sus medianos pechos que tanto me encantan. Ella suelta esos soniditos tan tiernos que me vuelven loco de solo escucharlos, y yo aún sigo besando y chupando sus picos y pechos. La vuelvo a levantar de la cadera para quitarle la única prenda que la cubre y para luego separarme un poco sin dejarla de besar y bajar de la cama para poder quitar mi bóxer y quitar su panti. Me vuelvo a poner encima de ella y esta vez recorro todo su cuerpo con mis labios y lengua y ella suelta esos jadeos y gemidos tan tiernos.
No espero más y abro sus piernas, ella sin esperar enrolla sus gruesas piernas en mi torso y yo la besó de nuevo mientras me uno a ella en una suave y lenta embestida. Ella al sentirme deja de besarme y abre su boquita para soltar un gemido. Me muevo con suavidad sin llegar a lastimarla, con el paso de las embestidas, voy subiendo de nivel hasta tener un ritmo muy constante que la hace llegar a su orgasmo, mientras yo me sigo moviendo en ella hasta llegar al mío.

- Te amo.- decimos al unísono, al terminar de hacer el amor. Reímos y nos besamos para último salir de ella y acostarme a su lado. La abrazo y la traigo hasta que queda encima de mí como siempre.

Experimentando un embarazo  [EN ACTUALIZACIÓN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora