La Libertad de Soñar

Capítulo 4: El periódico

(¡Extra, Extra!)

Pueblo Mágico se dispersa por falta de oportunidades

Plut. 32/13/1202

Se muda un gran sector de la población Peri-urbana del pueblo Mágico a la ciudad debido a la escasez de desarrollo; hoy despedimos a su último pueblerino.

Por Narrha Dhor

Desde hacía varios meses, una cantidad considerable de pueblerinos empezaron a considerar mudarse del campo rural al urbano como única forma de lidiar con sus problemas de desarrollo: escasez de alimento, cierre de locales tempranos, falta de agua potable, reservación de recursos, y trabajos perdidos son sólo unos de los múltiples problemas a los que la población del pueblo Mágico se ha tenido que enfrentar.

"No podía seguir así.", comenta uno de los pueblerinos, "Hacía semanas que nadie entraba a mi local, y, cuando por fin sucede, resulta que me vienen a cobrar mis impuestos y deudas. ¿No tiene la gente algo mejor que hacer? ¿Qué querían que hiciera? ¿Bailarles?"

"Ya no soportábamos la situación.", responde un padre de familia, "Le había prometido a mi familia una vida de placeres y alegrías. ¿Y cómo me fue sosteniendo esa promesa?  Anda más rota que mi cuenta bancaria. O nos mudamos, o nos morimos. No hay punto medio."

"Extrañaré mucho a mis vecinos, incluso a aquellos que me robaban." declara el dueño de un local cercano, "Al menos para ellos seguía siendo útil la existencia de mi local. Pero, con el corazón en la mano, me temo que ya no volverán aquellos días dorados con los que solía soñar siempre."

A pesar de que no hay manera de justificar estas acciones, tampoco la hay para juzgarles; lo más preocupante de la situación, en estos momentos, es reconocer y aceptar el futuro cierto que pronto envolverá a este pueblo: nuestro pueblo Mágico dejará de existir como tal para volverse un pueblo fantasma.

Más de un siglo de historia se perderá una vez el último pueblerino se mude, y a nadie parece importarle este hecho. ¿Qué será de aquellos y aquellas que se quedaron con ganas de visitar este pueblo? Más importante aún, ¿qué sera de su querido reportero? Hasta aquí el reportaje de hoy. Me despido, y les deseo lo mejor.

(¡Aquí tiene su copia, jóven perico! Que lo disfrute.)

(...)

(Gracias.)

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(¿Estás bromeando, no?)

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(...)

(Ya valió.)

(Mira el lado bueno: al menos no se les olvidó incluir la tira cómica.)

(...)

(Lo siento.)