CAPITULO 4

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Nota de la autora : el tiempo pasará súper rápido en este fic, lo siento por si no les gusta

(...)

Un mes después....

Arthit escuchaba música en su habitación mientras pintaba un cuadro de su hermano. Tarareaba al ritmo de la música, pero perdió la concentración cuando un enorme estruendo retumbo en su ventana

- ¡La ropa se va a mojar! -- su hermano grito desde el patio trasero

Arthit salió a ayudarlo, pero Touya lo regreso de inmediato dentro, no quería que se fuera a resbalar con la lluvia. Su hermano entro a la casa con un bulto de ropa a medio secar, ambos comenzaron a tenderla por todos lados de la casa.

-- Creo que es hora de comprar una secadora. -- dijo Arthit

-- Quizá tienes razón, iremos mañana por una.

Arthit trago saliva.

-- E-Este creo que igual debería comprar algo de ropa

-- ¿Ropa?

-- Si, ya sabes para... -- señalo su panza

Touya soltó una carcajada.

-- Mañana mismo iremos por ropa para mi sobrino.

(...)

-- ¿Qué tal este? -- Arthit sostenía un traje de marinerito junto con un gorro -- es lindo, ¿no?

-- Si, también podríamos llevar este -- Touya le mostro un traje de alien con antenas.

Arthit hizo una mueca.

-- Emm si quieres...

--Arthit estoy jugando, es horrible. -- ambos rieron.

Compararon otras cosas más, como ropa, cobijitas y unas playeras para Arthit. Últimamente su pecho había crecido un poco y por las mañanas un líquido blanquecino escurría de sus pezones manchando sus playeras.

Pasearon un rato y luego fueron a comer a un pequeño restaurant junto al lago. Ordenaron dos platillos sencillos y conversaron un rato.

Arthit se sentía un poco culpable, había llegado a vivir a la casa de su hermano de un día para otro, y Touya lo consentía desde que había llegado, comprándole todo lo que pedía y justificándose con que a los embarazados no debían dejar pasar ningún antojo

Quizá por ahora no ya no podría conseguir trabajo por su enorme panza, pero era bueno con la pintura y modelando la arcilla, podría hacer recuadros o pequeñas estatuas para venderlas, y quizá en un futuro hasta podrían vender algunas de las flores que habían plantado, de esa manera podría ayudar con su hermano en los gastos de la casa.

-- Me gustaría ayudarte con los gastos de la casa. -- dijo

-- Olvídalo Arhit , no vas a trabajar en tu estado

-- Podría pintar cuadros y venderlos, tengo muchos en casa, la semana pasada le vendí uno a nuestra vecina y quedo encantada, quizá podría vender los demás

-- Me gusta cómo se ven las paredes de la casa con esos cuadros

-- Puedo pintar más y mejores

Touya suspiro, siendo realistas no podía negarle nada a su hermano.

-- Esta bien.

La camarera llego con la comida y la tarde se les fue volando, entre charlas y algunas risas, volvieron a casa antes de las siete de la noche y Arthit se dio un baño justo antes de dormir

RAIDEN (adaptación) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora