überraschung (extra sorpresa)

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El día estaba soleado

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El día estaba soleado.

La madre de Yuqi había invitado a la familia de su hija a almorzar.

—Shuhua, ¡deja de comer eso!— exclamó Yuqi sentada de copiloto.

—Déjala cielo.— contradijo Yukhei, robando papitas de la bolsa de su hija.

Llegaron rápido al antiguo vecindario.

Aparcaron frente a la casa de la señora Song y los tres se bajaron del auto.

La pequeña Wong se apresuró a golpear en la casa de su abuela favorita.

La mujer, ya entrada en edad, abrió la puerta con alegría y levantó a su nieta.

—¡Yukhei! ¡Shuhua!— exclamó la mujer recibiéndolos.— ¡Que felicidad verlos de nuevo! Pasen, pasen.

—Si, gracias mamá. Yo también te extrañaba.— entró Yuqi de última.

Se sentaron en la mesa y charlaron un rato mientras la niña jugaba.

—Yuqi, hija, ve a la heladera y saca el jugo.— pidió la señora Song.

—Mamá, me da miedo el patio.— dijo la chica. —¿Qué tal si hay alguien ahí hace dos semanas?

Yukhei rió por el comentario.

—¿Cómo te va a dar miedo? Eres una mujer hecha y derecha, ve y alcanza el jugo.— Yuqi se levantó y trajo el jugo.

Después del almuerzo, salieron a caminar al parque.

Yuqi saludó al anciano que igual que toda su vida, tiraba pan irreal a los patos.

Mientras ella entablaba una conversación con el anciano, Yukhei tomó de la mano a su hija y ambos corrieron por el lago del parque persiguiendo a las tortugas.

—¡Yukhei!— exclamó la pelinegra. —Salgan de ahí.

La niña junto a su padre salieron con la cabeza gacha esperando el regaño de Yuqi, pero en cambio recibieron un abrazo por su parte.

—Por eso los amo tanto, mis glotones.

—Por eso los amo tanto, mis glotones

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produkt der phantasie | song yuqi & wong yukhei [adaptación]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora