I want an omega

8

Advertencia

Este capítulo será casi en su totalidad light NSFW

Ed estaba nervioso.

Se encontraba en el asiento del conductor de la camioneta de su madre besándose con la mismísima May Kanker sentada en sus piernas.

No sabía realmente qué hacer. Si, más de una vez Eddy le había regalado revistas "prohibidas" con las que experimentó un poco.

Pero esta era una situación que nunca se imaginó, ni siquiera había visto porno para saber que tenía más o menos que hacer.

Gracias a dios May aparentemente se dio cuenta.

-Tranquilo, yoooo te guío- dijo ella obviamente aún borracha.

Dicho esto de a poco metió sus manos dentro de la ropa del mayor explorando su abdomen, la rubia quedó algo sorprendida al darse cuenta que su querido estaba algo marcado.

Probablemente era porque desde pequeño siempre fue fuerte y estaba acostumbrado a cargar cosas pesadas, sumándole que los alphas tendían a desarrollar bastante masa muscular.

-Quítatela- le susurró al oído May con voz suave y sin esperar mucho Ed le hizo caso.

Esta se quedó embobada con el espectáculo que tenía frente suyo.

Tenía tantas ganas de besar cada parte de ese musculoso cuerpo.

Y guiada por sus instintos así lo hizo.

Empezó besando el cuello mientras sus manos tocaban todo lo que podían, estaba realmente excitada.

Por otro lado Ed estaba en el cielo, nunca había sentido algo así, era mejor que las quesadillas con guacamole, por lejos mejor.

Cuando sintió que May lo mordió este no pudo evitar reaccionar agarrando las caderas de la chica sobre suyo.

Su alpha interior rugía por estar con ella y marcarla, pero a pesar de no ser el más brillante sabia que no podía hacerlo.

-Tócame Ed, por favor tócame- suplicó la rubia entre besos y mordidas.

Intentando seguir lo que había escuchado de Eddy, subió lentamente sus manos hasta los pechos de la chica, masajeándolos de forma lenta y amable, como era Ed.

May volvió a estampar su boca contra la de él y bajó lentamente sus manos hasta el borde de su pantalón.

-¿Puedo?-

~~~

Por otro lado Marie sentía un fuego abrazador en todo su cuerpo, después de todo, tenía una bella chica haciendo su trabajo allá abajo.

Era el mejor puto sentimiento de su vida, nunca se había sentido tan bien como ahora.

Lo único que podía hacer era agarrarle del cabello y arquear su espalda, estaba pronta a terminar, pero quería que esto nunca acabase.

Marie tal vez sería una omega, pero no por eso sería pasiva.

Entonces, con toda su fuerza de voluntad del mundo agarro a la chica por los hombros y la puso a su altura para después darla vuelta quedando ella abajo suyo.