Nuestro protagonista caminaba por los pasillos en un nuevo día, el día estaba soleado y estaba feliz pues así las calles estarían limpias para pasar en bicicleta
aunque no lo dijese mucho, le gustaba montarse en la bicicleta pues un antiguo amigo le había enseñado, lastima que ya no se veían pero aun así quedaba ese lindo recuerdo
con eso podía probar que el dinero no le daba la felicidad, el dinero no impediría que su amigo se cambiase de ciudad o que ya no quisiese hablarle mas
pero bueno, en lo que menos quería pensar era en eso así que decidió cambiar de tema en su mente, pensando en lo que comería ese día o como le haría para hablar con las demás personas de su clase
había pasado un día y aun no podía hablar con nadie, tal vez debía esperar mas tiempo para poder comenzar una conversación con alguien
todos parecían personas "agradables" la mayoría se juntaba con su grupito para hacer alguna fiesta en casa de alguno o simplemente para arreglar una salida de compras
los temas en su cabeza variaban "¿que debo hacer?" se preguntaba, ¿acaso debía pedirles su numero? nono, después ¿acaso debía preguntar sus juegos favoritos? podría ser una opción
el chico estaba tan concentrado en sus pensamientos que no se dio cuenta cuando paro en seco y un pequeño chico caminaba lentamente hasta el
su cara parecía una cansada o pacifica hasta cierto como, parecía desconectado del mundo, sin embargo parecía un chico reluciente
sus pequeños ojos marrones se encontraban medio abiertos, como con cansancio aunque parecía extraño pues no parecía una persona que durmiese tarde
el mayor de estatura al darse cuenta se sobresalto y miro a su lado, encontrándose con aquel espécimen de abrigo rosado, pantalón café y zapatos del mismo color
el otro volteo hacia arriba, con cara cansada y solo se acerco lentamente hasta el haciendo que el pelinegro se pusiera nervioso
este intento alejarlo pero fue demasiado tarde pues el chico ya lo estaba abrazando, dejando su cabeza hundida en su estomago pues hasta allí quedaba
Natalan sintió sus orejas arder levemente y simplemente se dedico a ver a otro lugar, fijándose si alguien podía verlos
por suerte nadie parecía estar cerca así que rápidamente se separo aprovechando que nadie los había visto pues no tardaría mas tiempo junto al otro ¿que pasaría si lo vieran así? ¡eran sus primeros días!
al otro al parecer no le importo pues solo lo siguió viendo, esperando algo al parecer a lo que el pelinegro lo miro curioso
—¿que quieres? creí que estábamos a mano con mis disculpas
el menor lo siguió viendo, pestañeando de vez en cuando sin decir alguna sola palabra
así se vieron unos minutos, entre pestañeos cansados y miradas nerviosas al no recibir respuesta
—¿estas bien?—pregunto finalmente, al no escuchar respuesta del otro quien seguía con una cara pacifica y cansada
se volvieron a mirar cada quien con una expresión diferente a el otro
finalmente, el menor jadeo levemente y se acerco para abrazarlo otra vez, hundiéndose en su estomago nuevamente
sentía la calidez del otro chico, como reposaba mientras cerraba sus ojos con tanta tranquilidad en su ser
¿como había llegado a eso?
—tu...¿sabes andar en bicicleta?
ESTÁS LEYENDO
𝙻𝚎𝚖𝚘𝚗 𝚋𝚘𝚢
De Todo︶︶︶︶︶︶︶ . ❀~✿ .═ 𝑎𝑠𝑖́ 𝑞𝑢𝑒 𝑚𝑒 𝑐𝑜𝑛𝑠𝑒𝑔𝑢𝑖́ 𝑢𝑛 𝑎𝑚𝑖𝑔𝑜 𝑐𝑖́𝑡𝑟𝑖𝑐𝑜 ‟𝑑𝑒 𝑒𝑐ℎ𝑜 𝑒𝑠 𝑏𝑎𝑠𝑡𝑎𝑛𝑡𝑒 𝑓𝑎́𝑐𝑖𝑙 𝑠𝑒𝑟 𝑎𝑚𝑎𝑏𝑙𝑒 𝑐𝑜𝑛 𝑢𝑛 𝑐ℎ𝑖𝑐𝑜 𝑎𝑚𝑎𝑟𝑔𝑜 𝑐𝑜𝑚𝑜 𝑒𝑙"