SPLTYM

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Este nuevo superrico escondía bien los contratos y había estado en ascuas durante varios días.

Temía que se encontrara su fortuna, pero cuando vio la mirada tranquila de la Sra. Fang, sintió que estaba haciendo un gran escándalo. Sin embargo, luego de ver el programa de televisión sobre el tema de la pobreza, se dio cuenta de que se había enriquecido, que era diferente de antes.

Si Mama Hua estuviera aquí, podría desmayarse de asombro. Fang Yan pensó con incertidumbre.

En medio de su perturbación, aquí llegó su cumpleaños como estaba previsto.

Los Colmillos tardaron diez años en encontrar a su hijo, por lo que valoraban mucho su cumpleaños. Después de preguntar sobre su preferencia, no celebraron una fiesta de cumpleaños, pero aun así invitaron a algunos amigos. Se habían estado preparando desde hace unos días. Todos los días, se enviaron varias cosas para que celebraran una fiesta de cumpleaños inolvidable para Fang Yan.

Este día, Fang Yan se despertó y escuchó algunos ruidos animados en su casa.

Se frotó los ojos, volvió la cabeza y miró el reloj. Era mucho más tarde de la hora a la que solía levantarse. Se quedó atónito, levantó apresuradamente la sábana y se levantó de la cama. También estaba ansioso por el primer cumpleaños que podría pasar con su nueva familia. Antes de acostarse anoche, había imaginado innumerables sorpresas que podría recibir. Estaba tan emocionado que no pudo conciliar el sueño hasta muy tarde. Desafortunadamente, hoy se levantó tarde.

Se quitó el pijama y se vistió. Cuando estaba a punto de salir por la puerta, puso la mano en el pomo de la puerta, vaciló un poco, se dio la vuelta y corrió hacia la ventana. La cortina no se abrió. Solo asomó la cabeza y observó en secreto.

Hoy era fin de semana y todos estaban en casa. Se asomó por la ventana y vio que muchos extraños entraban y salían. Su segundo hermano mayor estaba persiguiendo al pollo en el patio mientras su abuela se sentaba a un lado sonriendo. Fang Yan miró durante mucho tiempo y luego echó la cabeza hacia atrás.

Se tocó las orejas, que estaban bastante calientes.

Estaba emocionado, expectante y avergonzado.

Fang Yan respiró hondo y se ajustó la ropa. Llevaba un traje nuevo que la Sra. Fang le había comprado hace unos días. Lo apreciaba tanto que no lo usaría antes. Lo guardó deliberadamente para hoy. Después de estar mentalmente preparado, Fang Yan abrió la puerta.

El pasillo y la sala de estar fueron decorados con flores, cintas y pegatinas de "Feliz cumpleaños a Yan". Fang Yan lo miró y salió corriendo con la cara sonrojada. Cuando corrió a la sala de estar, el mayordomo le estaba indicando a la criada que pusiera un gran pastel en la mesa.

Antes de que Fang Yan pudiera verlo claramente, alguien lo arrastró rápidamente. Con sus ojos, fue detenido y llevado lejos de aquí.

"No puedes verlo ahora", recordó Fang Ke. "Eso es una sorpresa para ti. No puedes verlo hasta esta noche ".

Fang Yan se sonrojó de emoción, "¿Es ... un pastel ?! ¿Untado con crema? ¿Y frutas?

¡Nunca antes había comido un pastel de cumpleaños!

No había pastelería en su pueblo y no se vendían pasteles en el mercado. Si algún aldeano quería comprar un pastel, tenía que ir a un pueblo lejano. Sería al mediodía si partían después del amanecer y viajaban a pie. Por lo general, había muy pocos autobuses en el centro. El camino de la montaña era tan accidentado que se necesitaría un día para comprar un pastel y regresar. No fue al centro muchas veces. Además, era joven y Mama Hua no se atrevía a ir sola con él. Por lo tanto, solo podía viajar gratis con mucha gente para poder ir a la ciudad.

Cuando llegó aquí, había comido pasteles de crema antes, pero el pastel de cumpleaños tenía un significado especial. Para él, era diferente de un pastel de crema común.

Al mirar la expresión emocionada de su hermano, Fang Ke tenía una mirada más amable. Tocó de nuevo la cabeza de su hermano y asintió. "Por supuesto."

Fang Yan se volvió aún más expectante.

El pastel que tenía antes solía cortarse en trozos pequeños. Solo había visto el pastel de cumpleaños en la ventana, que tenía velas, palabras de bendición escritas con chocolate: "Feliz cumpleaños" y el nombre escrito con mermeladas. Era el pastel más barato que había visto en la pastelería de la ciudad y el pastel de cumpleaños perfecto en su mente.

¡Acababa de notar que su pastel tenía varias capas, mucho más alto que los pasteles de la ciudad! Fang Yan pensó con orgullo.

Sin embargo, todavía no podía verlo por ahora. No pudo ver cómo era el pastel y lo cortó con sus propias manos como esperaba hasta que todos llegaron por la noche.

La espera para cortar el pastel fue tan larga que Fang Yan tuvo que hacer algo para distraer su atención.

Justo cuando salía de la casa, vio a Gu Rong parado afuera de su patio y mirando hacia adentro a través de la cerca de hierro. Parecía vacilante, como si estuviera considerando si entrar o no.

Fang Yan se acercó con curiosidad. "¿Hermano Gu?"

Gu Rong parecía estar perdido en sus pensamientos, por lo que estaba asombrado por la voz de Fang Yan. Sorprendido, bajó la cabeza y miró a Fang Yan. Al reconocerlo, Gu Rong finalmente dejó escapar un largo suspiro de alivio. "Eres tu."

"Hermano Gu, ¿por qué estás parado fuera de nuestro patio?" Fang Yan se hizo a un lado confundido. "¿No vas a entrar?"

En lugar de responder directamente, Gu Rong solo miró hacia adentro. "¿Hay alguna actividad en tu familia recientemente? ¿Por qué entra y sale tanta gente? "

Los ojos de Fang Yan brillaron instantáneamente y le dijeron con orgullo: "¡Hoy es mi cumpleaños!"

"¿Cumpleaños?" Gu Rong se quedó atónito por un momento y luego, inconscientemente, buscó en su bolsillo. No había nada en su bolsillo. Gu Rong rebuscó en todos los bolsillos y finalmente encontró dos chocolates. Se rascó el cabello y lo colocó en la palma de Fang Yan. "No te preparé ningún regalo, pero este ..."

A Fang Yan no le importó en absoluto.

Con una sonrisa, guardó el primer regalo que recibió hoy y lo miró. "Hermano Gu, ¿qué estás haciendo aquí? ¿Estas buscando a alguien? ¿Mi hermano mayor? ¿O yo?"

Gu Rong siempre venía a jugar con él si tenía tiempo. Fang Yan sabía que no lo había visto recientemente. De hecho, extrañaba a Gu Rong.

El cumpleaños fue algo realmente bueno. Pensó para sí mismo: "Me pasan cosas buenas ese día".

Frente a la mirada expectante de Fang Yan, Gu Rong abrió la boca y quiso decir algo, pero la cerró rápidamente. Se rascó el cabello con impaciencia, preguntándose si debería contarle sus problemas a Fang Yan.

"¿Hermano Gu?"

Gu Rong apretó los dientes y miró a izquierda y derecha. Luego llamó a Fang Yan y lo llevó a una esquina donde no había nadie. Bajó la voz y dijo nerviosamente: "Tengo algo que discutir contigo. Y no puedes contárselo a nadie, ¿de acuerdo?

¡Todavía era un secreto entre ellos dos! Fang Yan abrió mucho los ojos y rápidamente se demostró a sí mismo con acciones. Se tapó la boca y negó con la cabeza salvajemente. No se atrevió a decir una palabra, pero cada célula de su cuerpo le estaba dando una respuesta positiva a Gu Rong.

Gu Rong bajó la voz aún más, "Quiero pedirle prestado algo de dinero".