𝕲 𝕳 𝕺 𝕾 𝕿

𝕮𝕬𝕻𝕴𝕿𝖀𝕷𝕺 3

Kalpe: Guao chico, lo lograste, ahora desactívalo, te propon- antes de que pudiera terminar su frase, fue alcanzado por su cuchilla de Frieden, decapitándolo en seguida mientras seguía acuchillando su cuerpo sin vida.

Los guardias tenían miedo de Frieden pero algunos tenían el valor de poder enfrentarse a él. Y en cuestión de segundos resultaron derrotados y degollados brutalmente.

Guardia: A-Aquí unidad 64, t-tenemos una e-eme. ¡AGH!

Radio: ¿Soldado que pasa? ¡¡Responda de inmediato!!

Frieden seguía asesinado brutalmente a todo lo que se moviera. Era un demonio en persona. Logró salir del establecimiento pero resulto rodeado de cientos de soldados del gobierno.

Soldado con megáfono: Frieden, te tenemos rodeado, ríndase de inmediato o luchara contra 100 soldados con poderes triple A.

Frieden no contestaba.

Sold. Con Megáfono:

¡¡¡ATAQUE!!!

Cientos de militares con poderes fueron con fuerza hacia Frieden, pero este sin mucho esfuerzo masacro a todos con mover la cuchilla rápidamente creando un viento extremadamente filoso. Partiéndolos así en por la mitad a todos.

Pasaron 2 horas y recién Frieden acabó con todos. Eran 400 soldados y solamente pudieron escapar 2 de ellos.

En su mente:

Por favor, devuélveme mi cuerpo.

*Que aburrido eres*

¡¡Por favor!!

*Ah, está bien*

La cuchilla de Frieden desaparece y la consciencia de el vuelve.

Mierda... ¿Todo esto lo hice yo?- Mirando las cabezas, piernas y brazos mutilados por todo el lugar.

Frieden mira al cielo brillante.

Mama... perdóname.

Empieza a soltar una lágrima, el cielo se torna gris, empieza a llorar los cielos.

Joder. Todo este desastre... Mejor me voy de aquí...

Era otoño, los días pasaban rápidos, con tan solo pestañear ya estabas en la otra semana. Mi amigo Zamir, amigo de la juventud cual gracias a Él no la pasé solo en el orfanato en el día del incidente con mis padres, un buen amigo y consejero. Pero, todo lo bueno no dura demasiado ¿no? Y no es así, que tengo que hacer para volver a verlo...

Y así Frieden con este pensamiento, se corrompe, y el no volverá a ser el mismo de antes...

Decepcionado de mí mismo, escapé del lugar lo más rápido que pude. Corriendo a gran velocidad mi pie chocó con una roca haciéndome caer enseguida y golpeando mi cabeza con una de las paredes de aquella ciudad iluminada a tal punto de que no sabía si había muerto o seguía vivo, pero, estuve en una especie de Limbo muy oscuro y de la nada una voz me hizo presencia en aquella obscuridad. Su Tono era muy familiar, me recordaba buenas épocas una época donde no había guerras solamente había paz y felicidad entre todos los niños del mundo, la voz dulce me indicaba que siguiera una luz donde podía ver más de lo que yo deseaba conocer, pero ninguna luz hizo claridad entre mi oscuridad.

Aterrado, corrí en cualquier dirección con tal de encontrar esta supuesta luz, dado a mi esfuerzo por encontrarla, conseguí más lamentos.