.:.:.:.Ren@c1m1ento Del Ser Celest1@l Supremo.:.:.:.

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Completamente Rodeado

El primer día no pasó nada en la ciudad, el segundo día tampoco pasó nada en la ciudad, y el tercer día tampoco pasó nada.

Después de tres días, la atmósfera tensa se relajó un poco y dentro de la academia se reanudó el trabajo escolar normal. Todos los estudiantes que estuvieron de vacaciones durante tres días regresaron a clase, y los maestros, excepto en los momentos en que salían y patrullaban, también se quedaban en los terrenos de la escuela.

Sin embargo, después de la estabilización inicial, la discusión sobre Los demonios estalló repentinamente, y casi todos los discípulos estaban discutiendo sobre Los demonios.

Hoy fue la clase del Sr. Lan.

Las conferencias del Sr. Lan fueron muy despreocupadas. Habló sobre lo que estaba pensando, aparentemente nunca preparó lecciones de antemano. A veces, cuando los estudiantes hacían una sola pregunta en clase, enfocaba a toda la clase en torno a ella. Sin embargo, les benefició mucho.

Desde que el Sr. Lan aceptó a Yan Tianhen como discípulo en el examen, nunca lo había buscado en privado. Usando las palabras del Sr. Lan, fue porque el propio discípulo ya era lo suficientemente excelente. Como maestro, lo que debía hacer es podar y cortar las hojas de sus discípulos, pero esto solo era necesario si pasaba algo.

Estos últimos tres meses fueron pacíficos y Yan Tianhen no causó ningún problema. Al menos en materia de alquimia, seguía siendo diligente y agradecido. El Sr. Lan estaba naturalmente feliz de ser un maestro testaferro que no tenía que trabajar.

El Sr. Lan terminó la clase, asignó tareas y preguntó: "¿Qué otros asuntos no comprende?"

Estaba tranquilo.

El Sr. Lan fue el primer maestro que vino a dar una clase después de los tres días de vacaciones. Los discípulos se miraron, todos tenían un aspecto extraño. En este momento, Shen Qinghe abrió la boca y preguntó: "Señor, ¿puede hablarnos sobre los demonios?"

El Sr. Lan miró a Shen Qinghe, luego miró a esos discípulos que mostraban con entusiasmo su deseo de conocimiento. Se levantó el abrigo y volvió a sentarse con las piernas cruzadas en el cojín. El Sr. Lan dijo: "Sabía que estabas interesado en estas cosas. No hay rastro de Los Demonios en la ciudad. Incluso si aparecen en la ciudad, no se les permitirá ingresar a la Academia. Incluso si ingresan a la Academia, seremos los primeros en tomar la iniciativa. Ustedes, pajaritos que aún no se han vuelto útiles, son los más seguros, así que no se preocupen".

La mayoría de los estudiantes de la División de Alquimia se sintieron aliviados.

Aunque eran alquimistas poderosos y muy elogiados en Nueve Tierras, el problema era que su capacidad de combate era realmente asquerosa. Si se encontraban con Demonios, probablemente serían asesinados.

Otro discípulo preguntó: "Señor, ¿los Demonios son realmente tan aterradores? Escuché que solo encontraron uno. ¿Cómo podría toda la ciudad estar bajo la ley marcial?"

"Un solo Demonio puede masacrar una ciudad si no se maneja adecuadamente". Con un leve suspiro, el Sr. Lan dijo: "Los demonios están en el nivel de los espíritus malignos del cielo y la tierra. No se pueden matar fácilmente. Son invencibles para quienes están en el mismo nivel. Originalmente en el mundo, solo las llamas espirituales de un fénix pueden refinarlas y eliminarlas fácilmente. Desafortunadamente, El monarca Fenix del oeste estado desaparecido durante muchos años y se desconoce si está vivo o muerto".

Yan Tianhen, sosteniendo su mejilla, comenzó a preguntarse si tenía que convocar a Feng Jinyu aquí.

"El Monarca Fenix del Oeste es realmente feroz". Otro discípulo dijo: "Mi papá dijo una vez que las llamas espirituales de un fénix son el fuego más poderoso del cielo y la tierra, pueden devorar todas las cosas y deshacerse de los espíritus malignos. Todas las cosas sucias del mundo le tienen miedo al Fénix, y las llamas espirituales de Fénix también se pueden usar para la alquimia. ¡La mitad de las píldoras de nivel celestial que quedan en el mundo se obtienen tomando prestadas las llamas espirituales de Fénix!"