EL ROJO Y EL AZUL SIEMPRE VAN JUNTOS

POSIBLE GUERRA 2

Wei Ying abría los ojos de a poco, recordaba alegre como su hermano le había pedido que no dijera nada a los hermanos Lan al llegar, que él personalmente se lo diría a Xichen.

Al girar un poco su cabeza vio una escena que le alegró el corazón con intensidad, su hermanito estaba recargado en la pared, su brazo izquierdo estaba recargado en su pecho y con su mano derecha acariciaba su vientre protectoramente.

- Sé que despertaste, ¿puedes dejar de verme así? - refunfuño Jiang Cheng

- Jajaja, de acuerdo de acuerdo, todavía no le dices ¿cierto? - contesto sentándose con cuidado, recordaba haber escuchado a su hermano pedir que lo llevaran a Yunmeng, pero por los colores que lo rodeaban podía afirmar que seguían en la secta Yao.

- ¿En qué momento? En cuanto llegamos se armó el escándalo, al parecer todo es como me temía, solo quieren seguir odiando a alguien, quieren más guerras sin importar quien salga herido y su nuevo "enemigo" eres tú, otra vez todos quieren matarte, otra vez todos te ven como el mismísimo mal encarnado, otra vez... - Wei Ying interrumpió la oleada de pensamientos que inundó la cabeza de su hermano

- A-Cheng, basta, te lastimas al pensar así, sabes que nada pasará, Huaisang tiene un plan, Jin Ling ya es un gran líder, tu eres el gran y temido Sandu Shengshou... - Jiang Cheng no escuchaba con razón, las voces en su cabeza se habían adueñado de él en cuanto llegó a saludar al líder Yao

- ¿Y si algo falla? ¿Y si TODO FALLA? ¿Qué pasará si damos un paso en falso y todo cae? No.... no soportaría... - apretó su vientre y mordió su labio - ¡No puedo perderte de nuevo! - gritó molesto

- ¡Jiang Cheng! - gritó Lan Zhan al entrar, la escena frente a sus ojos lo llenó de rabia, Wei Ying sollozaba mientras Zidian chisporroteaba en un hermoso violeta

- Yo... yo... - Jiang Cheng volvió a enfocar la mirada en su mano y se tuvo miedo por un momento

- Lan Zhan, no pasa nada, por favor cálmate, A-Cheng está preocupado por mí, no va a hacerme daño - explicó Wei Ying limpiando sus lágrimas que no sabía habían comenzado a fluir

- Lo mejor es que me retire - dijo Jiang Cheng parpadeando continuamente

- No espera - suplicó Wei Ying, pero Jiang Cheng había salido casi corriendo de aquel lugar

No sabía en qué maldito momento había hecho que Sandu Shengshou volviera y lo peor de todo... era contra su hermano, contra aquel que le había costado una maldita vida recuperar.

Jiang Cheng caminó sin ganas de nada más que llorar hacia la recámara que había sido asignada para él y su amado esposo, en el momento en el que cruzó la puerta se desmoronó.

Hacia un año había jurado proteger a su hermano contra viento y marea, pero ahora él mismo lo había amenazado, FRENTE A LAN ZHAN, eso le iba a costar bastante caro...

No supo en qué momento se quedó dormido en el suelo, quizás cuando su llanto le robó el aliento, o quizás cuando ese núcleo dentro suyo comenzaba a quemar para auto-castigarse por dañar a su ex dueño...

....

- ¿Estas bien? - cuestionaba preocupado Lan Zhan

- Si... yo solo - Wei Ying comenzó a llorar, no sabía que debía hacer, sabía que eran en cierto modo las circunstancias en las que se encontraban ahora y el hecho de que su hermano estuviera en cinta lo volvía una bomba de tiempo andante

- ¿Wei Ying? - Lan Zhan notó que su esposo se había perdido en su mente por unos minutos y lo habría dejado continuar, de no ser porque estaba bastante preocupado

- Lan Zhan, es que ese no es A-Cheng, es... - Wei Ying quería ir detrás de su hermanito, sabía que algo estaba mal, sabía que no era intencional, sabía que el miedo de perderlo era lo que se había apoderado de él y por eso Zidian respondía a la sensación tan grande de miedo de su dueño

- No, es por eso mismo que no puedes ir, si fuera Jiang Cheng o Jiang Wanyin, permitiría que fueras detrás suyo, pero ese es Sandu Shengshou y sabes que no se detiene ante nada ni nadie - dijo casi frío Lan Zhan

- Pero es mi hermano - sollozo Wei Ying

- No, tu no conoces a Sandu Shengshou, el nació el día que tu... - Lan Zhan se tragó el nudo de su garganta - ese hombre está sediento de venganza, créeme que me encanta verte reír con tu hermano, pero puedo asegurarte que Sandu Shengshou NO es tu hermano - dijo preocupado

- Pero... Yo vi sus ojos, solo su cuerpo era el diferente, sus ojos aún me veían con cariño... - dijo Wei Ying dejándose abrazar

- Lo sé, yo también lo vi, pero primero dejemos que se tranquilice ¿si? - dijo con una suave voz Lan Zhan

- ¿Sandu Shengshou? - susurró Huaisang tras escuchar la conversación durante toda la tarde, retornó su camino, no iría con el segundo Jade, aprovecharía en cierto modo a la gran fiera para descubrir el verdadero plan del líder Yao.

¿Es arriesgado?, por supuesto que sí, corría riesgo de que lo atacara o el líder Yao, o el mismísimo Sandu Shengshou, pero ahora necesitaba respuestas, no podía permitir que dos hermanos se perdieran nuevamente, que dos amados esposos volvieran a estar separados, eso jamás pasaría, no si el señor "niégalo todo" estaba ahí.

En cuestión de segundos llegó a la habitación de Jiang Cheng, tocó, pero no recibió ninguna respuesta, volvió a tocar y solo obtuvo un gruñido, para él era suficiente y entró.

- ¿Jiang Cheng? - cuestionó entrando en la habitación

- ¿Qué? - preguntó secamente Jiang Cheng mientras intentaba no vomitar

- Creo que podemos descubrir los planes del líder Yao - dijo casi en un susurro

- ¿Cómo? - cuestionó aún algo asqueado, había dormido como 5 minutos y de la nada las náuseas lo tomaron por sorpresa, maldita suerte la suya

- Usaremos a Sandu Shengshou... - dijo orgulloso Nie Huaisang

Eso fue el detonante suficiente, el vómito salió de su ser a toda velocidad sobre el suelo, eso afirmó las dudas que tenía el líder Nie, ahora entendía por qué su amigo de vida había reaccionado tan emocional hacia unos días.

- Supongo que el temible - Huaisang se vio interrumpido por Jiang Cheng

- No lo nombre nuevamente carajo - una nueva ola de comida salió de él

- Bueno bueno, ¿el "innombrable" estará de vacaciones hasta que termine tu embarazo o será el que llevara las riendas? - se burló Huaisang viendo a Jiang Cheng tomar su vientre mientras limpiaba sus labios

- ¿Embarazo? - Preguntó Xichen impactado, tras lo ocurrido con Wei Ying, él se había quedado en la reunión para evitar que los demás líderes decidieran ir tras su cuñado y hasta ahora lo dejaban libre para descansar, no esperaba enterarse de algo como aquello al entrar a su habitación

- Mierda... - se maldijo Huaisang

- Gracias por el bello momento de noticia Huaisang - gruñó Jiang Cheng

Ninguno noto al discípulo que escuchaba entre las paredes para notificar de todo a su líder, aquella información valía oro...