Confesiones Embriagantes

Blitzo

Los planes que había hecho con Stolas se fueron al caño, nunca hubiera imaginado que Fizzarolli haría el primer movimiento, decidí no meter a mi equipo en esto así que me prepare en la madrugada, tome mis cosas, dos pistolas, un rifle, balas, el libro de Stolas por si necesitaba abrir portales y unos bocadillos para el camino, salí de mi casa de puntillas para que Loona no se despertara, para mi desgracia ella se levanto cuando encendí mi furgoneta, se asomo por la ventana de su habitación y empezó a llamarme, no le tome importancia, solo arranque para alejarme, se muy bien lo furiosa que se pone cuando no le hago caso y esa no seria la excepción porque me marco a mi celular:

--¡Blitz! ¡¿a donde mierd* crees que vas?!--

--Loony, papi tiene que solucionar unas cosas de adultos así que vuelve a dormir--

--¡no me hables como si fuese una pinch* mocosa! ¡regresa aquí de inmediato! ¡dijiste que salvaríamos a tu amigo juntos! ¡así que mueve tu maldito trasero rojo aquí de inmediato!--

--mi pequeña Lonny, hazme un favor, nunca olvides lo mucho que te amo ¿de acuerdo, pequeña?--

--¿que?...¡¿que mierd* estas diciendo?!--

--Loony, siempre estaré orgulloso de ti, desde que llegaste a mi vida...--

--¡calla! ¡calla, papá! ¡solo vuelve!--

Mi corazón se rompió al escuchar la voz entrecortada de Loona, sabia que estaba a punto de llorar pero si algo me llegara a pasar...no quería irme sin decirle lo que siento por ella, el amor que siento por mi hija ya que tenia un extraño presentimiento de que tal vez ya no los volvería a ver, es extraño cuando pasa eso, he enfrentado muchas cosas y ahora, solo por querer recuperar a un amigo siento este temor:

--Loony, vuelve a la cama, querida, volveré a tiempo para la comida, iremos a tu restaurante favorito y de ahí a la cafetería para que pidas el postre que tanto te gusta--

--¡no! ¡te quiero a ti! ¡vuelve!--

Con un nudo en la garganta colgué el teléfono, ya no quería escuchar a mi pequeña romper en llanto, lo que quería ahora era concentrarme en mi plan mientras escuchaba la canción "Ghost Riders in the Sky" de Spiderbait. Apenas divise el parque pise el acelerador sin importar lo que se me pusiera enfrente hasta que logre ver una carpa con varios espectaculares de Fizzarolli:

--¡es ahí!--

Irrumpí el interior de la carpa haciendo que todos los demonios que se encontraban ahí salieran llenos de pánico y salí de mi furgoneta:

--¡aquí estoy, Fizzarolli! ¡como querías!--

Escuche su risa por toda la carpa hasta que se prendieron los proyectores que estaban en el escenario principal, ahí estaban, Fizzarolli con su enorme y desquiciada sonrisa mientras sostenía una cadena la cual conducía hacia arriba donde estaba Stolas colgado de cabeza encima de un tanque lleno de anguilas eléctricas:

--¿que? ¿se te acabaron las ideas, Fizzarolli?--

--JAJAJAJAJA ¿a mi? claro que no--

--eso no va a acabar con él--

--¿eso crees? le hice un hechizo que le anulo sus poderes ¿quieres que comprobemos si resiste al poder de las anguilas?--

--¡no! Fizzarolli, tenemos que hablar--

--claro que lo haremos, solo dame un momento--

Por un momento creí que iba a arrojar a Stolas al tanque pero termino atando la cadena a un poste que estaba cercas de él: