Bien chicos este es mi primer fic, trataré de ser lo más claro posible y sin dejar huecos como los que nos dejaron con el final de spn, esta historia va de como me hubiese gustado el final de spn así que tendrá escenas de todo tipo así que espero le...
Aparentemente todo iba de buena manera el segundo año, los ahora ex-cazadores, eran los verdaderos hombres de letras que dirigían a los demás cazadores, sus representantes afuera eran Adam, Jack y sus dobles del otro universo. Se acercaba el tercer cumpleaños de Dean Jr., Henry aunque tenia solo 2 años, ya se veía como un niño de 8, su padre Dean solía leerle el diario de Jhon para dormir, mientras el junto con su hermano Jack aprendían acerca de monstruos y algunas lenguas, a pesar de ser un nefilim al igual que Jack, Henry aun no presentaba algún poder salvo su desarrollo avanzado y una inteligencia como la de su tío Sam.
"Jack hermano, ¿Alguna vez podré ir a cazar cómo tú?". Le preguntaba a su hermano mientras veían la tv, ahora que ya estaba más grande, aunque el búnker tenía cuartos de sobra, Henry dormía en el mismo cuarto que Jack.
"Tal vez, solo debes crecer un poco más". Contestó Jack.
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"Aun no tienes edad para cazar chico". Dijo Dean llegando a la sala con algunas bolsas.
"¡Papá!". Gritó Henry corriendo a abrazarlo.
"Vaya que tienes energía, ¿Podrías ayudarme a cargar?". Entonces le tendió una bolsa.
"Si, ¿Dónde está papá Cas?". Pregunto el niño de ojos azules.
"¿Qué no te soy suficiente?". Le preguntó Dean.
"Sí, pero siempre estás con papá Cas y pensé que volverían juntos". Le dijo con una sonrisa provocando un enrojecimiento en las mejillas del rubio.
"Tú papá está con tu tío Gabriel haciendo cosas de ángel; Jack, ¿Y Sammy?". Le pregunto el rubio.
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"Salieron hace un par de horas fueron con Jody". Contestó Jack. Quizás todo iba a parecer normal, lo que ninguno imagino fue lo que pasaría después. Dean escuchó sonar su celular.
"¿Adam? ¿Qué pasa hermano?". Preguntó extrañado.
"Verás, se que no puedes salir a cazar pero tengo un asunto aquí y no tengo a quien pedirle ayuda". Le contestó por el teléfono Adam.
"Voy para allá". Contestó Dean, preocupado por su hermano o quizas por la emoción de cazar de nuevo.
