Mi cabeza descansaba sobre el hombro de Niall mientras recorríamos las largas calles de Roma. Insistí varias veces en saber a dónde nos dirigíamos, pero Niall se limitaba a responder que íbamos al aeropuerto.
Después de cuarenta minutos más o menos de viaje sentí que el auto se detenía, alce mi vista y pude vislumbrar la sombra de Paul, detrás de él había varios reporteros tomando fotos. Los flashes eran demasiado intenso y mis ojos no lo soportaron, me tome del brazo de Niall y el chofer nos abrió la puerta.
Fuera del carro note que había más gente de la que creía. Además de que había demasiado ruido; reporteros gritando, fans llorando, y varia gente de seguridad dando órdenes. Era un caos, uno de
esos que hacen sentir nervioso a cualquiera. Tome aún más fuerte el brazo de Niall, el caminaba a un paso regular, y yo sentía la necesidad de llegar rápido adentro del edificio. Niall noto mi preocupación, y con el brazo que yo estaba abrazando rodeo mi cintura de una manera muy lenta y sensual. Con su otra mano busco la mía y las entrelazo acariciándome con su pulgar.
-Yo te cuido- Su voz en mi oído era exquisita
Al fin entramos al aeropuerto. Había muchas tiendas por todos lados, y varios bloques con el nombre de una aerolínea. No había notado que Paul y otros tres hombres que ya había visto antes
iban detrás nuestro mientras los demás cuidaban la entrada.
Otro señor más grande que no había visto se acercó a nosotros un poco apresurado
-Tenemos que irnos ya, no queremos retrasar más vuelos, y por cierto, felicidades señor y señora Horan.
Mi corazón dio un vuelco de felicidad al escuchar cómo me llamaba a mi señora Horan, cuantas veces no había escrito así mi nombre como alternativo o cosas de esas.
Una estúpida sonrisa apareció en mi rostro y gire mi cabeza para poder ver a Niall
-Oficialmente soy tuya- le susurre para que nadie más pudiera escucharnos
-Y créeme que no te dejare ir- dijo robándome un inocente beso
Caminamos tomados de la mano por todo el aeropuerto, el cual parecía casi vacío. Había muchas personas cuidando las entradas y varios vendedores se habían acercado a mirar.
Me sorprendí cuando llegamos a la pista de vuelos, mire a Niall extrañada y el correspondió con una sonrisa divertida.
-¿Me dirás a dónde vamos?
-You know I’ll take you to another world
Mi yo interna saltaba y gritaba de emoción, sus palabras eran la melodía más dulce que podría existir. Me limite a sonreír mientras lo miraba a sus hermosos ojos azules, Niall tomo mi mano con más fuerza mientras un pequeño carro de golf se acercaba a nosotros.
-Suban
El chofer era de seguridad, lo sabía por el uniforme, era más joven que los demás y nadie más que él nos acompañaba. Todo se veía muy hermoso, había varios aviones moviéndose y las luces le daban un efecto mágico, además de que esa noche no había ninguna nube que cubriera las estrellas, y la luna tenía un pequeño tono rojo, parecía salido de un cuento de hadas.
No paso mucho tiempo cuando paramos frente a un gran avión sin el nombre de alguna aerolínea, tenía un diseño diferente con colores rojo y blanco. Me quede varios segundos observándolo y tratando de grabarme su forma, las ventanas eran muy diferentes a las de todos los aviones, eran más grandes y solo había en la parte de enfrente.
El mismo chico que nos había traído abrió las puertas y jalo una escalera que estaba ahí cerca. Niall me ayudo a bajar del carro para después subir al avión. Mientras más subía la vista era mejor, los aviones llegaban y se podía ver a los hombres que les dan salida con sus palos de colores.
Una vez dentro del avión fue como transportarme a otro mundo. Todo era aún más grande de lo que parecía, al fondo había una puerta blanca, y a su lado otra más chiquita negra. Junto a ellas había una barra y detrás varias bebidas dentro de una vitrina. En medio había una pequeña mesita redonda junto a un sillón de piel rojo.
En un extremo del avión estaba una televisión de plasma sujeta en una de las paredes. Un chica que parecía ser aeromoza se acercó con un control remoto que le entrego a Niall, el me tomo de la cintura para sentarnos frente a la televisión en dos enormes sillones color beige.
La aeromoza le susurro algo al odio. Mi instinto me gritaba que debía aventarme sobre la chica y matarla a golpes, era un pocito celosa, pero mi sentido común me recordó que yo y solo yo era su esposa.
Niall me miro y se alejó de la aeromoza sin prestarle más atención
-No te pongas celosa, me estaba dando unos mensajes
-No estoy celosa- por desgracia mi tono de voz no sonó como yo esperaba
Niall rio y fue su risa la que me hizo olvidar todo y sonreír.
-Les pediré que se coloquen sus cinturones, dentro de poco despegaremos.
La chica entro a una puerta que no había visto junto a la de la cabina. Tome mi cinturón y lo coloque de forma que no estuviera muy apretado ni muy flojo. Tire mis zapatos al suelo que ya me estaban matando, y note que estaba alfombrado, a decir verdad era demasiado cómodo.
Escuche el motor que comenzaba a prenderse, no era la primera vez que viajaba en avión así que no fue muy difícil acostumbrarse al ruido. La aeromoza salió y nos dio las típicas indicaciones de que hacer en caso de emergencia.
Sentí como el avión empezaba a avanzar, cada segundo un poco más rápido, el ruido de las botellas rebotando en la vitrina no hacía más que ponerme nerviosa, tome la mano de Niall apretándola, poco después sentí como el avión se inclinaba para salir volando, cuando el avión se equilibró salió la aeromoza diciendo que era seguro y podíamos caminar, o quitarnos el cinturón.
Antes de que pudiera decir algo Niall tomo el control de la televisión y Harry, Louis, Zayn y Liam aparecieron en la pantalla junto a los invitados en la fiesta.
-Bonita noche-empezó Harry
-Diana! Te queda bien eso, ¿qué tal la están pasando?- Louis gritaba demasiado, se notaba que la fiesta estaba en su apogeo
-Bien Louis, gracias- Niall seguía acariciando mi mano con dulzura
-Seguro Niall no te lo dijo, pero estas en nuestro regalo
-¿Estoy?
-Si, durante meses ahorramos para un jet privado, y ustedes lo están estrenando- esta vez fue Zayn el que hablo
-Es… perfecto
-No tomen mucho, enserio- La voz de Louis sonaba divertida, y se notaba que había estado tomando
-Bueno, nos tenemos que ir- La voz grave de Harry interrumpió las risas de Louis
-No rompan la cama- grito Zayn antes de que se cortara la comunicación
Me quede un poco confundida ante el comentario de Zayn, no veía ninguna cama, además solo había dos pequeños sillones en donde estábamos sentados. Mi mente daba vueltas a lo que según yo pasaría cuando bajáramos del avión
-Diana!
La voz de Niall me saco de mis pensamientos, su dulce voz que no había mas que idiotizarme
-¿Qué paso?- pregunte de repente
-Quiero mostrarte algo
Tome la mano que Niall me estaba ofreciendo y lo seguí hasta una de las puertas al fondo del avión, del otro lado había una enorme cama con pétalos rosas y rojos alrededor, las luces eran tenues y había una musiquita tranquila de fondo. voltee a ver a Niall con un mirada divertida
-¿Qué es esto?- pregunte, aunque tenia clara la respuesta
-Es nuestra luna de miel
-¿Me dirás a donde vamos ahora?
-Vamos.... a las estrellas
