-Lo siento mucho Saint, sabes que solo te veo como un amigo-
Eran palabras que Saint siempre escuchaba de la persona que amaba cada vez que intentaba hacer un movimiento. Podría decirse que dolían como el infierno pero para Suppapong no eran dolorosas, pues siempre las escuchaba. Puedes decir que estaba cansado pero no perdía la esperanza. Después de todo siempre luchaba por su amor aunque fuera unilateral.
Esos días en la casa estaba con su leal amigo Zee, su editor quien estaba en espera del escrito terminado de su último proyecto,
- puntual como siempre-
Dijo el mayor mientras que Saint se apoyaba en el respaldo de su silla,
- solo publicalo-
dijo y cambió de tema
- el jefe terminó su aventura con P'Mild-
Zee sabía para dónde iba
- deberías dejarlo ir-
contestó
- tal vez, un día lo haga, no lo se-El escritor creía que tenía oportunidad, al salir, Zee le recordó a su amigo
- es el cumpleaños de Janis, espero que puedas asistir, el jefe está invitando-
Suppapong se volteo para otro lado y luego de pensarlo respondió
- Está bien, iré -
El día se torno asfixiante, mucho que escribir y pocas ideas en la cabeza, rebuscó en sus libros en busca de inspiración, pero nada de lo que leía le atraía, solo podía pensar en como conoció a Mew, por fortuna el era de las pocas personas que podían llamarlo así, ya que si no eres cercano a él solo debes limitarte a llamarlo por su nombre "Suppasit" no por su apodo.
Lo conoció cuando ganó el primer lugar del concurso de escritores aficionados de su universidad, era su sueño hecho realidad, su historia el don de una estrella ganó para el, un contrato para poder cumplir el sueño de sus padres fallecidos. Alguien había hecho trampa de robar su historia pero aquel dueño de la editorial evitó el plagio y le dio contrato indefinido, solo Saint podría cerrar el contrato cuando ya no quisiera escribir pero Saint tenía una meta. Así que se dedicó a escribir por 6 largos años.
Ahora podría decirse que sus libros estaban generando ganancia, ya no tenía que preocuparse por los próximos años. Salió adelante y cuando estuvo en si mismo se dio cuenta de que no veía a Mew con los mismos ojos. Sabía que aún si intentara algún movimiento no lo vería igual; por eso se limitó a ser un amigo cercano, pero aún así no perdía la esperanza.
La prensa conocía de la mala vida personal del hombre dueño de la editorial Joncheveevat. Así que de vez en cuando contactaban al escritor para cuestionarlo sobre la vida de su jefe, cosa que el siempre evadía, no por que no quisiera hablar, si no por la lealtad de años que los unía y el amor incondicional que le profesaba aunque fuera unilateral.
Se metió a bañar y se alistó para ir a la fiesta de la esposa de su amigo, a pesar de ser una persona antisocial trataba de quedar bien con Zee, su excompañero de la Universidad de Tailandia ambos egresados con honores de la facultad de literatura y artes.
Para Mew Suppasit Joncheveevat esto era pan comido, uno más en su lista, total, estaba cansado de buscar algo serio y tubo más suerte de la que se podía imaginar cuando se volvió un don Juan, muchos lo llamaban cliché, pero para el no importaba el genero, solo los mantenía hasta que se cansaba y los dejaba olvidados.
Siempre que hablaba con Saint se desahogaba, sabía de los sentimientos de su colega escritor, pero el también sabía que era imposible, por eso cada vez que lo rechazaba no volvía a hablar del tema.
Después de haberlo conocido en aquel concurso se dio cuenta del potencial que esté tenía, por eso lo convirtió en uno de sus más leales amigos y a lo largo de los años siempre estaba ahí.Esta vez había conseguido una chica para ser su compañía en la fiesta de cumpleaños de la esposa de su mejor jefe de redacción Pruck Panich quien se había negado a aceptar un peso por la fiesta. Los invitados fueron personal del editor y parte de su familia. Por supuesto ahí estaría Saint, no sabía si estaba enterado de su rompimiento con Mild, aunque las noticias vuelan tenía que terminar de una vez con sus esperanzas.
Aún así sabía que solo se engañaba a si mismo, sabía que veía a Saint como su "chico perfecto". Se sorprendía a si mismo pensando en él pero no sé sentía digno de tenerlo a su lado. Por eso buscaba esa perfección en otro lado.
Su móvil sonó, era la persona que tenía en su mente
_¿iras solo a la fiesta de Janis?
_tal vez lo lo haga pero llevaré a Xiaolín conmigo
_Xiaolín? La hija de los Ariyasakhul?
_Conoces a Lin?
_Es una gran chica, cómprale un detalle para invitarla a la fiesta.
_¿No te molesta que te hable de mis conquistas?
_Como sea, no es como que yo tenga que decidir por ti.
Lo decía porque en el fondo sabía que igual me aburriría de ella y la dejaría ir
_igual que siempre,
dije esperando en la línea
_igual que siempre
Dijo y se despidió
_te veré en la fiesta
Colgó, quizás para no demostrarle su tristeza tras una vez más verlo lejos.
Llamó a Mild, no sabía por qué pero a pesar de todo habían quedado en buenos términos,
_Halo?! Mew? Me sorprende tu llamada
La sorpresa se hizo notable
_¿Iras a la fiesta de la esposa de Pruck?
_no lo sé, mi hermano Luke quiere encontrarse con Suppapong así que es probable que me arrastre con él
_Voyague? Pero ¿No fue el quien le había robado el proyecto a Saint para intentar ganar el concurso?
Mild dudó unos segundos y dijo
_Luke lo hizo porque quería llamar la atención, ellos arreglaron sus diferencias hace años, está llamando, debo irme.
Colgó y la insertidumbre comenzó a jugar con mi mente, ¿Estaba celoso? No lo creo.
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Love Between The Lines
FanfictionYa en los labios, las manos al fuego, rápido el gesto primero, proteger lo que se ha logrado, que no lo rompa el viento ni se extinga en el tiempo de las manos el fuego La aspiración final, incendio, un súbito olvidarse que se estrella en el cenicer...