Viraha Sasuhina

6

Hinata miró el calendario triste.

—12 de junio...— Susurró, sacando su dedo del número dicho. El día que había nacido Himawari... ¿O nacería? Sonrió al pensarlo. Tocaron la puerta de su habitación y abrió.

—Hinata, tenemos que ir a dar nuestro pésame a los fallecidos, tu padre y Hanabi nos esperan— Neji, del otro lado, estaba vestido de negro.

La Cuarta Guerra Ninja había acabado.

¿Qué había pasado?

Luego de que Sasuke se fuera, ella comenzó a entrenar arduamente, tratando de no concentrarse en su familia. Algunas veces se encontró con Sasuke y quiso hacerlo entrar en razón y no logró nada.

Había escuchado que Sasuke no mató a Itachi, pero no los vió en la Guerra así que no podía decir nada.

Por otro lado, se encontraba feliz, ella había logrado salvar a Neji, su querido primo. Debido a que esto pasó, no tuvo que hablar con Naruto porque no hubo rendición.

Ya habían pasado dos semanas desde que la guerra había terminado. Nadie de la familia Hyūga había muerto. Pero si personas cercanas a ellos.

Hinata salió de su habitación yendo hasta la puerta principal con Neji en donde se sumó Hiashi y Hanabi.

...

Dos semanas habían pasado, Hinata se enteró hace poco tiempo que Sasuke estaba en la aldea, encarcelado, pero estaba.

La misma condena de antes se repetía, a excepción de que escuchó que Itachi estaba vivo, igualmente encarcelado. Encontró a Naruto en su camino.

—¡Oe Hinata! ¿Qué tal estás?— Habló el rubio, tenía una caja en sus manos.

—Buen día Naruto— Saludó la mencionada haciendo una leve reverencia, Uzumaki sonrió devolviéndole el saludo.

—Iré a ver a Sasuke ¿Quieres ir?— Hinata con un poco de sorpresa asintió, es ahí mismo donde se dirigía, después de todo el escándalo de la condena de Sasuke e Itachi, fue llegado a un acuerdo sobre ser ejecutado.

Pero gracias a la influencia de Naruto; uno de los principales héroes de la guerra junto a Sakura y Kakashi, el nuevo Hokage, lograron hacer un acuerdo diferente donde Sasuke pasaría 4 meses en cárcel y 2 meses sin poder usar su poder ocular. A Itachi le habían dado 7 meses de cárcel, no conocía qué otra condena había sido impuesta.

—Iré a dejar esto y arreglar algo— Avisó Naruto antes de desaparecer por los pasillos, Hinata suspiró y siguió el camino viendo los nombres de las celdas custodiadas por ninjas de alto rango. Al divisar el nombre de Uchiha Sasuke le habló al guardia y le hizo ver la tarjeta de visitante que tenía, éste no muy confiado abrió la celda y la dejó pasar, nuevamente cerrando-la.

Decir que ahí olía horrible era poco, le dieron náuseas al entrar por lo que inconcientemente cubrió su nariz con la manga de su chamarra.

P.O.V. Hinata.

Al intentar acostumbrarme al olor que había en la celda, no me dí cuenta de que Sasuke me estaba mirando, por lo que tuve un pequeño grito interno al escuchar su voz.

—¿Qué haces aquí?— Me preguntó, su voz se notaba más desgastada y cambiada desde la última vez que nos vimos. Claro, si desde antes de la guerra que no hablábamos.