ROCKLE LOVE

Los Crackers

Mey ❤️.

La universidad en la que estudiaba era una de las más importantes del país, muchos querían estudiar ahí pero solo unos cuantos eran elegidos para hacerlo. Mis padres querían que estudiara Derecho en el extranjero, pero me aferré a quedarme en el país y ellos aceptaron con la condición de que entrara a esa universidad y para mi suerte, lo logré.

En una de esas tantas clases que tenía, Henry mi chófer, me dejó frente a la puerta de la facultad de derecho.

- Hemos llegado señorita - me dijo mirándome por el retrovisor.

Con un suspiro miré por la ventana, muchos universitarios se veían entrando y saliendo de la facultad como muy felices de estar ahí.

- Gracias Henry - contesté abriendo la puerta del auto y bajando con mi mochila en los hombros.

- Recuerde que en la tarde vendré por usted.

- Pierde cuidado - respondí cerrando la puerta mientras me colocaba los anteojos.

Caminé con suma tranquilidad rumbo al interior de mi facultad leyendo el último párrafo de mi libro, cuando sin querer pasé cerca de LP y sus problemáticos amigos que se hacían llamar "Los Crakers", los cinco eran conocidos por ser la banda más influyente del rock en la universidad y claro... de la colonia.

Pero, ¡ey!, eso no acaba aquí, tenían fama de ser una pandilla de
fanfarrones que ocasionaban desastres en la ciudad y daban mala reputación al instituto, muchos chicos les tenían miedo porque si se metían con ellos... muchas catástrofes los atormentarian y quizás por eso tenían el respeto de todos, lo más irónico de los Crackers, es que LP su líder y Mike eran estudiantes de Leyes, ¿Pueden creerlo?, ¿Dos delincuentes estudiando las leyes que los privan de sus actos?, Es de reírse, a veces me preguntaba porque simplemente no los expulsaban pero nunca lo averigué.

Como sea, ellos, no me importaban nada, ni siquiera sabía tanto de su existencia, el único que llamaba mí atención de ese quinteto de perdedores era el más guapo... Gasper
¡Ah! es que Gasper es arte por dónde sea que se le mire, el si que es diferente a sus demás amigos y yo lo confirmo, soy testigo de que Gasper nunca ha tratado mal a nadie de los estudiantes, además, nació con el privilegio de tener un cuerpo atlético, ser alto, de ojos azules, labios carnosos y un brillante cabello café castaño... Como un dios griego.

Debo admitir que él junto con la irritante de su amiga LP, tenían una de las sonrisas más bonitas de la tierra, porque tenemos que aceptar que LP no está nada mal, pero su gran defecto era ser así... Engreída y déspota.

- Miren que tenemos aquí - dijo la intolerante de LP con una risa burlona - Linda - me gritó - si te quitarás los lentes y te arreglarás un poquito más, te invitaría a salir, ¿Lo has pensado? Imagínate salir conmigo, podrías hacerlo.

Detuve mis pasos y la volteé a ver con la mirada más desagradable que pude darle en ese momento, ella tenía que saber lo mucho que me disgustaba su comportamiento, yo bien sabía que LP solo estaba esperando mi respuesta para jugarme una broma pesada, está tan acostumbrada a que todos los tontos le dan entrada que ya no le importa dañar a los demás con sus estúpidos comentarios... pero conmigo será muy diferente.

- Créeme que si tuviera la oportunidad... Ni siquiera te miraría, nunca saldría con una persona tan... Estúpida como tú.

- ¿Que?

- No eres mi tipo cabeza de brócoli.

Las risas de sus amigos no se hicieron esperar, incluso pude escuchar sutilmente la carcajada de Gasper que tapaba su boca con la revista de cómics que traía en mano, inmediatamente la sonrisa de LP desapareció dejando ver un rostro serio y enojado, había dado en el punto y no tenía intenciones de cambiar lo dicho.
Así que lo único que pude hacer fue seguir mi camino como si nada pasara dejando a un lado a ese cracker rencoroso y de obscuro corazón.

🖤❤️🖤❤️🖤❤️🖤❤️🖤❤️🖤❤️🖤❤️

LP 🖤.

Nunca me habían humillado así y mucho menos una simple chica de anteojos como aquella desconocida.

Bueno...

Tal vez no es tan simple que digamos, desde que la miré se me hizo interesante, se ve que tiene un mal carácter, era la primera vez que la veía, siempre estoy aquí debajo de este árbol recargada en el auto de Gasper, fumando cigarrillos y mirando chicas y de pronto, ella aparece así de la nada, dejándome perpleja por su comportamiento.

- ¿Cabeza de Brócoli? - dije indignada prendiendo otro cigarrillo para controlar mi ansiedad - ¿porque de todos los malditos sobrenombres que me pudo haber puesto tuvo que elegir ese?... Es tan ridículo.

- Ya superalo - habló Gasper volviendo la mirada a su cómic - en algún momento alguien tenía que ponerte en tu lugar.

- Si pero... Nunca creí que fuera ese tipo de mujer la que lo hiciera... ¿Así que se llama Mey?.

- ¿Acaso no la conoces? - me preguntó Mike - Estudia derecho en la misma facultad que nosotros - mi amigo estaba sorprendido de que no supiera de ella - es una chica rara y muy reservada, no le habla a nadie.

- Y no le va nada mal el papel - replicó nuevamente Gasper - ese tipo de mujeres son las más atractivas... ¿O no LP?

- Para nada... es una perdedora - finalicé colgando mi mochila en mi hombro para ir a clases.

- Adiós brócolito - se burló Mike y mis amigos rieron fuertemente, tuve que tragarme la burla y seguí mi camino como si nada.

En esta universidad tengo el primer lugar de ser la mas irresponsable, siempre llego tarde a clases y está vez no fue la excepción. Así que antes de entrar al salón tuve que tirar mi cigarrillo y mascar chicles de menta para eliminar mi aliento y evitar reportes. Cuando estuve lista tomé la manija de la puerta del salón y la abrí.

Fue inevitable interrumpir al profesor que explicaba ante la mirada atenta de sus alumnos y cuando me vió simplemente movió la cabeza decepcionado.

- ¿Qué tal profesor?, ¿Puedo pasar?

- No puede ser, ¿otra vez tú? preguntó y solo subí los hombros sin mostrar ni una gota de vergüenza - ¿Cuando piensas cambiar?

- No lo sé, quizás mañana - entonces mis compañeros se echaron a reír.

- ¡Silencio! - gritó con severidad y todos se callaron - ya me da igual, de todos modos estás reprobada en mi materia... Ahora entra y guarda silencio si eres tan amable.

Sonreí satisfecha por mi cometido y entré dirigiéndome hasta el final de las butacas para seguir perdiendo mi tiempo, iba casi a la mitad de camino cuando... Mis ojos la miraron, miraron a la chica que unos momentos antes me había humillado, estaba ahí sentada con toda la atención puesta en su cuaderno de notas...Mey era mi compañera de clases y yo apenas me estaba enterando.

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