ROCKLE LOVE

El fin de semana

Mey ❤️.

No es de sorprenderse que LP llegue tarde y que todavía tenga el cinismo de pedir permiso para incorporarse a clases, todos los días son así, a ella no le gustan los estudios y mucho menos esta carrera, apuesto a que está solo por obligación y no por voluntad, pero eso no es parte de mi incumbencia.

— Vaya, vaya... vaya —dijo burlona sentándose a un lado de mí, ¡no entiendo porque habiéndo tanto espacio y tantos pupitres, LP tuvo que sentarse justo aquí! — ¿Quién diría que la Nerd de este salón sería mi compañera de clases?

«No puedo creer que apenas se vaya dando cuenta de esto»

— Por desgracia sí y así es desde que entramos a esta universidad.

— ¿Enserio?, Jajaja, pues mira que interesante, yo ni siquiera sabía de tu existencia.

— Ya veo, además de impertinente... Despistada — dije y LP dejó de sonreír, no le gustaban para nada mis respuestas.

— ¿Sabes quién soy yo? — preguntó regresado a su altruismo — no me conoces, no sabes nada de mi, yo dominio lo que  quiero y nunca pierdo.

— ¿Ya terminaste? — pregunté tajante, no dijo nada, solo me miró mal — A nadie le importa lo que haces LP, deja de molestar, ¿Qué no ves que estoy en clases?.

Acomodé mis anteojos y volví a mi libreta de notas, por culpa de esa tipa ya no entendía lo que decía el profesor.

— No te vas a salir con la tuya Mey, advertida estás.

De inmediato tomó sus cosas y salió como una chispa del salón azotando la puerta, más tiempo tardó en entrar que en salir, había dejado sorprendidos a todos incluyendo al profesor que no sabía lo que había pasado, que bipolar, no aguanta nada.

Y de regreso a casa, justo pensé en lo peligrosa que podía ser LP si obtenía su odió total, no le tengo miedo, pero... Esa mirada que me dió al salir del salón no me gustó nada, y es que dejando de lado que es una engreída, grosera y vengativa junto a sus amigos, rumoran que anda en asuntos chuecos ( traficando droga pues) así que no hay que fiarse de ella ni de sus amigos que seguramente han de estar igual que LP. Bueno, al menos ya no la tenía cerca, este fastidioso día había terminado y lo único que me esperaba era dormir y olvidar a LP y los problemas que ocasiona al hablar... Pero mi descanso apenas iniciaba cuando Juliette llegó a mi cuarto como una loca.

Juliette era mi prima, un año mayor que yo, era sobrina de mi padre, una chica todo lo contrario a mí, hermosa y atlética pero demasiado loca y atrevida.

— ¿El amor no es como lo esperabas? — Preguntó en medio de mi suspiro.

— ¿Qué... Qué haces aquí?

— ¿Que clase de pregunta es esa?, vine a visitarte a ti y a mis tíos o ¿A qué vendría a esta tonta ciudad? — respondió entrando y tirándose en el sofá de mi cuarto — ¡Ahh! fue un viaje muy cansado... Venir desde Suiza no es nada fácil.

Hubo un silencio, estaba cansada pero ella como es una guacamaya que nunca deja de hablar, rompió mi silencio.

— ¿Por qué no me dijiste que tú chófer era un modelo?

— ¿Hablas de Henry?.

—Si, él... Es tan guapo.

Comencé a pensar mirando el techo donde brillaban las estrellas eléctricas que había pegado, nunca pensé en él, quizás Henry contaba con sus 27 años, era muy alto y de cuerpo esbelto y atlético, si lo pensamos bien, el era muy atractivo pero lamentablemente no era mi tipo.