Keiji Akaashi 📚

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Advertencia: Violencia leve, baja autoestima, happy ending

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¿Por qué?, ¿Por qué?, ¿Por qué?, ¡¿POR QUÉ, JODER?!

Sus manos temblaban, su respiración se aceleraba cada vez más, los golpes continuos a la, ya, magullada pared solo causaban más daño. La cabeza de la chica daba vueltas, su visón se nublaba por culpa de las lágrimas, en su mente se repetía una y otra vez aquella escena.

¿Acaso no fue suficiente?, ¿acaso ella no dio absolutamente todo por aquella relación?, ¿por qué siempre era lo mismo, no la podían escoger a ella una sola vez?

¿Qué clase de placer retorcido le daba a su hermana quitarles a todos sus novios, por qué la odiaba de esa manera? ¿Tanto le costaba verla feliz una sola vez en su puta vida? ¿ERA TANTO PEDIR?

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En el momento que Akaashi entro a la casa de su mejor amiga lo único que logro escuchar fueron los constantes golpes de algo contra una pared, aquello lo alerto de inmediato y sin pensarlo dos veces subió las escaleras a toda velocidad.

Jamás podría olvidar lo que vio nada más abrió la puerta de la habitación de la menor, nunca podría olvidar el estado de angustia, ira y desesperación de la chica que siempre amó.

Sintiendo como sus ojos se llenaban de lágrimas se acercó a la (c/p) para poder tomarla muy delicadamente de los hombros y voltearla para quedar cara a cara.

Ver como sus ojos (color) derramaban gruesas lágrimas y como todo su rostro estaba de un color rojizo debido al llanto le destrozaba, no podía verla así, le ardía el corazón al ver aquella expresión tan triste y apagada.

Como pudo la hizo sentar en la punta de la desordenada cama para ir a buscar el botiquín de primeros auxilios, debía detener el sangrado de los nudillos antes de que se infectase y pasase a mayores.

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Al terminar de vendar las manos de la menor, dejo el botiquín a un lado y se sentó junto con ella en la gran cama para poder verse a la cara, podía notar la clara vergüenza que sentía que ella por la escena montada, pero a Akaashi no podía importarle menos aquello.

Lo único que quería el pelinegro era la felicidad de la chica, poder volver a ver la suave sonrisa en su rostro y sus ojos iluminados al ver algo que le emocionaba.

-Ella lo volvió a hacer Keiji,... ¿Dime sinceramente, no soy suficiente? ¿Ese es el problema? ¿Yo? - Susurró la (c/p) con un tono tembloroso mientras que sus ojos (color) miraron fijamente al chico frente a ella.

Los ojos de Akaashi se abrieron en sorpresa ante lo dicho, no podía llegar a creer que ella pensase de esa manera. Con toda la delicadeza del mundo él puso su mano derecha en la mejilla húmeda de la chica y con el dedo pulgar comenzó a quitar las lágrimas que aún caían de su ojo - No quiero volver a escuchar que digas esas cosas, eres perfecta (Nombre). Eres sin lugar a dudas la chica más hermosa, inteligente y leal que pude y podre llegar a conocer. Ese idiota no tiene ni idea de lo que se pierde, eres mucho mejor que tu hermana y cualquier otra chica de este mundo, ¿sí? - Dijo en un tono decidió, en sus ojos azules se podía ver la sinceridad de las palabras a la vez que alguna que otra lágrima se le escapaba de los ojos, para él era demasiado doloroso verla así.

-Kei, hey no llores- Murmuró la chica con voz preocupada- ¿Como quieres que no llores mientras que el amor de mi vida está sufriendo de esta manera?, (Nombre), te amo sobre todas las cosas y odio verte así. Déjame enamorarte, te lo pido, déjame ser quien te enseñe a amar.

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De ese suceso ya habían pasado 7 meses, la (c/p) había dejado a su, ahora, ex novio y no volvió a hablar con su hermana mayor. Sus padres apoyaron su decisión al completo y se alegraron de su relación con Akaashi.

La (c/p) y el ojiazul decidieron mudarse juntos a un apartamento en Tokio cerca de las universidades de ambos y para eso fueron a la casa de la chica. La chica fue en busca de su padre al piso de arriba mientras que Akaashi fue dirigido al living por su suegra a lo que ella iba a buscar algo para picar y beber. Y para la mala suerte de el chico se encontraba la hermana mayor de su novia en la habitación.

Su hermana en un arranque de celos intento seducir al azabache y al ver que la ignoraba le intento besar, siendo encontrados por la madre de ambas chicas. Las dos mujeres tuvieron una pelea muy fuerte, terminado con la hija mayor encerándose en su cuarto y los padres de ambas disculpándose con Akaashi.

La pareja decidió comentarle a ambos adultos el motivo del por qué estaba ahí, siendo la idea más que aceptada.

Por fin ambos luego de ser mejores amigos toda su vida, comenzarían un romance juntos.

Final Extra

15 años después

-Keijiiiiiiiii, dile a Bokuto-san que no rompa las casitas de madera de tus hijas.

Akaashi solo soltó una risa jugetona para besar los labios de su esposa - Te amo (Nombre).

K

𝐇𝐚𝐢𝐤𝐲𝐮𝐮 || 𝐎𝐧𝐞-𝐒𝐡𝐨𝐭𝐬 ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora