— ¿Realmente ella es tu esposa? — preguntó Eunbi sirviéndose un poco más de comida en su asiento al lado de Seul, se habían presentado en el transcurso hacia el restaurante en el auto de la castaña
Jennie las había invitado a almorzar como modo disculpas tras haber presenciado aquella discusión y aquellos tratos por parte de su supuesta esposa, porque esa no era su mujer... para ella, Lisa no era así
— Nos casamos hace un par de meses — encogió sus brazos revolviendo su ensalada, no tenía ánimos de nada, solo irse a su casa y llorar aferrada a la almohada de Lisa... ¿Dónde había quedado su amor hace un par de horas?
— Siento mucho lo que pasó... — EunJi tomó su mano sobre la mesa para reconfortarla
— Esta bien... No sé que fue lo que le ocurrió, ella no es así... — confesó
— ¿Ella nunca te grita? porque si ella es así, no sé como logró conquistarte — comentó Seulgi
— Nunca nos habíamos gritado, ella parecía... diferente
— ¿En que sentido? — preguntó Momo tomando su batido
— Se veía enojada, realmente furiosa, me sorprendió porque todos los días ella solo lleva una sonrisa...
Momo escupió su batido por segunda vez en el día, sus compañeras la miraron horrorizadas
— ¿Una sonrisa? ¿Estas segura? Porque todos que conozcan a Lalisa Manoban saben que ella no es así... — siguió Moonbyul
— Lo que dicen los medios en una farsa, Lisa no es así, no sé porque tienes esa imagen de ella
— Con que Lisa vivirás, porque todos sabemos que esa es la verdadera apariencia de Manoban, y aún así, nosotras decidimos arriesgarnos porque, a pesar de su humor de mierda, es muy talentosa — comentó EunJi y todas asintieron
Jennie quedó pensando ante aquellas confesiones ¿Realmente su esposa era otra?
¿Quién era Lisa realmente? Porque cuando la conoció, nunca tuvo alguna de esas características, Lisa siempre sonreía cuando estaba junto a ella
— Mira, ahí viene el camarero, preguntale sobre Lalisa Manoban y te sacaras de dudas — Seulgi señaló al hombre que se acercaba con la cuenta
— Aquí tienen, señoritas — aquel jóven le entregó un papel con la cuenta escrita en el, a lo que Jennie la recibió
— Este.. mmh ¿Le puedo preguntar algo? — se animó Jennie
— Adelante — aceptó gustoso mirándole los pechos a Jennie, ella lo notó
— ¿Conoce a Lalisa Manoban?
— En persona Dios quiera que no, pero con lo que comentan de que aquella bailarina es una ogro irritante, prefiero no cruzarme con ella nunca
— Oh.... — calló — Gracias por la ayuda — dejó el dinero sobre la mesa poniéndose de pie al igual que las restantes
— De nada, linda — le guiñó un ojo poniéndola nerviosa, pero ella también podía jugar, así que se acercó hasta el oído del camarero
— Si Lalisa Manoban se entera que estas coqueteando con su esposa, te dejará en el hospital un mes entero conectado a un tanque de oxígeno — amenazó dejando al jóven paralizado para salir del lugar después
— ¿Vamos a volver ahí? — preguntó Momo una vez en el auto de Jennie, tal y como habían llegado al restaurante, la castaña se quedó pensando un tiempo queriendo sacar una conclusión
De repente se le ocurrió una brillante idea....
Con aquello podía conocer más a Lisa y podía cerrarle la boca aprendiendo algo nuevo y no solo estorbar la justo como había dicho
— Tengo una idea — llamó la atención de las presentes quiénes pararon su conversación —como me comentaron, EunJi es la líder del grupo ¿Cierto? — la nombrada asintió — Ustedes quieren ganar aquella competencia de baile para ser reconocidas, pero primero quieren callarle la boca a la que dice ser mi esposa ¿Tengo razón? — volvieron a asentir
— ¿Pero eso que tiene que ver? — EunJi estaba confundida
— Pues ustedes quieren cerrarle la boca a Lisa y yo quiero saber quién es mi esposa realmente, así que estaba pensando... en que, talvez podía unirme a ustedes.... — dijo al fin, algo tímida
— ¿U-unirte a nosotras? — Eunbi se sorprendió
A todas le cayó bien Jennie, ella se mostraba amable a pesar de ser desconocidas
— No sé bailar pero prometo hacer el esfuerzo en la competencia, quiero aprender algo nuevo así como le grité a Lisa — una sonrisa triste se asomó en su rostro al recordarlo
— P-por mi no hay problema, Jennie. Pero es decisión de todas — dijo EunJi mirando a sus compañeras
— Yo digo que si, será de gran ayuda — siguió Seulgi
— Yo también digo que si
— No hay problema, ella es la pieza que nos faltaba
— ¡Bienvenida, Jennie! — gritó Momo aplaudiendo haciendo reír a todas
Jennie tenía una gran sonrisa en su rostro, aquellas cinco chicas eran increíbles
— ¡Gracias! ¡Gracias! ¡Gracias! No las defraudaré — agradeció pero una pregunta apareció en su mente — ¿Y ustedes tienen nombre como grupo?
— Oh... Nunca habíamos pensado en eso... — habló Moonbyul y las demás asintieron
— ¿Les parece si elegimos?
— Tengo uno en mente, no sé si les guste pero solo será para molestar a Lisa, no es nada oficial — dijo Jennie riendo
— ¿Y si ella te trata al igual que nosotras?
— Y lo hará porque cuando pise esa sala mañana, no seré su esposa, sí no parte de su grupo y por ende, su aprendiz, veré quién realmente es Lalisa Manoban... — la voz decidida de Jennie hizo sentir poderosas a las demás de aquel auto
— Y entonces... ¿Cuál es el nombre?
— A Lisa no le gusta que le digan Lili, así que estaba pensado en llamarnos... Lilies — rió
— A pesar de usarlo como burla, es un buen nombre — dijo Eunbi
— ¡Prepárate Lalisa Manoban porque Lilies va por ti! — Momo alentó a su equipo
Un gran ¡¡Uuuhhh!! lleno de aplausos se escuchó dentro de aquel auto en medio de la carretera
Prepárense porque Lilies va hacia la cima con una nueva integrante
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Lisa llegó tarde a su casa luego de estar todo el día lamentándose y tratando de pensar en algo para ganar el perdón de Jennie
Arrojó el abrigo hacia el sofá esperando oler la deliciosa cena que su mujer siempre tenía preparada después de llegar del trabajo
— ¿J-Jen? — fue hacia la cocina esperando encontrarla, pero el lugar estaba vacío
Buscó en la sala, en el baño y la habitación esperando encontrarla, pero solo había soledad... Exactamente como vivía ella antes de conocer a Jennie
Al parecer hoy no había cena romántica entre las dos, besos en el sofá de la sala viendo una película animada tal y como le gustaba a su castaña, un baño caliente acariciando cada parte de ambas, y por último hacer el amor en su habitación hasta caer dormidas... juntas
Eran la rutina que compartían todos los días, Jennie lo decidió así y ella como buena esposa aceptó sin discusión
Pues solo quería hacer feliz a Jennie, además, le gustaba hacer cada una de esas cosas junto a su perfecta y preciosa esposa, se sentía... Amada y protegida
Pero al parecer hoy no habrá nada de eso
— ¿Dónde estás? — observó el reloj en su muñeca, once en punto de la noche — ¿Ya llegas? — sin siquiera quitarse la ropa de todo el día, se sentó frente a la puerta en espera de su castaña
No quería perderla por lo idiota que había sido, no debía perderla, Jennie era toda su vida
Aún así se quedó dormida frente a la puerta porque Jennie no llegó.
