return (brangie g!p) Terminada

Fuera de lo comun

Angie sacudía su cabeza intentando quitar ese mareó, se levantaba apoyándose de la pared trataba de ver que era lo que estaba pasando, pero su vista era borrosa, tampoco lograba escuchar nada, solo un molestó zumbido dentro de sus oídos.

Inmediatamente después, por fin aquel mareo se fue y recobraba la vista y la vista y la audición, logrando escuchar los gritos de Brisa llamándola.

Reaccionó al instante y vio a aquel sujeto que vestía de negro y usaba pasamontañas, igual al que había grabado la cámara de seguridad del banco.

-¡Déjala! - corrió hacia ella y el tipo sin inmutarse la apunto con un arma que sacó de su espalda, Angie frenó al instante, levantando sus manos al nivel de sus pechos - tranquilo - pedía - sólo no la hagas daño.

Brisa era sujetada del cuello y sollozaba, el tipo la abrazaba por la espalda para que no pueda huir. Ambas cruzaron miradas y fue cuando ambos corazones se estrujaron, al nunca imaginarse estar en una situación así.

-Te lo ruego - suplicó Angie- por favor déjala ¿quieres dinero? Yo tengo mucho, sólo pídelo - trataba de negociar pero el tipo ni parecía pensarlo - te lo entregó todo si es lo que quieres pero suéltala, por favor, es una mujer embarazada - mencionó teniendo la esperanza del que el sujeto recapacite, pareció funcionar.

El tipo miró por un instante a Brisa y luego a Angie, pensándolo al ver la forma en cómo se miraban, parecían necesitarse a su lado, veía amor, un amor que hace mucho no encontraba.

Para sorpresa de ambas, él comenzó a soltar de manera lenta a Brisa, sin quitar la vista de la peliazul, fue retrocediendo a paso pausado, dirigiéndose a la puerta sin dejar de observarlas, ninguna se movía para evitar que cambiará de opinión. Angie observó el detalle de que él tenía la llave de su casa, hace mucho había desaparecido una llave, tal vez fue él. El sujeto guardó el arma y decidió marcharse, cerrando por fin la puerta. Ambas chicas suspiraron de alivio y Brisa al verse a salvo, corrió directo a los brazos de Angie, las dos con una gran sonrisa y lágrimas en los ojos.

-Tuve mucho miedo - Brisa sollozaba, abrazando aún más fuerte a su novia.

-Tranquila amor, ya pasó, ya se fue - o eso pensaban...

Un disparo resonó por todo el lugar.

Angie se paralizó al oír el jadeo por parte de Brisa sobre su oído, sintiendo al instante un líquido recorrer sus manos, comenzó a negar con desesperación, no queriendo soltar a Brisa.

El sujeto estaba asomado en la puerta, con el arma apuntando hacia ellas y humo saliendo de la pistola como prueba del disparo.

-No no no, Brisa...- Angie sintió el cuerpo de la pelinegra más pesado, Brisa no podía mantenerse de pie, se sentía débil. La peliazul se arrodillaba abrazando a su novia y colocándola con cuidado en el suelo - amor...- lloraba acariciándole el rostro - amor...por favor - la pelinegra respiraba con dificultad, estaba agonizando, la bala había impactado en su espalda, quedando entre sus pulmones. Angie miró hacia la entrada y el tipo seguía allí, mirando la escena - ¿¡Quien demonios eres!? - gritó ya harta de todo - ¿¡por que no me matas de una vez y acabas con esto!? - su voz se quebró - ¡Mátame ahora! ¡Dispara! - lo retó - ¡Vamos! ¡Mátame joder! - lloraba - mátame de una vez...- se desmoronó por completo, mirando a su novia que yacía ensangrentada.

El sujeto no hizo nada, sólo bajo la mirada y dándole un último vistazo se marchó. Angie volvió a abrazar a Brisa y besaba su frente con cariño.

-Tranquila...- le habló al pegar su frente con el de ella, cerrando sus ojos - voy a volver...y voy a salvarte...tu solo confía en mi - la observó con cariño - voy a volver y vamos a cumplir nuestro sueño de tener una hermosa familia, lo prometo amor - besó su mano - lo haré.