Capítulo 3 - Cita De Amigos

383 54 28
                                    

Casa de Beatriz...

Gerardo se encontraba en la cama, fumando un cigarro, Beatriz recargando su cabeza en su pecho. Ambos desnudos después de haber tenido relaciones.

"Creo que debemos tener más cuidado" Dijo Gerardo, apagando el cigarro en el cenicero.

"¿Por que dices eso?" Preguntó ella, corriendo su dedo índice sobre su pecho.

"Tu hermana está notando más mi ausencia. Hace más preguntas, donde estoy, por que me tardo.."

"Ay, Elisa es una tonta. No se va dar cuenta de nada. Además jamás se imaginaría que tú y yo estamos juntos."

"¿Y si se entera que? No quiero perder mi matrimonio, mi parte de la editorial."

"Eso no sucederá, cariño. Mira, hagamos esto, para que no dude de ti. ¿Ya casi es tu aniversario, no?"

"Creo que si.."

"En serio que si eres un pésimo marido." Dijo, soltando una carcajada. "Por eso yo prefiero solo diversión entre nosotros, así es más excitante."

"Ya, no digas estupideces. ¿Cual es esa idea tuya?"

"Uyy, que amargado. Bueno, cómprale flores, hazla sentir que aún te interesa. No le des oportunidad de sospechar. Tu aniversario es una gran oportunidad para eso, hagan una fiesta en grande. Ay si, hasta yo podría ayudar a mi hermanita a organizarla."

"Suena bien. Pero mucho cuidado con lo que digas."

"Cariño, yo siempre tengo cuidado."  Los dos se besaron, acostándose de nuevo.

Casa Editorial Larimar...

   Elisa dejó salir todo ese sentimiento que llevaba dentro, todas esas lágrimas por derramar, refugiándose en los brazos de ese hombre, su mejor amigo.  El que siempre estaba ahí cuando más lo necesitaba. Fabián solo la abrazaba, acariciando su pelo, hasta que la calma regresó a su cuerpo. Sacó un pañuelo de su sacó, y le secó las lágrimas, con tanta delicadeza y cariño, que Elisa suspiró.

"Que pena contigo, Fabi. No se lo que me pasa."  Dijo avergonzada.

"Conmigo no tengas pena. Sabes que puedes confiar en mi. ¿Por que estas así? ¿Es por Gerardo, verdad?"

Elisa solo bajó la mirada, sin poder contestar. Pero con ese gesto confirmando lo que Fabián sospechaba.

"¿Que hizo ahora?" Preguntó, tomándola de la mano y llevándola al sofá, los dos sentándose lado a lado.

"El problema es lo que no hace. Fabi.. siento que Gerardo ya no me quiere. Nunca esta conmigo, siempre tiene alguna excusa de por que llega tarde a la casa, y.." sus mejillas se pusieron coloradas, y bajó la mirada sin poder continuar.

   "¿Qué mas?" Preguntó tomándola del mentón, alzando su mirada. "Dime."

   "Hace tiempo que el.." Aclaró su garganta, poniéndose más roja. "que el no quiere.. ay Fabi, no me hagas decirlo por favor" Se cubrió la cara apenada.

"¿No quiere intimidad?" Elisa asintió sin poder mirarlo. "No cabe duda que Gerardo es un estúpido."

"¡Fabi!" Lo miró sorprendida sin poder evitar esa risa. "No digas eso."

"Es la verdad. El es un tonto. Cualquier hombre se moriría por tenerte a su lado, por hacerte el amor... Si tu fueras mía.." Sin notarlo, los dos se fueron acercando más, mirándose a los labios. Elisa sintió ese cosquilleo de nuevo, sus corazones latiendo rápidamente.

   "Fabián..¿por que dices eso?" Elisa susurró, tocando los labios de el, acariciando.

En ese instante alguien tocó la puerta, rompiendo la magia de ese momento. Elisa se levantó, poniendo distancia entre ellos.

   "Si, adelante." Dijo, sentándose en la mesa y tomando de su café.

  "Con permiso." Anunció la secretaría entrando a la oficina.  "Aquí están los otros manuscritos que me pidió, Elisa."

   "Ah, gracias, Sonia.  Ponlos aquí."  La secretaria se retiró, y Elisa volteó a ver a Fabián con una pequeña sonrisa.  "¿A trabajar?"

   "A trabajar." Contestó el y se sentó al lado de ella en la mesa.  Pasaron el resto del día revisando libros, comunicándose con autores, mandando libros a imprimir.  Pero durante todo ese tiempo, las miradas a escondidas no paraban.  El la amaba más que nunca.  Pero ese sentimiento de amistad que ella sentía hacia Fabián, poco a poco se convertía en algo más grande.

  Después de un largo día de trabajo, Elisa estaba recogiendo sus cosas para irse a su casa, cuando Fabián la sorprendió nuevamente.

   "Bonita.. ¿que dices si vamos por un helado?"

   "¿Hablas en serio, Fabián?" Preguntó Elisa con una gran sonrisa en su rostro.

   "Muy enserio.  Como solíamos hacerlo en la universidad, ¿recuerdas?"

   "Como olvidarlo.  Comíamos helado después de clases mientras  caminábamos por el parque.." Suspiró recordando esos tiempos.

   "Tu siempre uno de fresa, yo uno de chocolate.  Y nos sentábamos en las bancas viendo a los niños jugar en los columpios.  ¿Que dices? Un helado con tu mejor amigo, como en los viejos tiempos." Pregunto de nuevo, con esa tierna sonrisa, su hoyuelo haciendo presencia.

   "Como en los viejos tiempos.  Acepto tu invitación.  Vamos por ese helado."  Elisa lo tomó del brazo, y los dos salieron hacia ese parque.  Una cita de amigos, que poco a poco iban descubriendo sus sentimientos.

Si Tú Supieras [Fanfic]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora