Capítulo 13 - Sueño

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Hacienda La Reina...

   La siguiente mañana la suave luz colándose por la ventana despertó poco a poco a Fabián.  Una sonrisa apareció en su rostro al sentir a Elisa entre sus brazos, su respiración rítmica indicando que aún seguía dormida.  Tantas veces había anhelado despertar al lado de ella de esta manera, que aún le parecía imposible que ese anhelo ahora fuera una realidad. 

   Se encontraban los dos bajo las sábanas, el abrazándola por la espalda.  Sus sentidos despertando con la sensación de sus pieles desnudas rozando suavemente, el dulce perfume de ella envolviéndolos.  Simplemente se moría de amor por esa mujer.

   Fabián corrió el pelo de Elisa a un lado, besando su cuello, su mano sobre su vientre la estrecho más contra el, subiendo lentamente, acariciando su seno con tanta delicadeza que un suspiro escapó de los labios de Elisa, su piel erizándose.  Con los ojos aún cerrados, una tierna sonrisa en su rostro, ella recargó su cabeza hacia atrás buscando los labios de Fabián.  Un beso lento, suave, nació en ese momento.

Elisa giró en sus brazos, quedando frente a frente, acariciando su mejilla, corriendo sus dedos por su pelo desordenado. Miradas y sonrisas enamoradas entre ellos dos. La felicidad de ambos evidente al despertar en los brazos del ser que tanto amaban.  Ese despertar era un momento mágico, inolvidable.

Sin dejarse de mirar a los ojos, Elisa subió una pierna sobre la cintura de Fabián, y el sosteniéndola del trasero entró en ella lentamente, amando esa expresión de placer en su rostro, esos pequeños gemidos y jadeos al comenzar a moverse en ella.

Los dos abrazados, dándose besos y caricias mientras se amaban despacio, sin prisas, sintiéndose al máximo. Las manos de el recorrían sus piernas, apretaban su trasero, acariciando su espalda, haciéndola soltar esos gemidos que el tanto adoraba, sus besos bajaron a sus senos, atrapando su pezon en su boca, torturándolo dulcemente con su lengua.  Los movimientos de los dos se volvieron más intensos al sentir ese climax acercándose más y más, hasta que ambos estallaron de placer.

"Amo despertar así a tu lado, mi amor." Susurró Elisa, acurrucándose en el.

"No más que yo, bonita. Es un sueño hecho realidad. Pero pronto viviremos juntos, y despertaremos así todos los días." Dijo Fabián besando su cabeza.

"¿Todos los días, eh? Eso si me interesa." Sonrío pícara, mordiéndose un dedo.

"Ah, ¿con que solo le interesa mi cuerpo, Sra. Elisa? No sea tan atrevida." La comenzó a atacar a cosquillas, Elisa envuelta en risas tratando de escapar.

"Fabi, ya, basta. Te amo, tontito."

"Como yo te amo a ti, mi bonita." La tomó del rostro, besándola tiernamente.

Después de una rápida ducha juntos, bajaron a desayunar, y luego Elisa se reunió con el abogado en el despacho para preparar la demanda de divorcio. Esperando que la separación no llegara a ser tan complicada, Elisa accedió a que repartieran todo por igual, y que el se quedara con la casa. Lo único que ella quería era la editorial por la que tanto trabajó toda su vida. Finalizando la reunión, Elías se despidió, prometiendo estar en contacto para informarle como iba el proceso de la demanda.

Elisa fue en busca de Fabián, cuando el timbre de su celular la detuvo, era su hija Abby llamándola.

   Elisa fue en busca de Fabián, cuando el timbre de su celular la detuvo, era su hija Abby llamándola

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   "Hola, mi vida ¿Como estas?" Preguntó Elisa alegremente al contestar.

   "¡Hola, mami! No tan bien como tu, te escuchas muy feliz, eso me gusta."

   "Lo estoy, Abby.  Nunca imagine que tanta felicidad fuera posible." Suspiró.

   "No sabes cuanto me alegro por ti, mami.  Te lo mereces, tú y Fabi." Dijo Abby sinceramente, pausando por un momento.

   "¿Todo bien, hija? ¿Pasa algo?" Preguntó Elisa sintiendo Abby le que le quería decir algo más

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   "¿Todo bien, hija? ¿Pasa algo?" Preguntó Elisa sintiendo Abby le que le quería decir algo más.

   "Si, mamá... no quería interrumpir este viaje tuyo con preocupaciones, pero.. pensé que quizá debía avisarte esto.."

   "Eso no importa, mi vida.  Dime que pasa." Le aseguró con esa voz de ella dulce y comprensiva.

   "Mi papá vino a buscarte de nuevo, y como no estabas se metió al despacho en busca de algo, y salió con una sonrisa que me dio muy mala espina.  Espero no esté tramando algo malo, pero no se.."

   Elisa suspiro, cerrando sus ojos, su mano en su rostro.  Seguramente buscaba los papeles de la editorial.  Sabía lo importante que era para ella, y si quería hacerle más daño trataría de quitársela.

   "No te preocupes, hija.  Creo que se lo que buscaba.  Esta misma noche regresamos a la ciudad y revisaré el despacho a ver que fue lo que se llevó.  También hay unas cosas que quiero hablar contigo."

   "Si, mami.  Te espero entonces.  Te quiero."

   "Y yo a ti, mi vida."  Elisa colgó la llamada y fue en busca de Fabián, encontrándolo en la caballeriza.  Le contó lo que Abby le dijo, y también pensaba lo mismo, que Gerardo buscaría la manera de quedarse con la editorial, pero ellos no lo iban a permitir. 

   Decidieron dejar ese tema por el momento, y dedicarse a disfrutar el último día en la hacienda.  Un recorrido a caballo por los bellos paisajes, y después un picnic al lado del lago.

Si Tú Supieras [Fanfic]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora