Estrellas.
Eso era todo lo que ocupaba su campo de visión. Pequeños puntos de distintos colores, cuya diferencia no era perceptible al ojo desnudo, sin embargo, la costumbre de estar en aquel punto cada noche, dedicar su tiempo a la misma observación, le hacía ver algo más que solo luceros adornando la gran capa azul que cubría la tierra. Veía toda una vida allá fuera que esperaba lograr comprender algún día.
No importa cuantas veces se encontrara en la misma posición, nunca se acostumbraría a la sensación de caída que le causaba estar frente a tanta incertidumbre. Aunque le hacía sentir pequeño, ahogado por un vacío casi tan grande como aquel que se encontraba pasando la atmósfera, paradójicamente, también lograba llenarlo.
—Ri, dame las coordenadas –solicitó Alex a su acompañante, sin quitar la mirada del oscuro cielo, preparado para continuar con su repetitivo trabajo por el resto del día.
—¿Las de ayer no funcionaron? –preguntó el menor alarmado, devolviendo su vista hacia la pantalla frente a él y continuando a presionar teclas frenéticamente.
Alex negó lentamente. —Ya no –respondió, acercándose al visor dirigido hacia el techo transparente del observador–. Pero estamos cerca.
El duo de amigos había pasado las últimas horas dentro de la oficina del departamento de física que se les había sido asignada. A pesar de que habían estado sobre explotando su horario, pasándose de las horas debidas que podían permanecer allí, no era la primera vez que se encontraban en dicha posición. Alex siempre había sido muy dedicado en cuanto a su campo profesional se trataba, no había una sola alma en el campus que, al escuchar su nombre, no acompañara su rostro de una expresión de sorpresa y respeto de manera simultánea. Incluso sus maestros y superiores lo consideraban uno de ellos, un patrimonio de la facultad, a pesar de la diferencia de títulos y años de experiencia. El británico nunca paraba a pensar sobre aquel impacto, no analizaba cómo lo consiguió o cómo lo mantendría. Francamente, eran pocas las veces que se preocupaba por algo más fuera de su aporte y su trabajo dentro de sus cuatro paredes, y tal vez, era ese hecho aquello que lo mantenía anclado a su mérito.
—Intenta ahora –pronunció Rian con una última presión a su teclado, dirigiendo la mirada a su amigo.
El telescopio por el que ahora los ojos de Alex se perdían en medio de cuerpos estelares, empezó a desplazarse y ampliar su foco lentamente. No pasó mucho tiempo antes de que una sonrisa orgullosa apareciera en el rostro del mayor, quien detuvo el movimiento del artefacto rápidamente, analizando y digiriendo la imagen que tenía en frente.
—¿Funcionó? –preguntó su compañero al momento que Alex volvía a su escritorio y añadía más apuntes a su ya desgastado cuaderno de cálculos.
El último asintió frenéticamente. La sonrisa había sido borrada, pero su expresión aún exudaba rasgos dignos de una ráfaga de emoción y adrenalina.
—La observación será mucho más fácil, solo falta calcular el campo de... ¿qué haces? –se frenó el mayor al notar que su acompañante empezaba a organizar el río de papeles que descansaban en su respectivo escritorio, asegurándose de guardar todas sus pertenencias.
—Al, ya se acabaron las horas extra –dijo, como si fuera la respuestas más obvia, poniéndose su abrigo y conectando ojos con su amigo–. Dudo que el decano nos permita pasar una noche más aquí.
—Lo entenderá –respondió Alex con un ademán, restándole importancia–. Además, acabamos de dar con las coordenadas, tendremos que hacer todo el proceso de nuevo si esperamos hasta mañana.
—Mañana es sábado, Al –resaltó Rian, viendo el cambio de expresión en el rostro de su amigo. Alex había pasado tanto tiempo en aquella oficina las últimas semanas que casi había perdido la noción del tiempo–. La encontramos una vez, podemos volver a hacerlo mil veces. Date un descanso, ¿sí? Hemos hecho más que suficiente.
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i don't do fake love (but i'll take some from you) | jalex au
Fanfiction"-Un mes -dijo en un tono reservado, casi queriendo que ni siquiera su receptor escuchara la alocada idea-. Solo un mes para fingir que esto es real y quitar a nuestros amigos de encima. Ganas tú, gano yo. El castaño lo miró escéptico, expectante a...