Corpse bride |SeokTae|

04

Taehyung ingresó a la biblioteca siendo seguido por Hoseok, quien no podía ocultar su nerviosismo.

—¿Anciano Min Yoongi?

El castaño miró a su alrededor; la biblioteca parecía sacada de una típica película de horror, era un lugar perfecto para provocar que sufras un paro cardíaco por el susto.
Las paredes y muebles del lugar estaban desgastados. Los libros lucían muy viejos y estaban desparramados por toda la biblioteca. Además, había una enorme cantidad de cuervos horribles volando sobre ellos.

—¿Señor Min?—volvió a llamar el cadáver, pero no obtuvo respuesta—. ¿En dónde podrá estar?

En ese instante el castaño vió una sombra en la pared y escuchó un ruido horrible. Inmediatamente se escondió, asustado, detrás de Taehyung.

—Señor Min, allí está.

Hoseok alzó la vista y pudo ver que en la parte superior de la biblioteca, había una especie de escritorio. Detrás de este se encontraba un chico de piel blanquecina y de cabello color azul oscuro.

—¿En dónde más podría estar, niño?

—Me alegra verlo. Le presento a mi esposo—Taehyung miró al chico que estaba a su espalda y este se posó al lado del chico de cabello grisáceo—. Jung Hoseok.

—¿Tu esposo?

—Es un placer conocerlo, señor Min.

—Anciano Min—habló Taehyung—, necesitamos ir a la tierra de los vivos.

—¿A la tierra de los vivos?—preguntó Yoongi y comenzó a bajar las escaleras para poder acercarse a los menores—. ¿Y para qué quieren ir allá?

—Necesitamos hacer algo, es importante.

—Mmh, no lo sé, ya conoces las reglas, no podemos ir al mundo de los vivos—dijo Yoongi—. Además, ¿para qué querrían ir a la tierra de los vivos? Ellos se mueren por venir aquí.

—Por favor, anciano Min. Es muy importante para mí...—Hoseok se dió cuenta de su error y se golpeó mentalmente—. Es muy importante para nosotros—se corrigió.

—Por favor—Taehyung se acercó a Yoongi—, usted es el único que puede ayudarnos.

—Veré qué puedo hacer. Ahora vuelvo—rascó su cabeza confundido—. ¿En dónde habré dejado ese libro?—susurró para sí mismo.

El anciano Yoongi se alejó de Hoseok y Taehyung, se perdió por la biblioteca en busca de un libro que el castaño desconocía por completo.

Yoongi era un chico que no aparentaba más de treinta años. Tenía la piel demasiado blanquecina; el cabello corto, lacio y de color azul oscuro. No era muy alto y era delgado. Tenía varias marcas y heridas en su rostro y en lo poco de piel que Hoseok pudo ver de su cuerpo, ya que estaba vestido con un buzo negro largo, un jean blanco manchado y unas zapatillas blancas.

—No luce como un anciano—le dijo Hoseok a Taehyung, quien sonrió—. ¿Por qué le dices anciano?

—Todo el pueblo le dice así. La verdad es que tiene apariencia de un chico joven, pero en realidad ya debe tener unos ¿setenta años?—se preguntó—. No estoy seguro, pero perdió la vida a los veinticuatro y ya han pasado muchísimas décadas de eso. Por eso, le decimos con cariño anciano Min, aunque no luzca como un anciano—Hoseok comprendió y asintió—. Y entre nosotros, siempre fue muy gruñón como un anciano—le susurró lo último con diversión.

Hoseok soltó una pequeña risa tras escuchar lo último que dijo el cadáver. En ese momento, Yoongi volvió a aparecer frente a ellos, pero ahora con un libro en su mano derecha.