Anhelo - Meanie / Soonhao

16.

Se removió entre las sábanas estirandose bajo estas, abrió levemente los ojos tratando de acostumbrarse a la luz del sol que entraba porque las cortinas ya estaban abiertas y la ventana igual, volteo al lado izquierdo de la cama y no vio más que un espacio vacío, Mingyu ya se había levantado, ¿que hora era?, se preguntó tomando el reloj de la mesita de noche, diez y cuarto, no era tan tarde en realidad

Revolvió sus cabellos y se acomodó en la cama oyendo como caía el agua de la ducha, normalmente no estaría tan relajado pero días antes había terminado todo los tratos con la editorial para que en unos meses su libro saliera a la venta y se sentía tan bien, tan liberado que ahora podía dormir tranquilo y como nunca

Mingyu salió de la ducha secando su cabello castaño con la toalla y pasando por la habitación hasta el ropero sacando algo de ropa

- ¿Vas a algún lado? - su voz lo hizo voltear parecía bastante absorto en sus pensamientos

- Sí, bueno tengo un par de cosas que tengo que arreglar lo antes posible - soltó con una expresión angustiante que le dio una idea a Wonwoo de lo que este tenía que hacer

- Iras con tu padre, ¿verdad? - eso sonaba más a una afirmación más que a pregunta, Mingyu se sentó en la cama desganado, no podía aplasar más ese pendiente con su padre

- En cualquier momento sabrá que me asocie con el padre de Mirra, es mejor que lo enfrente de una vez

- No pareces muy convencido - Wonwoo se acercó a él pasando sus manos suavemente por sus hombros tratando de tranquilizarlo

- Sí, lo conozco y se como reaccionará

- Tranquilo, todo estará bien, porque iré contigo - Wonwoo le dio un pequeño beso actuado coqueto pero parecía tan seguro de si mismo que Mingyu no podía decirle que no

Ni bien entraron por la puerta del banco con Wonwoo del brazo los empleados los observaron fijamente, él sabía que nada se escapaba de ellos, sabían todo lo que pasaba detrás de las paredes de la oficina de su padre, eso siempre le avergonzó pero admitirlo era mucho peor

La secretaría le informó a su padre de su llegada y ambos pasaron con la mirada intrigante del hombre sobre ellos

- Wonwoo, que bueno verte, es la primera vez que mi hijo te trae por aquí, siéntate, siéntate - le ofreció un asiento frente a su escritorio - ¿cómo has estado?

- Bien, muchas gracias - se sentó contestando con decoro mientras Mingyu se sentaba a su lado

- ¿A qué debo esta visita? - la mirada que cayo sobre Mingyu le decía que este esperaba una explicación ya que normalmente no hablaban más que de trabajo

- De hecho, hay muchas cosas de las cuales debo hablar contigo - Mingyu esperaba tener una conversación justa con su padre aunque lo dudaba, este le cedió la palabra - primero, sobre lo de la cuenta...

- No tenemos que hablar de eso ahora - interrumpió sabiendo bien que no le convenía

- No, lo hablaremos ahora - respondió decidido - Wonwoo sabe lo que me pediste hacer - el hombre miro al azabache quien le regreso la mirada perspicaz cruzando los brazos con suficiencia - pero tranquilo, obtuve la cuenta y más que eso - soltó sorprendiendo al hombre

- ¿Qué quieres decir?

- Hable con el señor Park y llegamos a un acuerdo, ahora soy su socio y accionista - la sonrisa de su padre no se dio a esperar

- ¡Bien hecho!, ahora podemos...

- Puedo - volvió a interrumpir - desde ahora trabajaré para los Park y oficialmente doy mi carta de renuncia - la carta se deslizó sobre el escritorio, su padre la miró impasible y luego dejó salir una carcajada