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Las chicas se habían puesto de acuerdo para ir de compras ya que, según ellas, no tenían la ropa adecuada para su tan esperado viaje de vacaciones.
Asi que temprano, luego de haber tomado el almuerzo, Natasha, Wanda, María, Yelena, Laura, Pepper y Lila salieron divididas en dos autos. Los ánimos eran espectaculares, a todas les gustaba pasar tiempo juntas y hacer compras.

Por su parte, los hombres en la base estaban quejándose de los deberes que debían realizar. Si bien habían implorado ir con ellas, estas se habían negado y una larga lista de tareas les fue asignada por las mujeres, según ellas, para mantener el órden en casa antes de las vacaciones.

—Me niego a lavar los baños yo —Sam lanzó el trapo con el que estaba limpiando y se quitó el delantal blanco que llevaba puesto.

—Vamos Sam ya casi terminamos los deberes —Bucky, con el cabello atado en una pequeña coleta, lo miró desde el suelo mientras lo limpiaba con un cepillo.

—¡Parece que nos castigaron por algo! —este fue Clint quejándose trepado en una escalera, limpiando las ventanas.

—Menos charla y más acción caballeros —Steve pidió sin mirarlos mientras limpiaba la mesa.

—Minis chirli...—Pietro imitó con irritación. —Claro, como tú no tuviste que aspirar todas las habitaciones.

—¿De qué te quejas? Usaste tu velocidad para terminar todo —Bruce reclamó.

—Aún asi me cansé —el sokoviano cruzó sus brazos.

Un chorro de jabón le cayó de pronto, mojandole parte del rostro y de los brazos, descubiertos debido a la camiseta sin mangas que estaba vistiendo. Alzó la vista molesto con quien quiera que le hubiese tirado el jabón.
Clint le estaba haciendo señas raras que el platinado no comprendía, así que sólo hizo una mueca de confusión total. El arquero resopló molesto y discretamente le mostró un billete. Estaba tratando de pagarle para que limpiara las ventanas por él con su velocidad.

—Valgo más —dijo Pietro mirando sus uñas en modo diva. Clint se quejó y sacó otro billete, sin embargo, Pietro le ignoró.

—¡Mocoso! —Clint llamó su atención tirándole jabón de nuevo.

—¿Qué quieres? —respondió aún sin mirar. Si, estaba en modo diva empoderada. —No me vas a comprar Clint, trabaja. Yo me desgasté haciendo mis deberes.

—Con que queriendo comprar al mocoso veloz ¿eh? —Stark observó cruzado de brazos a unos metros de ellos. —Clint, no querrás que Laura se entere de esto ¿o si? Según recuerdo ella detesta la corrupción.

—Tony cállate, tú no has movido un sólo músculo para ayudar —Thor ayudaba a Bucky con el piso.

—Eso es cierto, deberías estar limpiando el garage —Steve lo miró con ambas manos en las caderas.

—No querrás que Pepper se entere de esto ¿o si? —el arquero le imitó.

—Yo ya terminé —Tony sonrió con orgullo. —O eso creo...

Pietro salió corriendo y volvió a los segundos. Había ido a revisar que en efecto Tony hubiese limpiado lo que le tocaba, aunque no esperaba ver una de sus armaduras con un delantal rosa, limpiando lo que le correspondía a Tony .

—Eres un tramposo y cínico —Maximoff rio negando.

—Te aclimatas o te aclimueres —respondió Stark andando hasta la cocina.

Un pequeño alboroto se escuchó por el pasillo, seguido de unos pasos corriendo y risas. Los hijos de Clint y la pequeña Morgan pasaron corriendo por ahí, ensuciando el piso que Bucky con esfuerzo había estado limpiando, aunque eso no fue lo más grave. Morgan resbaló con el piso mojado y calló de frente, nisiquiera Pietro con su velocidad fue capaz de evitar su caída, es que nadie lo había visto venir.

To The Sea. AvengersDonde viven las historias. Descúbrelo ahora