Conociéndote //El Origen De Los guardianes// -- One-Shots -- (Jack Frost)

Enfermo (Parte ultima)

Cargo de responsabilidad: creo que ya saben la respuesta

Resumen del capitulo: Siguiente plan... los elfos

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Después de su fallido intento de escape, Conejo "sugirió" que Jack se durmiera un rato. Al parecer, le preocupaba que a Jack le subiera la fiebre si seguía moviéndose. Jack se había negado al principio, pero con la mirada que Conejo le dio, no quería arriesgarse a descubrir como haría que se quedara en cama si no le hacia caso.

Probablemente habían pasados unas buenas horas hasta que Jack se despertó con el sonido de pies diminutos y el tintineo de campanas. Miro hacia el suelo y vio a Dingle mirándolo desde abajo.

-Ey Dingle, ¿Viniste a visitarme? -Jack bajo una mano y ayudo a Dingle a subir a la cama. -¿Te envió Norte por que lo estabas molestando?

Dingle asintió y se rio - ¡Norte! ¡Norte! ¡Molesto Molestando!

Jack sonrió. Los elfos no tenían un vocabulario extenso, por lo general, dejan que sus gestos y campanas hablen por ellos. Últimamente, Jack había estado tratando de enseñarles nuevas palabras. Nada importante, solo palabras tontas y sin sentido y los elfos las devoraban como si fuera chocolate.

Es muy divertido escucharlos de repente gritar al azar "¡Rómpete una pierna!" o "¡La vaca muuu!". Sin embargo, de la nada, Phil no estaría de acuerdo. No le gustaba que Jack les enseñara palabras a los elfos, no es que Jack lo culpara. Los elfos repetían la palabra una y otra vez durante un buen par de días. Por lo general, los yetis los ignoraban, pero podían ponerlos de los nervios fácilmente si Jack no tenia cuidado.

Hizo una pausa ante ese pensamiento. Miro a Dingle y una sonrisa traviesa se dibujo en su rostro.

-Oye Dingle, ¿Quieres escuchar algo que REALMENTE hará que los yetis se enfaden?

-Ohhhh - Respondió Dingle intrigado y asintió vigorosamente

Jack sonrió y susurro las palabras al oído de Dingle. El elfo chillo y se rio incontrolablemente

-Son unas palabras divertidas, no? -Dijo Jack mientras tosía - Entonces ¿Por que no vas y enseñas a los otros elfos? Apuesto a que ellos también les encantaría aprenderlas

Dingle se escabullo de la cama y salió de la habitación mas rápido que un rayo

Jack sonrió. Sabia que las palabras se esparcirían como pólvora. Iba a ser la distracción perfecta. Jack apoyo los brazos detrás de la cabeza y espero. Como predijo, las voces agudas de los elfos comenzaran a resonar en todo el taller.

-¡CACA! ¡MIERDA! ¡CACA! ¡POPO!

Jack se echo a reír. Oh rayos, ¿Por que no había pensado esto antes? Los gritos de alegria de los elfos pronto se vieron abrumados por los gritos de sorpresa de los yetis mientras intentaban controlar a los elfos. Estaba seguro de haber escuchado a Conejo y a Norte gritar también.

-¡Norte! ¿¡Desde cuando aprendieron a decir eso!?

-¡No lo sé! ¡Rápido! ¡Agárralos por ahora!

Era hora. Los yetis y los demás iban a estar demasiados ocupados para que se dieran cuenta que Jack había escapado. Pero tenia que moveré ahora.

Jack salto de su cama y salió volando de la habitación. Su cuerpo se tambaleo mientras volaba, pero Jack lucho contra la ola de mareo y siguió recto. Mientras estuviera en el aire, no activaría la trampa de alambre que Norte había instalado. Giro bruscamente en la esquina y casi choco con la pared. La puerta que daba al exterior estaba a la vista.