Nosotras contra el Mundo

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Betty, después de todo lo ocurrido no salía de su casa ni de su habitación, solo comía cuando Cheryl iba a visitarla. Verónica y Katy también iban algunos días, a Verónica le dolía demasiado verla así.

Cheryl: Vamos, te toca ecografía

Betty: Voy, déjame vestirme y bajo en un segundo

Unos minutos después Betty bajó vva y se fueron al hospital.

Médico: Hola Betty, ¿cómo estás?

Betty: Bien, supongo

Médico: Levántate la camisa un poco, ahora vuelvo, nos quedamos sin gel

El médico llegó, examinó al bebé y por suerte el bebé estaba bien.

Médico: Te vamos a hacer un análisis, mañana te darán los resultados

Betty: Vale, gracias

Médico: Hasta mañana

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Cheryl: Ven, vamos de compras

Betty: No tengo ganas Cheryl -dijo metiendose en la cama-

Cheryl: Dentro de dos o tres horas vuelvo, ahora vendrá Verónica un rato

Sonó el timbre y Verónica entró. Cheryl se fue con Toni al centro comercial.

Verónica: Hola

Betty: Hola

Verónica: Coge tus cosas que nos vamos

Betty: Quiero descansar

Verónica: Betty, un perezoso al lado tuyo es flash, vamos

Betty: Voy

Betty se puso de nuevo el chándal. Las dos se montaron en el coche. Después de un corto trayecto, Verónica aparcó cerca de un parque.

Verónica: Me dijiste que este sitio te relajaba -dijo y Betty asintió con una sonrisa triste- Betty, me duele verte así, se que lo estás pasando mal, y tampoco te voy a pedir que así de la nada lo superes, pero tampoco quiero que estes todo el día en tu cuarto sin apenas comer y llorando

Betty: No es fácil Verónica. Imagínate que una persona que no conocías de nada y que te encontraste de casualidad se convierta en la razón de tu sonrisa, la razón por la que te levantes todas las mañanas y con la que quieras pasar el resto de tu vida. La persona a la que amas y estás a su lado sin esperar nada a cambio. Imagínate que un día esa persona desaparece de tu vida y que ya no la vas a volver a ver

Verónica estuvo todo el rato pensando en una persona. Como dijo la rubia, la persona en la que se convierta en tu sonrisa y la razón por la que te levantes todas las mañanas. Esa persona para Verónica era Betty.

Las chicas no hablaron más. Un rato después volvieron al departamento de Betty.

Betty: Gracias, en realidad me alegro de que me hayas sacado un rato de mi habitación. Intentaré salir un poco más

Verónica: Hasta luego Cooper

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