capítulo 7

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Comencé a meter la ropa del armario en la maleta. Mañana me iré y tendré que intentar seguir con mi vida sin saber cuando le volveré a ver. Bueno, no me quiero poner en plan telenovela dramática pero estar separado por miles de kilómetros es duro.

Estos últimos días se me había olvidado todo, solo habíamos estado el y yo juntos, disfrutando de cada pequeño momento al máximo, como si fuera el último.

Hyunji no existía, ni ninguna de las chicas con las que había estado, sólo el y yo.

Noté que había alguien detrás de mí y al girar me vi a Hyuk mirando la maleta.

—Ojalá no te tuvieras que marchar. — Se acercó más

— Lo sé, pero mis padres empezarán a pensar que he sido secuestrado y no es la idea— Le di un pequeño beso — En un principio el vuelo salía hoy pero encontré uno para mañana.

— Espero es que les cuentes lo nuestro a tus padres —

— Por supuesto que si —

— Además, no quiero sonar egocéntrico pero, a tu madre le caigo genial. — Siguió fanfarrón.

— Porque no te conoce de verdad — Bromee y su sonrisa se esfumó y dio paso a un ceño fruncido - Es broma, pero no me hace mucha gracia que mi último día aquí lo pases tomando "café" con ella. —

Se cruzó de brazos y puso los ojos en blanco, como si estuviera armandose de paciencia (Paciencia la mía con Hyunji)

— Creí que este tema ya estaba enterrado, estos días hemos estado perfectamente sin hablar de ello. —

— Vale, vale, tienes razón, no más celos lo entiendo, como me encantaría que en algún momento sintieras lo mismo. —

— Lo sentí con Siwon, Kibum, Kyuhyun e incluso ese camarero, se lo que son los celos—

— Te voy a echar muchísimo de menos —

— Y yo a ti pequeño, pero por supuesto seguiremos en contacto y en unos meses nos volveremos a ver—

Meses que espero no pasarme desesperado o volviéndome loco rallandome la cabeza.

El móvil comenzó a sonar y Hyuk leyó el mensaje

— Es Hyunji ya esta abajo — Vió mi cara de "alegría" y se le escapó una pequeña sonrisa — Oh vamos, solo va a ser una hora. Después seré todo tuyo, ¿Vale?

— Vale — acepte a regañadientes —pero asegúrate de establecer un perímetro.

— Es una merienda, no la escena de un crimen — Rió. Me encanta verle sonreír (Si lo estoy diciendo en plan loco pero es la realidad) cuando sonríe sus encías se hacen presentes y me resulta demasiado adorable, más que esos cachorros de los anuncios del papel higiénico.

— Lo será si se acerca mucho a ti. —

— Vale, vale Jack el destripador. Ahora voy a bajar, puedes estar con unos prismáticos en plan acosador detrás de las escaleras si quieres. —

— ¿Sabes que? no me voy a acercar ni un poco, voy a confiar en ti a un cien por ciento, nada de fisgar —

Me dio un beso en la sien y se fue.

Al instante como una llamada divina sonó en mi portátil el tono del skype y al aceptar, vi las cara de Heechul, Ryeowook y Sungmin.

— ¡Chicos! ¡No saben cómo los hecho de menos! —

— ¡Hae! ¡Cuéntanos todo! ¡Queremos detalles! — Empezó Ryeowook

— ¿Se acuerdan de Hyunji? —

Ese Virgen Fue Mío Donde viven las historias. Descúbrelo ahora