capítulo 8

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Shock, eso fue, un maldito puñetazo directo al corazón. No sabía que hacer o decir y era como si me hubiera colapsado.

Sentía dos partes de mi burbujeando; la que quería avalanzarse sobre ella como en la escena de "La maldita lisiada" en la telenovela María La del Barrio. La otra parte de mi sentía que se iba a derrumbar al instante y esas dos opciones comenzaron una lucha interna hasta que ganó la segunda parte.

Hyuk se separó al instante — ¡¿Pero a ti que te pasa?! — Y al girarse me vio — Hae escuchame yo no he sido ella...

Pero yo me había ido, cerré la puerta y comencé a llorar.

— ¡¿Hae que ha pasado?! — Dijeron mis amigos al instante pero yo colgué la llamada.

Lo que tanto había temido estas semanas se acababa de materializar delante de mis ojos.

— Donghae tienes que escucharme — Hyukjae entró a la habitación — Esto no es mi culpa yo no sabia que ella...

—¡¿Qué no lo sabias?!, ¡Te lo he dicho mil veces y no me has querido hacer caso! —

Cogí mi maleta y me dispuse a salir.

— No, no lo hagas, por favor Donghae —

— Hyukjae, esto no funciona ¿es que no lo ves? —

— Si funciona Donghae, tienes que ignorar tus celos —

— ¡¿Mis celos?! ¡Es muy fácil desde tu posición, tu eres el que se queda aquí con ellas, yo soy el que se va a miles de kilómetros a esperar que le pongas los cuernos!, ¡No pienso pasarme los años años de universidad esperando tus llamadas o mensajes o mordiendome las uñas pensando en que estás con otras! —

— ¡De eso se trata una relación Donghae, de confianza! ¡A lo mejor el problema es que no estás preparado para tener una! —

Fue una a puñalada directa. Apreté los puños e intenté controlar las lágrimas que habían vuelto a inundar mi visión.

— Donghae yo...Lo siento no quería decir... —

— ¿Sabes que Hyukjae? El que no está preparado para una relación eres tú, te crees que puedes hacer lo que quieras sin que tenga consecuencias, eres un inmaduro y encima te hacer el sorprendido. ¿Quedar con tus conquistas delante de tu novio? ¿De verdad piensas que yo voy a asentir y quedarme sentado en el sofá sin hacer nada? —

— Donghae, por favor no lo hagas, no acabes con esto —

— Tu eres el que lo ha cambiado, no yo —

Se quedo quieto intentando decir algo pero no le salían las palabras, no me sorprende yo mismo me estoy dejando llevar por mi primer impulso, pero se que estoy haciendo lo correcto.

Cogí la maleta y bajé. Necesitaba salir ya de allí y volver a casa, aunque tuviera que adelantar el vuelo.

Al salir llamé a un taxi y esperé que Hyukjae no bajara, porque si me miraba me arrepentiría de mi decisión y en ese momento no necesitaba más dudas.

Pero lo hizo y en cuando lo noté detrás de mí, mi corazón volvió a latir frenético como el Hae de hace un año cuando le veía por los pasillos.

— ¿Ya está? ¿Me estás dejando? ¿Estas abandonando todo lo que hemos tenido? —

— Hyukjae, por favor no me hagas esto más difícil —No quería mirarlo, no podía — Te quiero más de lo que piensas pero esto no funciona y tu lo sabes. No quiero volver a casa con este miedo, lo siento. —

Me cogió suavemente el brazo — Estos meses hemos estado bien, por favor, no me hagas esto...Te quiero —

Algo dentro de mi se reblandecio y tuve un fuerte impulso de abrazarlo y besarle, pero me conozco, se como sería con esto, me veo a mi, no estando atento en clases pensando en sí alguna chica estará con él, con el temor de que en alguna ocasión, saliendo de una fiesta o en la universidad olvide que tiene novio al cruzarse con cualquiera de sus anteriores amantes.

— Hyukjae esto es probablemente la cosa más dolorosa que he hecho en mi vida y al renunciar a ti, renuncio a una parte de mí. Pero no puedo con lo que conlleva esta relación. — El taxi se paró enfrente de mi y metí la maleta en el maletero intentando saguir sin mirarlo.

Pero en ese momento, me cogió obligándome a mirarle y me besó.

Fue un adiós, un beso cargado de ansias y desesperación, como si ambos quisiéramos disfrutarlo al máximo sabiendo que era el último.

Se separó un poco y vi como tenía tenía las mejillas mojadas, no sabía si de sus lágrimas o de las mías — Porfavor te lo suplico, no lo hagas...

Intente controlar el llanto de mala manera y el me abrazo — Te quiero Hyukjae y ojalás podamos volver a chocarnos de nuevo en otras circunstancias —

— ¡Señor es para hoy! ¡O se va ya, o me marcho! —

Asentí, me separé, le di un beso en la mejilla y le limpie delicadamente la lagrima que rodó por su cara.

Me di la vuelta y me fui a meter en el taxi pero antes oí la voz de Hyunji.

— Te lo dije, no fue buena idea traerlo y antes de que se fuera ya habrían roto. —

Cerré la puerta de golpe y ahí no pude retener el llanto.

— ¿A dónde, señor? —

— Aeropuerto — Fue lo único que pude decir con la voz quebrada.  Le iba a echar tanto de menos que dolía físicamente, las lágrimas no paraban de salir y tenía la sensación de que algo me oprimía el pecho.

El coche arrancó y yo eché un último vistazo desde el cristal de atrás a Hyukjae que permanecía inmóvil hasta que se transformó en un punto de la distancia.









¡Hey! A pasado un tiempo...¿estan bien? espero que si, bueno...claramente este no es el final de esta historia, así que no se asusten.

En fin, pregunta del día de hoy:

¿Les gusta el Mpreg?

nos vemos pronto૮₍˶ᵔ ᵕ ᵔ˶₎ა 

Ese Virgen Fue Mío Donde viven las historias. Descúbrelo ahora