Capitulo 8.

337 36 14
                                    

Si utilizas al enemigo para derrotar al enemigo, serás poderoso en cualquier lugar a donde vayas.

༻ ༒ ༺

Una vez llegamos a la oficina de su madre, el señor Slim ni se molesta en tocar la puerta entra arrastrándome con él como si nada.

—¡¿Qué demonios sucedió?!—Meredith nos recibe a gritos, acercándose a su hijo—, Cariño ¿estás bien?

La señora Michelle no deja de revisarle el rostro a su hijo, él se queja apartando la cara pero sin alejarla del todo. El señor Slim inspecciona a su hijo con los ojos, desde su lugar cerca del ventanal.

Jeremy ayuda al señor Jack Lawson's a sentarse ya que sigue un poco conmocionado con el atentado.

—Creo que deberíamos llamar a emergencias.

Asiento con la cabeza y saco el celular de mi bolsillo.

—¿Están todos bien? ¿Qué les sucedió?

—Atacaron el restaurante—Arthur finalmente se escapa del escrutinio de su madre, se sienta en el sofá cerca de Lawson's.

—¿Pudieron identificarlos?—pregunta Tomas, entrelazando las manos.

Niego con la cabeza, bajando el celular—Tal vez podamos pedir una orden para ver las cámaras de seguridad del establecimiento, de otra forma contactar con algún dibujante forense y darle una descripción del sujeto...

—¿Alguien me puede explicar qué está pasando?

La familia comparte una mirada, Arthur se levanta del sofá ignorando al magnate.

Tomas se acerca al hombre, haciéndonos una señal para que esperemos afuera.

Asiento con la cabeza y junto a los muchachos abandonamos la oficina, nos reunimos en el pasillo. Jeremy y Byron saludan a la recepcionista de la señora Michelle y yo me siento en una silla metálica, sacando mi celular nuevamente para llamar a la academia.

—¿Qué sucede?—pregunta cuando se acerca a mí y me ve deshacerme del blazer con sangre húmeda sobre las sillas.

Señalo mi espalda con el pulgar—Me dio con un plato en la espalda.

Él hace una mueca, colocando su mano en mi muslo.

—¿Duele mucho?

—Solo un poco.

Sus ojos intentan analizar el nivel de la mentira, mientras yo marco el número de la academia. Es imposible, soy una piedra que con suerte logra expresar sorpresa cuando realmente lo siente.

Lo cual tampoco es seguido.

—Slim tenía razón, fue muy arriesgado lo que hiciste.

Bajo el celular sin tener respuesta—Es mi trabajo.

—Aún así, no valía la pena arriesgarse así.

—No empieces con eso ahora.

—Es solo un trabajo y a menos que tengas algún motivo para hacerte matar, no lo necesitas. No lo necesitamos.

—¿Qué mierda significa eso?—me giro hacia él, mi rostro fruncido por la molestia.

—¿Por qué haces esto, Gisela?

Byron se acerca, intentando calmar la situación—Oye, Jere...

—No sé a qué viene todo esto, pero voy a pedirte que mantengas la boca cerrada si no planeas decir algo inteligente.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Oct 23 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Tentaciones Peligrosas  (NUEVA EDICIÓN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora