𝐒𝐎𝐋𝐎 𝐂Á𝐋𝐋𝐀𝐓𝐄 𝐃𝐄 𝐔𝐍𝐀 𝐕𝐄𝐙 / EN HIATUS HASTA NUEVO AVISO

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Era un sábado por la tarde, y Anais Glam estaba en su cuarto haciendo sus deberes cuando alguien toca la puerta de su habitación

-Pase- dijo Anais sin despegar la vista de su libro

-Anais, ya debes de dormir. Mañana será un día sumamente importante, necesito llegar a esa entrevista lo más temprano posible, además vendrás conmigo y necesito que te levantes temprano, tu hermana no está en Londres para que ella venga a despertarte- dijo su padre Héctor Glam, un hombre canoso y alto entrando a su habitación con un semblante serio, ellos no se llevaban del todo bien o mejor dicho para nada bien y tampoco se hablaban mucho, pero siempre que lo hacían, todo la conversación era aburrida

-Claro padre- dijo Anais cerrando su libro en la página que quedó, luego de que su padre saliera guardó todo en su mochila para el próximo día.
Fue a tomar un baño e hizo la rutina de todas las noches, luego, se cambió a su pijama que consistía en un pantalón de cuadrados rojo y una camiseta blanca que hacía remarcar sus curvas. Se metió bajo las suaves sabanas de su madre y miró su mesita de noche y vio el retrato de su madre.
-Mamá, no sabes lo mucho que te extraño, por favor vuele, papá aunque no lo demuestre, se que está mal pero por favor mamá, si me escuchas vuelve, que todo sea como antes por favor...- dijo Anais y su vista de empezó a nublar por las lágrimas, agarró la foto de su madre echa un mar de lágrimas, llorando por la pérdida de su madre que nunca pudo superar, y le dio un beso a la foto. Y luego de mucho llorar logro conciliar el sueño y se durmió pensando en su madre.

Anais Glam era una estudiante común y callada, era la más inteligente de su curso. Era de estatura media para su edad, era de tez blanca y su pelo era de color pelirrojo, tenía los ojos azules y pecas por todo su rostro. Ella era muy linda, pero como era la callada nadie le tomaba atención. A los 11 años de edad, su madre Fleur Loutis murió en un accidente de auto. Anais se había roto un brazo en la escuela y llamaron a su madre para que la llevara al médico y en medio del trayecto su madre murió. Anais estaba devastada al saber de la noticia, y no hablar de su padre, que su mundo calló abajo al escuchar semejante noticia como esa, el estaba tan furioso con su hija ya que en cierto punto, para el, ella tenía la culpa de lo qué pasó, ya que si ella no hubiera estado jugando a las luchitas su madre seguiría viva.

Aunque todas esas cosas hayan pasado, ella tenía una hermana llamada Olivia Glam, 5 años mayor que ella, ella estaba en Australia desde que su madre falleció. En cierto punto, Olivia y Anais eran bastante unidas hasta qué pasó el accidente, su hermana ya no se comunicaba con nadie ya que había formado una familia ella desde cero olvidándose de su familia, Anais supo por medio de una carta, porque si, cuando ella se entero que ella ya no iba a regresar, a ella y a su hermana no les gustaba hablar por chat de texto así que lo hacían por cartas y cuando recibió la carta ella se puso a llorar, desde la muerte de su madre que estaba sensible por cualquier cosa.

Ella sabia que tenía a alguien con quien desahogarse, y esa persona era la única amiga que tenía , Ema Huston. Ella era todo para ella, siempre la acompañaba a todas partes, en la escuela iban juntas a todos lados y nunca se separaban, Ema Huston era una chica de pelo largo y castaño con flequillo, tez clara y ojos marrones, ella tenía la misma edad que Anais y la misma altura, solo que ella era un poco más alta. Ellas se conocieron el primer día de clases, mientras que Ema saludaba a todo el mundo, Anais se quedaba en un lugar fijo y callada sin querer hablar con nadie cuando Ema de acercó.

Flashback

-Hola soy Ema, Ema Huston mucho gusto- dijo la pequeña Ema de tan solo 6 años dándole la mano a la pequeña y tímida Anais.

-Ho-hola soy An-Anais Glam- dice la anterior nombrada, tartamudeando y tímidamente le dio la mano a Ema.

-Oh vaya que lindo nombre, eres nueva verdad?- dijo Ema sentándose al lado de Anais