Harry y Ginny: Hasta el Final

Epilogo 2:

La pareja Harry y Ginny caminaban apresurados por los pasillos del colegio, los dos adultos habian sido citados por la directora Mcgonagall por una situación delicada con su hijo Albus, lo cual fue sumamente extraño para ambos ya que él nunca les daba problemas, no se lograban explicar el porqué de ese llamado.

Cuando llegaron a la gárgola que daba a la oficina a Harry le sudaron las manos del nerviosismo, tenía miedo de que algo malo quisiera atacar a sus hijos, pues el había hecho todo el esfuerzo del mundo para que no tuvieran que preocuparse y vivieran sus vidas como niños y adolescentes normales, pero este llamado había roto la burbuja de tranquilidad del azabache.

Ginny tomo su mano y logro tranquilizarlo como siempre, eso era una de las muchas cosas que no habian cambiado entre ellos, seguían siendo aquellos adolescentes melosos.

Por primera vez en el viaje Harry sonrío y tomo su valentía desde donde no la tenía, Ginny era su el motor con en el que el funcionaba todos los días.

Subieron y entraron sin tocar en la oficina asustando a la profesora y ambos adolescentes, los adultos estaban angustiados y ni siquiera notaron su acto descortés, se dieron cuenta de todo cuando el cuadro de Snape carraspeo mirándolos mal.

--Discúlpennos por favor-- pidió Harry amablemente y Mcgonagall sonrío al ver a la pareja de nuevo y más unida que nunca

--No importa-- respondió la directora y ambos sonrieron

--Un gusto verlos de nuevo Harry y Ginny-- hablo el cuadro de Dumbledore y la pareja le sonrío cariñosamente

--¿Para qué nos citó profesora?-- pregunto Ginny un poco nerviosa

--Pues verán... aquí pasó algo sumamente curioso y extraño... estos jóvenes...-- dijo Mcgonagall y señalo a los dos adolescentes frente a ella

La pareja por primera vez reparo en que su hijo estaba allí acompañado de una chica, la conocían muy bien, si no recordaban mal se llamaba Perla, sabían que era del mismo curso de Albus y que estaba en Gryffindor pero no sabían mas nada de ella.

--¿Qué pasa con ellos?-- pregunto esta vez Harry sacándole la pregunta de la boca a Ginny

--Tranquilo Harry muchacho-- dijo Dumbledore --Tu hijo está repitiendo su misma historia-- la pareja se miró entre si confundidos

--No entendemos-- dijeron al unísono sacándolo una sonrisa divertida a los tres profesores

--Ella es Perla Graner... estudia en el mismo curso que su hijo y está en Gryffindor-- explico Mcgonagall

--Si eso lo sabemos-- dijo Ginny y la pequeña les miro con una sonrisa tímida

--Ella y su hijo... tienen una Union de Almas--

Ellos por un momento creyeron que los profesores les estaban jugando una broma no muy graciosa pero al ver lo serio de sus rostros repararon en que estaban siendo sinceros.

--¡¿QUE?!-- preguntaron ambos de nuevo al unísono confundidos y sorprendidos

--Lo que escucharon-- respondió Snape divertido

--Ellos hace muy poco crearon un vínculo al igual que el suyo-- explico Mcgonagall y ellos abrieron la boca sorprendidos

--¡¿Cuándo planeaban decirme que tenían una Union de Almas?!-- pregunto Albus cruzándose de brazos pidiendo una explicación y sus padres volvieron a intercambiar miradas

--Pensé que les habian contado a sus hijos sobre su vínculo-- hablo Mcgonagall en su típico tono reprobatorio

--Pues...-- tartamudeó Harry sin saber que hacer

--Tiene mucho que explicarle al niño-- siguió diciendo Mcgonagall y ambos asintieron por unos momentos sintiéndose como adolescentes que habian cometido un delito

--¡¿Y bien?!-- pregunto Albus un poco enojado

Harry suspiro y empezó su relato, esta vez le conto todo con lujo de detalle, pues resulta que ellos sabían de sus aventuras, mas no de su vínculo pues ellos habian creído que no era necesario hablar de eso.

No sabían como era posible que su hijo estuviera viviendo también una Union de Almas, pero lo que si sabían es que estarían junto a él y Perla acompañándolos y ayudándolos en lo que podían, un grandioso destino los esperaba en el futuro, y al igual que sus padres iban a dejar su huella en el mundo mágico.