solicitud: vi que dijiste que no tenías solicitudes de Theo, así que puedo solicitar una en la que estés en clase con Theo (novio) y comiences a tener los síntomas de la quimera, puedes elegir cuáles. Y te quedas sin clase. Theo te sigue y te pregunta qué pasa. Te estresas y él se preocupa por la quimera, pero te consuela diciendo que te protegerá de ellos. Entonces te besas. ¡Gracias y solo quería decir que su escritura es absolutamente increíble!
N / A- ¡Muchas gracias cariño! ¡Espero que te guste!
"¿Nada aún?" una voz te preguntó, causando que casi saltas fuera de tu propia piel.
Suspiraste, cerraste los ojos y le lanzaste a Kira una mirada penetrante. "¿Seriamente? ¿Quieres acercarte sigilosamente a la gente con todo lo que está pasando? "
"Lo siento," te dijo el kitsune con sentimiento de culpa, dándote una sonrisa de disculpa. "Supongo que no estaba pensando".
"Está bien", le dijiste, haciendo caso omiso de tu nerviosismo. "No te preocupes por eso".
"¿Así que tampoco has visto nada?" ella preguntó.
Miró el manuscrito de Dread Doctors que tenía en la mano, los bordes ahora estaban arrugados por haber estado metido en su bolso durante tanto tiempo. Tragaste con ansiedad mientras pasabas los dedos por la superficie brillante, intentando con todas tus fuerzas alejar los recuerdos de haber sido arrastrada por un pasillo oscuro por hombres enmascarados.
"No", le mentiste a Kira, dándole una sonrisa falsa. "Nada."
"Tal vez eso sea algo bueno", dijo, apoyándose contra el casillero junto al tuyo con el ceño fruncido. "Quiero decir, Malia corrió hacia el tráfico, Lydia se desmayó y ni siquiera puedo leer la estupidez".
"Quizás deberías hablar con Scott", aconsejaste.
"Dudo que supiera algo", te dijo. "Se siente como si todos estuviéramos un poco fuera de nuestra liga aquí".
"Sí", murmuraste, deslizando el libro en tu casillero y cerrándolo con firmeza. "Vayamos a la biografía".
"Oye", susurró tu novio Theo desde donde estaba sentado a tu lado. "¿Estás bien?"
Suspiró, frotándose los ojos cansados mientras trataba de concentrarse en la tabla. "Sí. Supongo que anoche no dormí lo suficiente ".
"Podrías irte temprano", sugirió Theo. "Solo di que estás enfermo y vete a casa".
"No puedo", susurró, tratando de no captar los ojos penetrantes de la Sra. Finch. "Ya falté demasiado a la escuela el año pasado. Si no me presento por nada menos que mi propio funeral, nunca me dejarán graduar ".
"¡Ay!", Susurró Theo. "Te llevaré a casa más tarde si quieres".
"Eso sería genial", suspiró, apoyando la barbilla en la mano y mirando hacia la tabla.
Continuaste concentrándote en la conferencia sobre Mendel y cómo casi todos los demás científicos de su tiempo pensaban que era un idiota, y en realidad estabas logrando tomar algunas buenas notas. Su somnolencia comenzó a desvanecerse y comenzó a pensar que comenzaba a sentirse mejor. Eso fue hasta que escuchaste los golpes que venían del pasillo.
Frunció el ceño mientras comenzaba a escuchar lo que sonaba como una serie de pasos pesados, arrastrándose lentamente por el pasillo. Tragaste saliva nerviosamente cuando empezaron a acercarse, mirando a tu alrededor para ver si alguien más se había dado cuenta.
Miraste alrededor de la habitación, pero todos todavía tenían sus ojos enfocados en el frente de la habitación. Miraste a tu derecha, pero incluso Theo no se dio cuenta del hecho de que obviamente algo se avecinaba.
El pánico comenzó a apoderarse de su pecho justo cuando la puerta del salón de clases se abrió de par en par. Un médico temible, increíblemente alto e igualmente horrible, entró en la habitación. Te miró directamente, sus ojos vacíos y enmascarados se centraron en tu forma temblorosa. Habló, su voz sin emociones y robótica mientras daba un paso hacia ti.
"Vamos a por ti, Y / n", te dijo mientras se dirigía directamente a la mesa de tu laboratorio. "Estábamos viniendo."
Saltaste de la mesa, tropezando hacia atrás cuando tu pie tocó el borde del taburete del laboratorio, derribándolo. ¡Se estrelló contra el suelo con un fuerte estruendo! y cuando parpadeó, se encontró de pie en medio de la habitación, ahora con todos mirándolo en estado de shock.
Parpadeó una vez más, respirando más pesado de lo que debería haber sido por haber saltado de su asiento. Lydia, Scott, Theo y Kira te miraron con preocupación, mientras que todos los demás en la clase te miraron como si estuvieras loco.
"¿S / n?" Preguntó la Sra. Finch. "¿Estás bien?"
"Uh, sí", murmuraste, rápidamente recogiste tu taburete y volviste a sentar. "Perdón."
Casi todo el mundo se rió y tú mantuviste la cabeza agachada, tratando de ocultar el rojo que comenzaba a aparecer en tu rostro.
"¿Estás seguro de que estás bien?" Te preguntó Theo, sus ojos verdes se nublaron con preocupación.
"Estoy bien", le dijiste, tratando de interpretar todo como si estuvieras bien. "Supongo que me quedé dormido y tuve una pesadilla o algo así".
"S / n", dijo Theo en voz baja. "No estabas dormido. Estaba justo a tu lado y estabas despierto todo el tiempo ".
Tragaste, tus ojos recorrieron rápidamente la habitación. Cuando sus ojos se posaron en la puerta, apenas se podía ver un rostro enmascarado a través de la pequeña ventana de vidrio. Theo notó el miedo en tus ojos, pero no fue el único.
"¿S / n?" Preguntó la Sra. Finch de nuevo, haciendo que toda la clase mirara en su dirección. "¿Estás seguro de que estás bien?"
"Yo ... creo que voy a estar enferma", le dijiste rápidamente, saliendo corriendo del aula sin idea de lo que acababa de pasar.
Corriste hacia el pasillo, apoyado en una hilera de casilleros y tratando de orientarte. Era obvio que los temibles médicos te habían hecho algo, pero no sabías qué. Cerró sus manos en puños, luchando contra el impulso de llorar mientras estaba parado en el pasillo vacío.
Jadeó de dolor cuando sintió que sus uñas se clavaban en sus palmas, y cuando desenrolló sus manos, encontró que las garras sobresalían de sus uñas.
"¡S / n!" Gritó Theo, saliendo del aula y viéndote al final del pasillo.
Rápidamente se dio la vuelta, tratando de dar la vuelta a la esquina antes de que él pudiera alcanzarlo. Pero Theo fue más rápido y rápidamente te agarró del brazo y tiró de ti hacia atrás.
"S / n, ¿qué pasa?" preguntó.
"I..."
Las lágrimas comenzaron a deslizarse de tus ojos mientras le extendías las manos, dejándolo ver tus garras recién adquiridas. Te miró en estado de shock, dándose cuenta de que eras una quimera. Ver la mirada de sorpresa en su rostro solo te hizo llorar más fuerte, y te volviste mientras tratabas de esconder tus lágrimas.
"Oye", dijo Theo con suavidad. "Está bien."
"¿Cómo está esto bien?" sollozaste, dejando que te empujara hacia su pecho. "Soy un monstruo. Ni siquiera soy un monstruo de verdad. Solo soy el experimento científico de alguien ".
Theo inclinó la barbilla hacia arriba, se secó las lágrimas de las mejillas y se inclinó para presionar un suave beso en los labios. Sus manos subieron para ahuecar tu rostro mientras suavemente pasaba su pulgar por tu mejilla. El beso fue lento y tranquilo, no desesperado y urgente como pensabas que sería. Fue reconfortante de una manera extraña, y cuando te besó se sintió como si tal vez todo no fuera tan malo como pensabas.
"No eres un monstruo", te dijo Theo cuando finalmente se apartó. "Real o no real. Vas a estar bien, y lo sé porque no voy a dejar que los temibles médicos te toquen, ¿de acuerdo?
"Está bien", susurraste, respirando entrecortadamente y tratando de calmarte.
Theo te dedicó una sonrisa suave y tranquilizadora, acercándose para apretar tu mano. "Voy a mantenerte a salvo, Y / n. Lo juro."
