ꗃ dalla dalla 𓂃 𓏸𓈒 🐇 ᵏᶰʲ ⁺ ᵐʸᵍ

ocho

—profesor, disculpe la ausencia, ¿aún puedo presentar los proyectos?- yoongi al día siguiente de dormir con namjoon, fue a la escuela a pedir (rogar) por otra oportunidad para entregar las cosas que le faltaban y disfrutar sus vacaciones.

—¿y tú quien eres?- bueno, ya era exagerado que no recuerden a min cuando falto en promedio una semana.

—eh, soy min, ¿no me recuerda? ¿cuando sin querer tiré su café accidentalmente en mi examen reprobado?- namjoon golpeó con el codo a yoongi porque esa no fue una confesión muy inteligente que digamos.

—sí sí, estoy recordando.- lo miró con los ojos entrecerrados por aquel incidente.- ¿y en que puedo ayudar al "no muy listo" yoongi?

—he estado teniendo problemas, ¿puedo entregar la maqueta mañana?- puso su mejor cara de gato triste y el profesor suspiro.

—está bien, pero tu calificación máxima solo puede ser hasta 80.

—90

—80

—85

—ugh, 85. ahora ve a tu descanso.- le dijo para empezar a guardar sus cosas en su maletín.

—¡gracias, gracias!- hizo una reverencia para salir corriendo, tomando la mano de namjoon, quien con dar pasos rápidos alcanzaba a yoongi.

—okey, ahora debo pensar como haré 2 maquetas y 3 ensayos para mañana.- fingió llorar y namjoon intentaba pasar desapercibido y que no piensen que iba con yoongi. aún se le hacía vergonzoso tener que caminar con alguien que gritaba cada 5 segundos y era capaz de tirarse al piso en plena calle.

—puedo ayudarte.- ofreció namjoon

—claro que vas a ayudarme.- soltó sonriendo para caminar mientras abrazaba a namjoon por la cintura. algunos alumnos miraban la escena pensando "yoongi, ¿no podías ser más hetero?" y las chicas fangirleando por lo lindo que se veían los dos juntos.

—eres muy descarado, ni honoríficos . como sea, vamos, voy a comprar tu almuerzo.- yoongi se incorporo para tomar la mano de namjoon y sonreír.

llegaron a la cafetería y namjoon pidió algo para él.

—¿qué quieres comer, yoongi?- preguntó y yoongi parecía muy concentrado eligiendo algo.

—una ensalada está bien.- sonrió con las mejillas rosadas.

—está bien, y una ensalada, por favor.- la señorita que atendía sonrió para empezar con el pedido. no habían muchas personas, ¿quién iba los últimos días de clase? yoongi a suplicar para que redondeen un 35 a un 80, de pura casualidad.

namjoon tomo la bandeja con las cosas que había pedido para dejarlas en la mesa que usaba siempre. yoongi lo seguía cantando, normal en él.

—tell me tell me t-t-t-t-t-t-tell me.- se detuvo para bailar y namjoon estaba considerando amarrarlo a una silla.

—siéntate y come, yoons.- pidió un poco harto ya y yoongi se detuvo por algo que él notaría hasta a kilómetros de distancia. 

—espera, espera, ¿CÓMO ME LLAMASTE?- fue corriendo a sentarse y moverse inquieto en su asiento.

—te vas a caer de la silla, te llame yoongi, ¿así no te llamas acaso?- dijo con seriedad pero su subconsciente estaba alarmado por el apodo que uso.

—¡no me dijiste así! escuché, escuché con mis propios ojos.- aseguró para empezar a comer.

—quien pudiera oír con los ojos.- comentó intentando no reír.

—¡no me cambies la conversación! ahora solo falta que me propongas matrimonio, adoptemos un perrito y...- yoongi estaba viajando a otra dimensión literal y namjoon nervioso no es algo bueno.

—estás alucinando, ni siquiera me gustas.- espera, ¿qué acababa de decir? ¿por qué mentir así? namjoon ahora sólo empezó a comer rápido, no quería ver a yoongi en unos 10 años.

—oh, eso lo sabía. digo, sólo estoy bromeando, no podría gustarle al mismísimo kim namjoon. y-yo debo irme, agradezco tu lastima.- vio como dejaba su ensalada a la mitad y supo que la había cagado en grande.

yoongi ya había empezado a caminar con la cabeza baja, situaciones urgente merecen medidas urgentes. se puso de pie, tomo de la mano a yoongi para hacer que se detenga. él lo vio, sus ojos lucían tristes, pero el sonreía.

—namjoon, no me debes explicar...- y lo más inesperado apareció antes de lo planeado.

namjoon lo besó.

namjoon reto a los labios de yoongi quien podría bailar más sin la necesidad de respirar.

y yoongi.

él no podría estar más feliz.

haseul veía desde la puerta de la cafetería como yoongi cumplía lo que nadie imaginaría.

y aunque le dolía, eso era lo que yoongi querría.