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El teléfono en la residencia Kaspbrack sonó en la madrugada , el ruido que parecía nunca acabar, despertó a los habitantes de dicha casa. La señora del hogar, se encaminó al aparato, maldiciendo a la persona que este interrumpiendo sus horas de sueño. Tomó el teléfono entre sus regordetas manos, y de manera somnolienta, contestó

A los pocos minutos, su sueño se desvaneció por completo, dándole el paso a la tristeza. Se despidió formalmente y colgó. A pasos pesados subió poco a poco las escaleras, que rechinaban con el peso de la mujer. Llegó al cuarto de su pequeño y abrió sin más. Su hijo yacía sentado en la cama, esperando la noticia por parte de su madre. Sabía muy bien lo que pasaba, pero no quería aceptarlo, no quería. Al escuchar las palabras de su progenitora, se rompió en llanto. Sus lágrimas caían claramente sin querer parar, empezaba a sentir que le faltaba el aire, su vista se nublaba. Odio ese vacío que se hacia presente en su pecho, lo odio... Si bien había pedido al destino que no se lo arrebataran, sus deseos no se hicieron realidad. Porque la verdadera realidad la estaba viviendo, Richie había muerto y no podía hacer nada para traerlo de vuelta.

...

Richie Tozier murió por un paro respiratorio a las 2:47 am. Su madre se encargo de avisar a todos sus conocidos y en especial a su segunda familia, los perdedores. Maggie relato por teléfono que escucho a su hijo gritar su nombre, que salió corriendo de su habitación a ayudar a su pequeño. Al ver que no podía respirar tomó  el teléfono y llamó una ambulancia, tomó entre sus brazos a su hijo, tratando de ayudarlo a respirar. Pero fue en vano, el corazón de su niño dejó de latir, murió en sus brazos. Al llegar la ambulancia trataron de devolverlo a la vida, pero ya no había nada que hacer...

Sus familiares estaban ocupados en el tema de la funeraria. No fue tan difícil como pensaron, al día siguiente ya tenían el permiso para poder velar el cuerpo del chico, y más tarde enterrarlo.

Los perdedores volvieron a reunirse, ahí estaban, en la cantera como siempre acostumbraban, en completo silencio nadie era capaz de hablar. El único que podía sacar un tema de conversación era el bocazas... Eddie sostenía su inhalador, recordando todos los momentos junto a Richie. Momentos que se convirtieron valiosos para el.

Nadie habló durante ese momento, solo quedaron en un profundo silencio

El funeral se llevó a cabo al día siguiente, la familia Tozier volvió a reunirse, los conocidos de Richie - entre ellos los perdedores- estaban ahí, las madres de los losers  consolaban a la señora Tozier, los amigos del fallecido se negaban a entrar, no tenían el valor para poder ver a uno de sus mejores amigos postrado en una hurna, sabían que se les partiría el corazón al verlo, el que siempre estuvo para ellos, y en los momentos difíciles lograba sacarles una sonrisa con sus chistes malos, que no importaba que, el siempre estaría dispuesto a ayudarlos.

Beverly tomó valor y se adentro a la funeraria, en busca de la familia Tozier. Al encontrarla, se acercó a ellos, le dio su más sentido pésame y se dirigió a la hurna de su querido amigo. Los chicos la siguieron, en algún momento tendrían que verlo... Se encontraron con la pelirroja arrodillada, frente al cuerpo de su amigo el bocazas, sus lágrimas caían sin parar, Ben la ayudo a levantarse, dándole un abrazo, su mirada se posó en el cuerpo de Richie, sin poder contener las lágrimas se aferro a la fémina, llorando junto a ella. Así pasaron de uno a uno, todos saliendo del lugar con las notorias lágrimas adornando sus mejillas. El último en verlo fue Eddie, se encaminó a donde se encontraba y ahí lo vio. Su rostro no expresaba nada, se veía tranquilo, su piel ahora más pálida, sus labios resecos y el poco cabello que tenía... Sus manos se alcanzaban a ver, tomó una de ellas, estaba fría, ya no tenía la misma calidez que antes.

— dijiste que no me dejarías rich, ¿porque? — susurro entre lágrimas  —hubiéramos buscado la manera de curarte, no era necesario rendirte, me dejaste solo ¿que hago con el vacío que dejaste idiota?, ya no te tendré a mi lado, y duele maldita sea, ¿no pensaste en eso? Y-yo te amo, por favor llévame contigo ¿si? Quiero seguir a tu lado, no quisiera vivir en este mundo sin ti, déjame estar a tu lado por favor... Te amo rich, por favor, no lo soportare, no soy tan fuerte como creíste. Te necesito conmigo... No merecías esto.

Su madre apareció, y trató de apartarlo, pero se negó, no quería dejarlo. Insistía pero el negaba, solo quería volver al tiempo donde dormían juntos, donde lo podía abrazar y hacerle mimos. Quería estar otra vez en la cantera con el, sacándole sonrisas y varios sonrojos. Quiere quedarse junto a él, como Richie lo hacía cuando sus pesadillas volvían, no puede alejarse de él...

— Construire un mundo en el que podamos ser felices, lo prometo Richie — susurro. Sin mas remedio, se fue junto a su madre... Sin ver, que alguien desde un rincón, parecido a una sombra pero blanca y llena de luz tenía su mirada posada en el, sonriendole con tristeza, mientras lo veía alejarse, susurro un <nunca me separare de ti> y  desapareció por completo.

Richie Tozier siempre será recordado como el mejor amigo, y por tener un alma tan bondadosa y llena de alegría, su alma merece estar en paz... Eddie cada que necesita de él, solo mira las estrellas, y recuerda las miles de cosas que pasó junto a él... Su Richie.

Fin

✰𝚂𝚝𝚊𝚛✰ -𝐑𝐞𝐝𝐝𝐢𝐞Donde viven las historias. Descúbrelo ahora