Capítulo 1: "Comienzo del verano"

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Me desperté aquella mañana sobresaltada miré la hora que era -Dios mio era tardísimo- salté de la cama y salí corriendo tenía que arreglarme o llegaría tarde a clase, baje corriendo las escaleras, me resbalé y por poco no terminé en el suelo, entré a la cocina dispuesta a desayunar y mi madre pareció sorprenderse de verme allí, fue entonces cuando lo recordé hoy empezaban las vacaciones y no tenía que haber madrugado -Maldita sea porque seré tan despistada-, me dirigí de nuevo a mi habitación para seguir durmiendo, yo no solía madrugar los días sin clase y además tenía que recuperar horas de sueño que los exámenes finales me habían quitado, últimamente había tenido un aspecto horrible y no podía permitirme eso ahora que comenzaba el verano, bueno lo dicho que me dirigía a mi habitación cuando me llamó mi madre.

-Alice acuerdate de hacer las maletas.

-¿Las maletas?¡¿para qué?!

-No me digas que lo has olvidado es el cumpleaños de tu abuela y pasaremos en su casa el fin de semana.

-¡¿Qué?! Imposible sabes que tengo planes llevaba planeando ese fin de semana 3 meses es el cumpleaños de Giss y lo íbamos a celebrar y tu lo sabías. Ni hablar no pienso irme.

-Lo siento pero no vamos a discutir sobre esto mañana nos iremos te guste o no.-dijo mi madre enfadada-.

Subí a mi habitación y cerré la puerta de un portazo, inmediatamente llamé a Gisselle, mi mejor amiga.

-Ali, ¿Se puede saber que pasa? Ya puede ser importante para haberme despertado a estas horas.-dijo Gisselle adormecida.

-Giss malas noticias.

-No me asustes, ¿Que a pasado?. -dijo esta ahora preocupada.

-El cumpleaños de mi abuela es este fin de semana y mañana me voy a su casa.

-¡No puede ser! ¿Y todos nuestros planes? ¿Has hablado con tu madre?

-Imposible Giss sabes como es y esto se le ha metido en la cabeza no hay otra opción mañana me iré. No me lo puedo creer me voy a perder el cumpleaños de mi mejor amiga.-dije deprimida-.

-Bueno Ali nos queda 24 horas para que te vayas arreglate que llamo a las chicas y en una hora paso a por ti, celebraremos mi cumpleaños anticipado.

-Perfecto voy a vestirme.

-Si empieza ya que con tu puntualidad podemos estar esperándote hasta mañana.-dijo Gisselle en tono burlón-.

-Como eres.-dije soltando una carcajada-.

-Luego te veo tonta y recuerda sé puntual.

Colgué y me fui rápidamente a la ducha Giss tenía razón mi impuntualidad es legendaria dentro del grupo y sino me daba prisa en una hora no estaría lista.

Una hora mas tarde llamaron a mi puerta, terminé de maquillarme y baje, mi madre estaba trabajando asique no tendría que pasar por momentos incómodos antes de irme.

En el coche se encontraba Giss y el resto de mi grupo: Abi, Katia y Lía.

-Bueno chicas que planes tenemos.-pregunté-.

-Ir de compras,por supuesto.-dijo Lía feliz.

Pues claro como lo había podido dudar, sin duda esa era una de nuestras actividades favoritas.

-Y esta noche Derek Modric da un fiestas en su casa y obviamente nosotras estaremos allí.-dijo Giss-,-mierda sabía perfectamente lo que estaba tramando-.

-Giss sabes que Derek lleva detrás mía muchos tiempo y si voy a saber lo que es capaz de hacer.-le contesté.

-Y que más da, Ali si es guapísimo y todas lo sabemos.-dijo Katy sonriendo.

-Bueno ya sabemos todas lo que pasara esta noche asique debemos ir perfecta.- dijo Giss mientras me guiñaba un ojo.

Arrancó el coche y nos dirigimos al centro comercial. Durante el trayecto no hubo mas momentos incómodos, estuvimos cantando y no tuvimos tiempo de hablar de lo que pasaría aquella noche.

Entramos al centro comercial y nos dirigimos directamente a la sección donde se encontraban nuestras tiendas favoritas; notamos como todo el mundo se nos quedaba mirando, era increíble el efecto que provocábamos nosotras cinco en todo el mundo.

Después de un largo día de compras Giss dejó a las demás en sus respectivas casas y dijo que pasaría a buscarlas a las 10, después de esto mi mejor amiga y yo fuimos a su casa para empezar a prepararnos, debíamos ir perfectas.

Yo me había comprado un espectacular vestido azul y esta noche pensaba divertirme a lo grande, nada ni nadie me la iba a estropear.

Un segundo para soñarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora