Capítulo 26

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El emperador y la confianza 

Naruto miró a Sasuke desde su trono.

Sabía lo que quería el Uchiha y había permitido que su odiosa presencia apareciera ante él. Podría haberlo detenido si hubiera querido y Sasuke no habría podido hacer nada al respecto.

Aún así, cuando tomó el cuerpo de Itachi, no había pensado que habría muchas cosas saliendo mal en su planificación.

Se suponía que todo iba bien con el Uchiha convirtiéndose en su herramienta, o tal vez en una herramienta potencial. No tuvo problemas con que Sasuke ganara el Eternal Mangekyo Sharingan, solo entonces podría ser controlado por él. Pero con muchas cosas saliendo mal, Naruto se preguntó si él también estaba cometiendo un error.

Esos ojos no podrían volverse hacia él, pero aún así no cambiaba que pudieran voltear otras cosas que él valoraba.

Sin ir a ninguna parte con sus pensamientos, el Emperador apoyó la cabeza en la palma de su mano izquierda y luego habló.

"¿Te has encontrado con Zetsu?"

Los ojos de Sasuke se agudizaron: sabía que había problemas allí y su hermano ya le había advertido.

"¿Por qué preguntas?"

"No seas estúpido. Solo responde la pregunta simple".

"Vino a verme y se fue antes de que yo pudiera hacer nada. Quería reclutarme y dijo que había una manera de conseguir mis ojos".

Naruto se quedó mirando al escuchar esas palabras. Por "mis ojos", Sasuke se refería a los ojos de Itachi. Pero eso no fue lo que le molestó en esa declaración.

¿Cómo pudo Zetsu conseguir esos ojos cuando los había protegido? No podía haber un traidor entre los Uzumaki a menos que fuera esa mujer. Por su cuenta, Zetsu no podía conocer los secretos de la aldea. También era impensable que uno de ellos resultara ser un traidor.

Esta aldea tenía barreras para mantener fuera a la gente y las cosas.

Alguien como Zetsu no podía entrar en ningún lugar sin que ellos lo supieran. Ya sea por tierra, aire o por debajo, siempre atravesaba una barrera antes de entrar al pueblo. Habría alguna investigación sobre esto. Por otra parte, Zetsu podría haberle estado mintiendo a Sasuke.

Era manipulador, eso era evidente.

"Podrías haberlo quemado con Amaterasu. ¿Por qué no fuiste tan lejos?"

"No recibo órdenes tuyas, Naruto." Sasuke respondió en un tono frío.

"¿Dónde estás parado, Uchiha?" Preguntó Naruto, no levantó la voz, su postura relajada tampoco cambió.

"¿Qué se supone que significa eso? ¿Piensas siquiera que solo porque estoy en tu aldea voy a tener miedo de ti? ¡No me asustas!"

Naruto negó con la cabeza lentamente. "Para alguien aclamado como un genio, eres bastante estúpido y ciego", dijo el Emperador antes de levantar su mano derecha.

Chasqueó los dedos y las marcas empezaron a extenderse por el suelo del palacio.

"¡Qué diablos!"

Una enorme fuerza de gravedad tiró a Sasuke al suelo.

Golpeó ambas rodillas.

Sasuke apretó los dientes con ira y frustración.

En el momento en que se activó el sello de abajo, supo que algo andaba mal. La fuerza que lo empujó hacia abajo fue demasiada. Ni siquiera pudo convocar a su Susano'o. Cuando la fuerza continuó tirándolo hacia abajo, sus dos manos se estrellaron contra el suelo mientras intentaba evitar que su rostro se besara.

El EmperadorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora