Deep Blue Eyes

VI

"Fuimos conscientes de todo, lo sé. Vi el vacío de tu alma y tu viste el mío"

Sinner abrió la puerta tras ella, que absorta en los deseosos besos y caricias por parte de su acompañante, no se percató de que ya habían entrado en el departamento hasta que las caricias del tuerto se volvieron torpes repentinamente.

Divell lo detuvo al ser consciente de esto.

"¿Qué pasa?" Cuestionó exasperada tras sujetar las delgadas manos del hombre entre las suyas.

Él desvió su mirada.

"¿Por qué estabas tan cerca de William?" Habló, su pregunta causó una leve risa por parte del demonio, en cuyo aliento prevalecia aquella inigualable fragancia proporcionada por el alcohol recientemente consumido.

"No es nada que deba interesante, perra" Río, incapaz de pensar en una respuesta seria. Eso fue algo de lo que se arrepentiría más tarde.

Sinner mantuvo su mirada fija en ella ante la inesperada respuesta del demonio, quien fue capaz de descifrar la gran duda presente en su mirada.

Sabía que sólo era capaz de saber acerca de sus pasamientos porque él lo había permitido, como si le estuviese advirtiendo que podría hacer una locura y no arrepentirse tiempo después.

"Lamento haber expresado mi pregunta de forma incorrecta, querida" Se corrigió pacientemente, tomándose su tiempo con cada palabra mientras que apartaba sus manos de las de ella cerrando sus ojos, sólo para abrirlos unos pocos segundos más tarde "¿Por que ansiabas tocarlo como si nadie más estuviera presente?"

Ella le observó incrédula.

"¿De qué demonios estás hablando?" Replicó furiosa.

Sinner sostuvo su mirada durante unos cortos segundos antes de que su puño izquierdo impactara firmemente contra la pared detrás suya en un brusco movimiento.

La joven retrocedió estremeciéndose ante la vibración de la pared provocada por el golpe

"Vamos querida, ¿a caso crees que puedes intentar acostarte con cualquiera y luego mentirme en la cara?" El tono de su voz se mantuvo igual de inexpresiva que siempre, pero el volumen de sus palabras continuó aumentando mientras que estas abandonaban sus pálidos labios.

La joven mordió su labio inferior ni bien el tuerto comenzó a gritar, en un inútil intento por contener las lagrimas acumuladas en sus rojizos ojos.

Estaba aterrada, los recuerdos que asaltaban su mente en ese momento no eran los más felices y se vio incapaz de controlarlos ante la imponente figura de Sinner, causándole una abrumadora sensación nauseabunda.

"Vuelve a morder tus labios así y yo lo haré hasta hacerlos sangrar" Amenazó.

Divell intentó alejarse, pero las altas plataformas que no solía usar y el resbaladizo suelo del departamento del tuerto causaron que resbalara y cayera entre lágrimas.

Él se aproximó hacia ella velozmente, sus oscuras botas resonaron contra el suelo a medida que avanzaba.

Sujetó la muñeca del demonio firmemente antes de hablarle.

"Levántate" Exigió, el volumen de su voz había descendido hasta llegar al habitual.

Ejerció más presión sobre ella al percatarse de que no estaba dispuesta a colaborar con él.

"Sinner" Gimoteó con un claro dolor en su voz acompañado por la tensa expresión en su rostro.

El tuerto la soltó de manera inmediata, forzando sus piernas a ceder, cayó al suelo de rodillas frente a ella para proceder a rodearla con sus brazos.

"Lo lamento tanto, querida" Balbuceó, la joven tardó en corresponder su abrazo ante la sorpresa provocada por oír la voz rota del tuerto "Soy un monstruo"

Divell ansió apartarlo, responderle un frío sí y retirarse sin mediar palabra, pero fue incapaz de dejarlo.

"No, no lo eres" Sollozó, incapaz de detener las lágrimas cayendo por sus ojos. "Pero yo sí lo soy"

El tuerto se mantuvo en silencio ante sus palabras, manteniendo su rostro oculto en el espacio entre su cuello y sus hombros.

Tardó unos segundos en reaccionar, apartándose de ella y sujetando su rostro mientras que limpiaba sus lagrimas con los dedos.

"Esto no volverá a repetirse, Sinner, no volveré a hablar con William" Prometió, consciente de que había dicho algo que no podría cumplir, pero en ese momento le pareció lo correcto "Si puedo  evitar hacerte daño, evitaré también a Lumina, me alejaré de ambos si es lo mejor"

Él separó sus labios levemente.

"¿Hablas en serio, Divell?"

Ella sonrió antes de continuar.

"Moriré a tu lado si ese es mi destino" Sinner la abrazó firmemente cuando terminó de hablar.

"Te amo, amo cada detalle de ti" Confesó mientras que sus delgados dedos se entrelazaban en su cabello.

Divell cerró sus ojos, dejándose llevar por los delicados besos del hombre, ignorando la extraña sonrisa que sentía en sus labios.