Capítulo 8

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Había pasado una semana y media desde que habían encerrado a Lauren y a Camila, ambas se la habían pasado tantos momentos íntimos, como en ese momento.

—¡Ah-ah, Lauren!—Gimió Camila boca-arriba en el suelo con las piernas extendidas con Lauren enmedio de estás.

Lauren entraba y salía dando duros estoques provocando gemidos increíblementes altos y excitados a Camila, Lauren agarraba las piernas de Camila separándolas para entrar más rápido y más profundo.

Lauren soltaba pequeños gruñidos completamente excitada, sintió como Camila empezaba a jadear y temblar aproximándose a su orgasmo, en segundos sentía el coño de Camila ordeñandola, soltó un gruñido viniéndose dentro de Camila como todas las veces anteriores.

—Oh Dios—Bramó Lauren recargándose en sus talones mientras respiraba agitaba.

—Si, oh Dios—Balbuceó la castaña tapándose el rostro con amaba manos

Pasaron varios minutos dónde estaban acomodadas, ella estaba encima de Lauren acostada en su pecho mientras Lauren le acariciaba el pelo, aún dentro de ella. Recordaba como desde el problema de que la castaña se imagino a dos perros mojados, tuvo que convencer amablemente a Lauren a que se mantuviera dentro de ella después de haber terminado.

Flashback

Lauren se había quedado dormida con Camila, ella detrás de Camila sosteniendola, en posición de cucharita.

Camila se despertó sintiendo los brazos cálidos de Lauren sosteniendola firmemente, sentía un poco lejana a Lauren desde el tema de la mordida, no sabía la razón pero sospechaba que seguía siendo por lo de haberlas comparado con dos perros pegados. Trato de soltarse del agarre de Lauren por un antojo de papas pero al tratar de levantar el brazo, está gruñó acercándola mas si era posible.

A pesar de gustarle demasiado estar en los brazos de Lauren, quería sentirla más de cerca, como el primer día que habían pasado juntas... Antes del comentario de los perros. Trato de moverse de nuevo pero Lauren volvió a gruñir está vez poniéndola encima de ella, sus pechos chocando desnudos, Lauren gruñó satisfecha aún durmiendo.

Camila, excitada nuevamente, movió las caderas volviendo a levantar al amiguito de Lauren. La oji-verde gruñó soltandola, Camila aprovechando ese momento, se levantó sentándose en la parte baja de Lauren, despertándola.

—Camz... ¿Qu-qué haces?—Preguntó incorporándose para recargarse en sus brazos, adormilada.

—¿Yo?... Nada—Sonrió aún sabiendo que Lauren no la veía debido a que habían apagado las luces.

—Camz, acuéstate—Pidió tratando de tomar su cuerpo—Durmamos.

—Alto ahí vaquera—Murmuró tomando con su mano el pene de Lauren.

—Camz no, ven acá—Estiro el brazo pero el apretón que Camila le dió en su amiguito, la detuvo—A-auch, Camz, cuidado.

Camila se levantó ligeramente para sentarse en el amigo de excitado de Lauren.

—Durmamos—Sonrió acostándose sobre Lauren, la cuál seguía sostenida en sus brazos.

Camz... Camila, sal, por favor—Rogo levantando las rodillas.

—Lolo, si me llegas a sacar, voy a apretar tu pene tan fuerte que ya no serás capaz de coger—Advirtió acostada.

—No te atreverías—Titubeó temerosa.

En mis brazosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora