Toxic ➳ Todoroki Shoto

Capítulo 11

La mente de Fuyuka se sacudió por un momento de brevedad alargada por su ansiedad, básicamente su suegro le estaba pidiendo, casi ordenando que dejase a Shoto en paz. Se sintió atacada, no podía responder de manera franca como él quería.

—Ah... —titubeó.

—Piénsalo, esperaré tu respuesta, aunque supongo lo que ya sucederá —contestó con un semblante que a primera impresión debería tomarse en serio.

—¡Ya está la comida caliente, papá! —Fuyumi llegó junto a sus dos hermanos, sirvieron platos llenos de comida frente a su padre quién seguía observando a Fuyuka.

—Nos vamos, Fuyuka —indicó el heterocromatico, un tanto enfadado por la presencia de Enji, el cuál ni siquiera se tomó la molestia de saludar.

—Sí... —aceptó, el noviazgo apenas floreciente se sentía asfixiado por la tensión que embargaba la casa Todoroki.

—Gracias por el almuerzo de hoy... —murmuró con timidez, su novio tomó su mano, apretándola dolorosamente en el acto; ya se había acostumbrado a ese tipo de toques sin delicadeza, incluso se le hacía extraño el día que no lo hiciera.

Fue mal educado no despedirse bien, Shoto aparento tener prisa. Pero solo quería huir inmune al habla de Endeavor.

—Camina rápido —regañó el chico.

Fuyuka intentó hacer caso a su orden, pero simplemente sus complexiones eran diferentes; las piernas de la jóven no eran tan largas que las de Todoroki, por lo que le era muy difícil, casi imposible seguirle el paso. Mientras Shoto caminaba a zancadas, Fuyuka lo seguía casi corriendo.

—Shoto, por favor espérame... —suplicó.

Él la ignoró, y para desafiarla, camino a un más rápido; provocando el cansancio instantáneo de ella por su poco aguante.

Permaneció su condición así hasta llegar a la academia, cuando soltó su mano al ver que todos sus compañeros los estaban esperando le dejo una sensación vacía: Todoroki realmente no quería que nadie los viera juntos como «pareja». Siempre era así de distante y frívolo frente a la vista pública, tal vez lo tenía que considerar un ejemplo de también ser así, ya que después de todo, ella lo aceptó.

—No se tardaron mucho. Está bien, vistánse, tenemos que entrenar —ordenó el hombre de cabellera larga y alborotada.

—Entendido —dijeron los estudiantes.

En los vestidores de mujeres siempre estaba lleno de diversas conversaciones, para Fuyuka era algo incómodo por así decirlo ya que solo quería vestirse en paz y no podía evitar cruzar más de una palabra con sus compañeras.

—Fuyuka-chan, siempre me he preguntado ¿cómo se sentirá tener novio? ¿Es genial, no? —interrogó imprevistamente la de piel rosada.

—Sí, es lindo... —respondió, casi terminando de ponerse su traje de héroe, el cuál era muy ligero y elástico, sus zapatos le permitían saltar demasiado alto así como también poseía un casco que le permitía ver a distancias realmente lejanas, al igual que por dentro, tenía un pequeño masajeador para aliviar un poco su dolor de cabeza cuando utilizaba su don; su traje en general constaba de gamas de color grisáceas y azules. Más que ser bonito, era sumamente útil.