Chaos Gender Bender

¿Sabes quién soy?

-¿Qué?

-Ten pregunto si...tu en realidad eres Samuel, el antiguo capitán de fútbol de la escuela

-Ehh...no...creo que me estás confundiendo ja ja ja

-Ah, de veras, entonces está bien. Nos vemos luego Samuel

-Adios, nos vemos

-¡¡AJA SI ERES TÚ!!

- a

Sam fue demasiado tonto y calló en la trampa de Carolina, revelando su verdadera identidad de una forma demasiado estúpida.

-Tranquila, no pienso revelar quien eres

-Pero...

-Esta bien, supongo, cada quien tiene su propia identidad sexual y tú puedes ser Samantha si tú quieres

-Ehh, creo que lo estás malentendiendo

-¿Uhm?, No te preocupes, tengo amigos que también se visten de mujer así que no deberías sentirte extraño hablando conmigo

-No, espera, yo no me visto de mujer, bueno, ahora sí pero no es por gusto

-¿A que te refieres?

-Hace unos días yo...me transformé en una mujer

-¿Saliste del clóset hace tres días?

-¡NO!, Me convertí en una mujer de forma biológica

-Pero eso no es posible jaja

-¿No me crees?

-Claro que no, aunque por tu forma física créeme que nunca te hubiera reconocido, tienes que decirme quién te maquilló y te dio el relleno para los pechos. Incluso tu estatura es distinta, ¿hiciste algo en especial?

-No hice nada, ¡mi cuerpo solo cambió!

-Na, mira

Carolina apretó el pecho de Sam con mucha fuerza, como si tratara de arrancarlo

-¡AUUCHH!

-Eh...¿por qué no sale de su lugar?

-¡¡Quita tu mano!!, Cielos, eso dolió mucho

-Pero...

-Oye mira, no se que tengo que hacer para que me creas que simplemente ahora soy una chica, pero no tenias porque lastimarme de esa forma. Cielos, los pechos son muy sensibles

-No, está bien, ahora te creo, siento que tu cara expresa dolor y eso es algo difícil de fingir

-¡PUES CREO QUE YO TAMBIEN ESTOY SINTIENDO QUE MI CARA HACE UNA EXPRESION DE DOLOR!

-Lo siento, de verdad

-Ya olvídalo, no vuelvas a hacer eso

-Pero, ¿como es esto posible que ahora seas una mujer?

-No se, pero antes quiero saber cómo sabías quién era yo

-Aamm...eh...pues...soy muy observadora, y tanto tu forma de hablar eran idénticas

-¿Me identificaste...solo por mi forma de hablar?

-Si...

-Pero...no recuerdo haber hablado contigo cuando era un chico, así que como fuiste capaz de reconocer mi voz si no éramos amigos en ese entonces

-¡Detalles detalles!, eso no importa ahora, será mejor que nos vayamos yendo a clases antes de que la maestra se enoje

-¡Oye espera!