🪐3🪐 Nuevos inversionistas

5.9K 806 144
                                    




[**]

Ya había pasado un año desde que me mude de Los Angeles, había hecho mi mini empresa dando los mejores frutos con los proyectos que presentaba, no me podía quejar, me estaba yendo un poco bien en mi nueva vida, digo poco bien porque aun tenia problemas en la noche para dormir, ya que recordaba esa fría y oscura noche cuando supe la verdad de todo.

Como lo dijo Teo, cada día me llegaba una carta de el, no precisamente de una paloma mensajera como me lo prometió pero por lo menos cumplió su promesa, en las cartas decía su día a día junto con Rafael, o lo malo que había sucedido y entre otras cosas mas; pero jamás nombraba algo de Aidan, siempre que llegaba una carta veía primero el final de ella, pues aun tenia esa pequeña esperanza que fuera mentira todo lo que había pasado y que el vendría a buscarme para aclarar todo, pero jamás pasaba, de seguro está demasiado ocupado ganando mas apuestas, eso se le daba muy bien...

Guardaba todas las cartas de Teo por fechas, para que así cuando lo volviera a ver, le pudiera enseñar todas las cartas de todo este año, estoy mas que segura que se emocionara por ello. Al igual que el, yo también le respondía, a veces explicando mis días pesados de la empresa, otros donde no hacia nada y me la pasaba en mi casa, digo mi casa porque no quería seguir viviendo mi vida de empresaria con mis papás, así que me independice y logre comprarme un departamento, no tan pequeño pero tampoco ni tan grande, lo suficientemente cómodo como para que una alma viva ahí.

Aun no tengo fecha de regreso, puede que me quede otro año mas aquí para que crezca mas mi empresa y poderme dar unas vacaciones con Teo y Rafael, en verdad si las necesitaba, ahora comprendía a mis papás cuando literalmente solo llegaban a dormir a casa cuando era una niña, pero no me rendiré, quiero llegar a mas que mis papás.

Aun me preguntaba como estarían los chicos... si aun conservaban "La manada" o todo había cambiado desde mi ida... aunque lo dudo, debí ser irrelevante en sus vidas... pero a pesar de eso debo de admitir que extrañaba a todos, en especial a Malik, podría jurar que en días necesitaba su carisma para relajarme, perdí contacto con todos ellos, como se lo dije a Teo, me alejaría un tiempo de las redes sociales hasta que yo este bien conmigo misma, no es que de la noche a la mañana supere todo lo que viví con el chico que según éramos nuestro amor correcto que esperábamos en nuestras vidas... incluso pensar en eso me tensa y me enoja por lo ilusa que fui al creerle todo; pero en fin, prometí no odiarme por eso, ya que todo lo mío si fue verdad...

[...]

Pasaron 6 meses, mi empresa como lo esperaba, creció gracias a un trato que hice con unos inversionistas, aunque ellos no parecían muy convencidos al principio, ya que ver a una mujer de 20 años con una empresa a su cargo, no es muy convincente para sus ganancias de ellos, además de que uno de ellos estaba en contra mía, todo lo que decía, le parecía mal, que no era un buen proyecto, que daría muchas bajas en los porcentajes y mas cosas negativas que empezaban a colmar mi paciencia, pero aplique unos cuantos trucos que me enseño mi papá y gracias a eso pude convencerlos de firmar el trato. El "inversionista", si es que se le puede llamar asi, que siempre me llevaba la contra era un chico... De muy mala cara por cierto, eran como de esos ególatras ambiciosos que siempre terminan perdiendo, digo, se que en este mundo te debes convertir en una persona así, pero hay niveles a niveles. Según lo que investigue, era el nieto de uno de los inversionistas, supuestamente lo había llevado para que aprendiera un poco mas de la empresa que quedara a cargo de el, vaya mala suerte que tendrá en un futuro esa empresa... Parecía de mi edad, o un poco mayor que yo.

-Oye, ¿me podrías decir donde esta la jefa? necesito hablar con ella-Dijo el tipo mirándome

-¿Disculpa?, Yo soy la jefa-Dije en alto

-¿Si? Pareces mas la secretaria, pero en fin-Dijo viéndome de pies a cabeza, por mi parte rodee mis ojos ante su comentario INNECESARIO

-¿Que quieres Antoni? no tengo tiempo para ti en estos momentos-Dije frustrada

-Bueno, me dieron la noticia de que serás mi mentora en el tiempo que dure el contrato con tu empresa... si es que se le puede llamar así, y MI futura empresa-Dijo en un tono vanidoso pasando su dedo por todo el filo de mi escritorio

-¿QUE?, NO PUEDO SER TU MENTORA, NO TENGO TIEMPO PARA ESO-Dije alterada, no ayudaría a el en nada que tenga que ver con negocios, solo seria perder mi tiempo y dedicación tan siquiera para enseñarle a sumar

-No lo quise yo, estaba en el contrato-Dijo el cruzándose de brazos

-No es cierto...-Dije abriendo el folder del contrato y empezar a buscar con mi dedo cada párrafo para ver lo que según el me había dicho

-Esta hasta el final, en la penúltima clausula-Dijo suspirando

Fui a las ultimas hojas y era verdad... estaba muy ocupada en convencer a los inversionistas mientras el me contradecía que no vi la ultima clausula, no podía negarme ya que estaba todo firmado...

-Y bien... ¿con que empezamos?-Dijo sentándose en mi mesa

-En primera bájate de ahí, no te tolero y menos lo hare si estas con esa actitud-Dije enojada

-Veo que eres de las que mandaría en la relación, tienes buena voz para eso-Dijo parándose riéndose

-Me importa un carajo el como creas que soy, trae esa silla y siéntate en esa mesa, te pasare unos archivos y solo tendrás que hacer lo habitual-Dije suspirando ya sentada

-Bien, ¿pues que esperas?-Dijo en un tono exigente, sentado en la silla para estirarse como si esto fueran unas vacaciones

-No estoy para aguantarte, si quieres aprender, tráelos tu, estoy demasiada ocupada en mis cosas para preocuparme por alguien tan imbécil, déspota y...-No dejo que terminara

-Podrá ser mucho tu empresa, pero ahora también la manejo yo, así que es mejor que vayas cambiando tu actitud conmigo-Dijo acercándose a mi para tomarme de la barbilla bruscamente

-¡Suéltame! ¿Quién te crees para tocarme? LARGO DE MI OFICINA-Dije gritando

-¿Pasa algo...?-Dijo su abuelo entrando a mi oficina por mis gritos

-Veo que empezamos con el pie izquierdo, mil disculpas señorita Lauder...-Dijo Antoni dándole un beso a mi mano

-No pasa nada-Dije quitándola antes de que la besara-Por hoy no podre ser su inventora, tengo trabajo en exceso y necesito acabarlo, espero que me comprenda-Dije mirándolo con desagrado

-Comprendo, vendré mañana temprano-Dijo saliendo junto con su abuelo

Que poco hombre, sabia que toda mi paz de este año y medio se iría por la borda con Antoni, hasta decir su maldito nombre me ponía de malas, guarde mi laptop y salí de la oficina para ir a mi casa y relajarme por el mal rato que había pasado


¡NO SEAS QLO Y VOTA JAJAJ! ME AYUDARIAS MUCHISIMO ;(

Find me Darling #2 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora