dulces sueños

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jack:

podía oír sus voces, burlándose y riéndose de mí mientras permanecía tirado en el suelo, o por lo menos, eso creía, pero había algo... algo raro...

me miraban ansiosos como siempre, más esta vez no se encontraban felices, estaban más bien, desconcertados?...

su luz, esa luz tan blanca y fría que emanaban se veía distante, tenue, como sí se encontrarán tras el telón de un teatro, mientras que sus sonrisas antes grandes e insensibles ahora se veían convertidas en muecas de disgusto y confusión, muecas que solo podria manifestar el público de un acto, cuyo entretenimiento circense a sido interrumpido de forma repentina, sin ningún avisó ni explicación...

sus gritos, antes fuertes y violentos ahora yacían opacados, convertidos en susurros suaves e inaudibles en un mar de silenció...

ellos no se acercaban, no lanzaban patadas a mi espalda, ni golpes a mi rostro, simplemente estaban viendo, distantes, como sí hubiera algo en mí... algo que de repente no entendieran... que los mantenía expectantes... intrigados...

mis rodillas aun dolían, mi nariz aun sangraba, pero por primera vez en más años de los que puedo recordar tenía algo que ya había olvidado... paz...

trate de levantarme, tambaleando de forma temerosa en un intento de no caer entre las sombras, para así no llegar a tentar mi suerte...

mi ropa se encontraba rasgada, mostrando varias eridas abiertas a lo largo de todo mi cuerpo, pero eso era lo que menos llamaba mi atención...

tenía lo que quería... esa paz... esa posibilidad de estar tranquilo mientras curaba mi cuerpo y alma... el tiempo para descansar sin preocupaciones... más en mí mente solo resonaba un pensamiento, como si de la campana de una iglesia se tratase; porqué?...

porqué tras tanto sufrimiento ahora mismo tenía paz? porqué tras años de silencio por fin reinaba mi voz? porqué mis verdugos ahora parecían ver con incertidumbre ese show que tanto se habían esmerado en crear?

revisé un poco mis manos, tan maltratadas como adoloridas, sin darme cuenta de que ahora, había luz...

no era ésa luz fría y seca de antes, si no una luz cálida, acogedora, de tonos amarillentos cual sol, resplandeciente...

era calido, acogedor, como si de un día de verano se tratase...

me acosté lo mejor que pude en el suelo, sacando una leve risa al mismo tiempo que miraba la oscuridad sobre mí, disfrutando de aquella isla de luz en un mar de oscuridad...

el porqué aun me aterraba, y el cómo era muy difuso, pero aprovecharía tanto como pueda este tiempo de calma hasta que llegue a su fin...

y hay estaba de nuevo ese olor... tan profundo y terroso... tan dulce... y agradable... cubriendo el olor de la sangre que goteaba desde mis heridas... volviendo todo tan... placentero...

me moví en mi lugar asta quedar lo más comodo posible, mientras miles de flores crecían lentamente a mi alrededor...

eran rojas y azules, amarillas y blancas, negras y púrpuras, eran todos los colores y al mismo tiempo no eran ninguno, era cómo ver un caleidoscopio, con sus manchas de color danzando lentamente mientras cerraba mis ojos, entrando poco a poco en una inmensa y completa oscuridad...

no tenía miedo, ni pánico... no me importaba estar entre las sombras, porqué de algún modo, sabia que, tras todo éso, aún que fuera temporal, solo encontraría una cosa del otro lado... luz...

~mientras tanto~

con: mmmzmzzz... *babeando dormido en el sofa, con la mano encima del pecho de su amigo durmiente*

no recuerdo que sucedió después, pero de algo sí estoy seguro... esa fue la primera noche en muchos años que, por fin, pude dormir bien...

violetas con azúcarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora