Hyung is a baby ; Kookmin fic.

03 🧸

🌷 dedicado a theyjkoo  ><

Jimin gruñó en cuánto la alarma resonó en toda la habitación.

Se frotó los ojos y con cuidado de no despertar al castañito que dormía sobre su pecho, estiró su mano para apagar la alarma de un golpe.

Hoy sería un largo día.

—Vamos, mini hyung. —le acarició el brazo con suavidad—. Tengo cosas que hacer hoy. —dijo.

Con más dificultad de la que creía, se levantó, meticuloso para después dejar al más pequeño descansar en el colchón.

Se lavó el rostro y en cuestión de minutos, se hallaba volteando con éxito los panqueques en el sartén. Esperó que el resto se cocinara mientras veía su celular, buscando ideas de atuendos para una salida casual.

Una salida casual con su ex novio de la secundaria.

Sería una vil mentira decir que no se sentía emocionado, tal cómo un adolescente en su primera cita. Estaba tan entusiasmado que por poco los panqueques se convertían en cenizas en el sartén.

Sirvió la torre de tortitas, vertiendo miel al rededor y colocando fresas frescas encima. Alistó ambos vasos con jugo de naranja y dejó el delicioso bufete que había preparado en la mesa.

Con rápidas zancadas, entró a su habitación viendo a Jungkook removerse en la cama, a punto de sollozar anunciando así que su sueño había finalizado. Sonrió y lo tomó se las axilas para acurrucarlo contra su pecho y devolverse a al comedor.

—Bien, debemos desayunar pronto porque Mimi tiene algo importante en su agenda de hoy. — le habló tal y cómo si el pequeño fuera a darle respuesta.

Picó las tortitas en pequeños pedazos para llevarlos a la boquita entre abierta del castaño, quién comenzó a masticar con su sobresaliente dientito delantero. Intercalaba sus cucharadas con las de Jungkook, por lo que fue más fácil de lo que imaginó alimentarse.

En ese momento, escuchó un par de toques en la puerta. Ni siquiera se preocupó ya que conocía a la perfección al dueño del sonido.

—¡Buenos días, cuchurrumi! — exclamó con ánimo Yoongi una vez abierta la puerta.

—Hola, Yoon. Que alegría que estés aquí porque tengo algo que hacer. — Vale, había repetido el mismo dato varias veces y no se cansaba.

—A ver, suelta la sopa. — se sentó en el sillón, con el niño sentado en el regazo en cuanto lo sustrajo del comedor.

—¿Recuerdas a Cha Eunwoo? —preguntó—, bueno, él me invitó a salir ayer. En tres horas debo estar fuera.

—¡No me jodas!—exclamó sorprendido— Pero si te has reencontrado con el papi de la secundaria. Pues me alegro por ti, que follen bien.

—No vamos a follar, deja los pensamientos sexosos fuera por una vez, Yoongi—Rodó los ojos con fastidio— Solo será una salida después de mucho tiempo. Solo de excompañeros.

—Y exnovios también, vale recalcar. —dijo con picardía.

Jimin no respondió, únicamente reprimió la gran sonrisa que estaba por formarse.

—Vas a cuidar a Kookie por esta tarde, volveré los más pronto posible. —El pelinegro abrió sus ojos viendo al bebé chuparse el dedo mientras lo miraba atentamente.

—N-no creo ser el mejor para estas cosas. No sé cuidar a un niño.

—¡Pero vamos, si es un angelito! —aseguró persuasivo.