Mi sombra

Intentando escapar

-Si claro de que quieres hablar?- me dijo frunciendo el ceño.

-De lo que paso- me pare de la cama y me sente en una silla.

-por favor, perdoname. No era mi inten.....

-no te preocupes, esta todo bien, te endiendo- lo interrumpí, con voz medio alta.

-enserio? pero pense que.....- me iba a decir algo pero lo volvi a interrumpir.

-no pienses nada, yo te amo y eso es lo que importa- me pare lo abrace y despues le di un beso corto.

Entonces me volvio a besar, ese fue un beso muy largo. Ese beso me ayudo a ssaber lo que realmente sentia. Si lo amaba, pero no queria estar con el. Me habia hecho mucho daño, pero lo amaba. Lo que me preguntaba er <<¿puedes amar a alguien tan rapido?>> pero mi respuesta siempre era la misma <<el amor verdadero>>. Cuando se acabo el beso estabamos frente a frente viendonos a los ojos, pso su mano sobre mi mejilla y la acaricio. Nos quedamos callados viendonos un largo tiempo hasta que dijo:

-vamos a la cocina, te tengo que poner pomada en ese ojo- dijo trsite, ya que el responsable habia sido el.

Asentií, me agarro de la mano y me llevo hasta la cocina. Tenia en la mesa una pomada rara, de color negra que no tenía nada mas que el embase. Me sente en una silla y cerre los ojos para que me pusiera de la pomada. Se acerco a mi oido y me susurro.

-Te va a doler- cuando dijo eso me puse nerviosa, entonces me agarro de la mano y me puso la pomada.

Esa pomada no era una pomada normal, tenia cosistas que hacia que arda demasiado. Después de unos minutos se me paso el dolor y abri los ojos. El estaba sentado a lado de mi tomandome la mano.

-que era eso?- pregunte con las voz quebrada.

-es una pomada especial para cualquier herida, que nadamas se puede usar una vez.- 

-pero.....

-shhh no digas nada, tu la necesitabas y por eso te la regale.- me dijo poniendo sus dedos en mi boca para que me callara.

Cuando ya era de noche, me acoste en mi cama y me quede dormida. A las 3 de la mañana me desperte con una alarma que tenía, fui a checar que el estaba dormido. Por suerte si, estaba muy dormido. Aproveche para agarrar cambio de ropa, comida, y todas las cosas que iba a necesitar para irme de allí. Cuando ya tenía todo me acerque a la puerta principal y vi que tenía un candado. <<piensa, piensa, donde pude dejar la llave>> Se me ocurrio un lugar donde el pendo que jamas entraria. El sotano. Cuando estaba bajando las escaleras para el sotano vi la caja, se me salio una lagrima pero tenía que buscar las llaves. Las busque en todas las cajitas que habia, pero en ninguna estaba. Entonces pense <<que tal si lo puso en la caja de mi hermana>> Me acerque y abri la caja, y ahí estaba ella, tan bonita como siempre. Me voltee no la queria ver pero no habia otra forma asi que empece a buscar las llaves. No las encontraba, hasta que las vi en las manos de mi hermana. Las agarre, cerre la caja y me fui corriendo a la entrada. Abri el candado y después sali de la casa. La calle estaba toda abandonada, no se cuanto tiempo me mantuvo encerrada,  pero en ese tiempo cambio demasiado el mundo. Empece a caminar, y caminar pero no sabia hacia donde iba. Despues de media hora me encontre con una casa, en esa casa parecia que vivia alguien. Cuando me iba a acercar, senti que alguien me miraba, voltee a todos lados pero no vi a nadie. Empece a caminar pero alguien me agarro del brazo.

-Vaya, vaya miren a esta muchachita.- era un señor todo vestido de negro, unos 30 años, tenia un gorro que lo cubria toda la cara. Unos dos hombres se acercaron a el sonriendo. Los dos vestidos de negro, con el gorro cubriendoles la cara.

-Sueltame!!!- intente safarme, pero me agarro mas fuerte y me enseño la navaja. 

-no me hagas enojar, por que no sabes de lo que soy capaz- me jalo, pero algo lo golpeo, el me emoujo y me cai. Estaba el, no puedo creerlo, como se dio cuenta que me habia escapado y que estaba aqui. Ahora que me iba hacer.....