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La cabeza le palpitaba.

Tomó asiento en una de las bancas dentro de su facultad, alumnos pasaban apresurados frente suyo, dirigiéndose hacia distintas direcciones.

Era el último día antes de las vacaciones, he ahí la explicación del estrés universitario.

Pero JungKook había entregado su último proyecto hace cinco minutos, y ahora no podía soportar el dolor de cabeza que el estrés de la semana le había dejado. Cerró los ojos mientras hacía estiramientos para apaciguar su dolor de espalda.

Cuando los abrió, la misma imagen de alumnos frente suyo apareció. Suspiró, aliviado. Por suerte ya tenía todas sus calificaciones.

Se colocó la mochila en el hombro, que en realidad sólo tenía una libreta y un lapicero dentro, y salió del edificio. Encontrándose con la calle del campus, se tronó el cuello antes de pensar en si gastar su dinero en un taxi o ir en autobús, pero entonces recordó que esa tarde tomaría el tren a Busan, por lo que tomar un taxi no se veía como algo muy conveniente.

Se estiró una vez más antes de poner un pie frente al otro, comenzando a caminar. Vagó su vista por donde sea, y del otro lado de la calle, debajo de un árbol, se encontró a una cabellera rubia agitándose por el cuerpo que la poseía, riéndose. JiMin estaba carcajeándose con SeungYoun, como casi siempre lo hacía, el más alto recibió un golpe del rubio.

JungKook los miró, deteniendo su paso. Los miró por mucho rato, sin darse cuenta de que había quedado ensimismado con la forma en que los labios de JiMin abrían paso hacia esos dientes deslumbrantes, dando como resultado una sonrisa preciosa.

Un brazo al rededor de sus hombros lo sacó de su ensoñación, dio un pequeño salto por el repentino contacto físico, y cuando su vista enfocó al chico de cabello corto a un lado suyo, le dio una pequeña sonrisa.

¿Ya vas a casa? JiHyun preguntó, comenzaron a andar.

Ya respondió algo distraído, mirando de reojo cómo JiMin y SeungYoun caminaban también hacia la misma dirección, aún del otro lado de la calle.

Te juro que estuve a punto de llorar con el señor Kang, no quería aceptarme el proyecto porque no tenía el margen que pedía.

¿Es en serio? preguntó asombrado, ajustándose la correa de la mochila, JiMin y SeungYoun estaban a punto de cruzar la calle.

Sí, hombre, ChanYeol y yo casi nos arrodillábamos. Pero el hombre ese sólo comenzó a reírse y nos lo entregó. Te digo, ¡es el diablo!

JungKook dejó salir una risita y asintió, de acuerdo, el señor Kang era el diablo, es por eso que antes de enviar su trabajo había revisado mínimo seis veces si había cumplido con los requisitos del formato.

Ahora la espalda de JiMin estaba a unos metros suyo.

ㅡ¡Hey, ahí está hyung!

¿Y cuánto sacaste? preguntó para evitar que llamara a JiMin, pero JiHyun ya se le había adelantado.

¡Hyung!

El rubio se giró ante el llamado, con una enorme sonrisa en su rostro. Detuvo el paso, al igual que SeungYoun, mientras se acercaban a ellos.

Hey saludó JiMin, JungKook definitivamente trató de pensar que era el tipo de voz que usaba siendo badtzmin. ¿Terminaron?

Por fin respondió su amigo a la par que quitaba el brazo de sus hombrosㅡ. El diablo casi no me aceptaba mi trabajo final.

badtzmin :: jikookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora